En Cada Cumpleaños

Cap. 19~Reflexión de una adolescente

... Soy Esst o Estrella, como prefirais.
Yo prefiero el primero.
No puedo dormir.
No dejo de llorar.
Fui una ilusa.
Me engañó completamente.
Compartí con Luis algo que no sabía nadie fuera de mi familia.
Ni a Rob se lo dije.
Ni a mi mejor amiga.
Y ahora lo sabía todo el Instituto.
Se han reído de mí.
Se han burlado de mí.
Pero no tienen motivos para ello.
Eso del acoso escolar o bullying es una mierda.
Una mierda.
No quieren que haya bulímicas ni anoréxicas y aún se burlan de la gorda.
Hay gente que se ha llegado a suicidar porque hay personas que no les dejan vivir.
Les hacen sentir feos feas, gordos o gordas, raros o raras.
Les hacen sentirse miseria y ellos no lo son.
Todos somos diferentes.
Unos necesitan aparato dental, otros necesitan corsé, otros audífonos, otros sillas de ruedas, otros medicarse.
No somos distintos.
Todos enfermamos.
Y en el caso de que llamen miseria a alguien se deberían mirar ellos mismos al espejo porque no son diferentes.
Diferentes carácteres.
Diferentes físicos.
Unos más altos.
Otros más bajos.
Unos más flacos.
Otros más gordos.
Y respecto a la belleza depende del punto de vista.
Hay quien a una persona resulta feo y a otra guapo.
Diferencias, sí.
Pero iguales sentimientos.
Capaces de sentir emociones iguales.
Capaces de ofrecer cariño.
Capaces de llorar.
Capaces de reír.
Capaces de ser felices.
O de arruinarse la vida.
Unas personas llegan a sentirse tan mal que se suicidan.
Otras se cortan.
Unas se drogan.
Otras se emborrachan.

Yo en mi caso tengo muy claro que no voy a hacer nada de eso. Le he contado a mi madre lo sucedido. Dice que todo va a salir bien. Me va a cambiar de Instituto y nos vamos a otra ciudad.
Sé que todo va a salir bien. Ahora lo sé.
Luis no era perfecto como parecía. Entonces fue cuando entendí que nadie puede ser perfecto. Que cuando se presentó algo que no esperaba se rindió como un cobarde Pero mira mejor. Aquello no era amor.

Siento de veras si esperabais una historia mejor pero es que esta es mi historia. Es mía y siento si os ha decepcionado pero es que pasó así, un día era feliz y al otro todos me miraban y cuchicheaban entre ellos.
Creo que la sociedad se engaña a sí misma.
Hace dos siglos tenías que estar gorda para demostrar riqueza y ahora tienes que estar como un fideo.
Me parece ridículo.
Me entristece saber que la sociedad es así.
Yo me avergonzaba de tener que medicarme y por ello nunca lo dije. Pero ya no.
Ya no.
He vuelto al mismo Instituto y me va bien, mis verdaderas amigas siguen conmigo y en los estudios cada vez mejor.
Me di cuenta de que allí también habrá alguien en quién crea confiar y puestos a pasar por lo mismo, mejor aquí, que ya está hecho.