Capitulo veintitrés. Píldora.

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-Está despertando-Dijo una voz que claramente conocía, Derek.

-¿Adeline?-Se posicionaron a mi lado-Háblame, ¿estás bien?

-Ah...-Intente decir pero nada salir de mi boca-Ten...

-¿Qué?

-Que tengo hambre-Susurre.

Se escucharon dos risas y varios suspiros de alivio, sonreí y me toque el estómago, había olvidado algo, pero no sabía que. Me frote los ojos y intente recordar. MIERDA. La sonrisa inmediatamente se borró de mi rostro, me intente levantar, pero lo único que logre fue que todo el cuerpo me doliera como los mil demonios.

Pero si soy estúpida, si soy idiota, si ya no soy virgen y se suponía que el día de ayer tenía que tomar la pastilla. DEMONIOS. Yo no puedo tener hijos en este momento, apenas y puedo cuidar una tortuga, apenas puedo cuidar de mi vida y ya voy a tener hijos. Debe ser el puto colmo, pero me enoja, porque Derek fue quien metió su cosota, también es su responsabilidad decirme que debo de tomar la píldora. Él se encontraba al lado de la cama, mirándome misteriosamente. Le hice una seña con los ojos. Pero el muy idiota no lograba entender que era lo que sucedía.

-¿Saben chicos?-Hable y todos me miraron-Creo que quiero estar sola.

-Adeline-Mire instintivamente a la pelirroja-Perdón por lo de anoche, enserio.

-No pasa nada-Me rei-Ademas, me la pase muy bien.

-Y yo le advertí he-Isaac me señalo diciéndole a Derek-Ella fue quien no quiso hacer caso.

-Isaac-Me miro-Cállate, a nadie le interesa.

-A mí me interesa-Contesto Derek cruzado de brazos, como siempre.

-¿Y a ti desde cuándo?-Pregunto Stiles con una mirada acusadora y cruzándose de brazos también.

-Eso a ti no te incumbe debilucho Stiles.

-¿QUE FUE LO QU...

-CHICOS-Grite enojada-TODOS FUERA, ¡AHORA!

Inmediatamente todos los presentes en la habitación se fueron, pero el último en salir fue Derek, quien me miro, yo le hice una seña de que cerrara la puerta. El la cerró y se acercó a mi rápidamente. Tomo mi cara entre sus manos y me beso, y vaya que lo necesitaba, necesitaba tanto de él, de sus labios, era mi maldita droga.

-Derek-Hable en medio del beso-¿Recuerdas lo que hicimos...en tu casa?

-Claro-Sonrió-Como olvidarlo.

-Ah pues-Me mordí la uña con nerviosismo-¿Recuerdas que te dije que tomaría la pastilla del día siguiente...?

-No me digas que...

-No, no, claro que no-Suspire-No la he tomado, la he olvidado por completo. Pero no sé si estoy...

-Ahora mismo iré a comprarlas-Abrió la ventana de mi habitación y salió sin decir nada más. Me quede en silencio un momento.

-¡Claro amor! Yo también te amo-Grite con sarcasmo-Ihiri mismi iri a cimprirlis-Repeti enojada.

Quien entiende al bipolar de Derek, primero me la mete y después se arrepiente. Mierda, eso rimo perfectamente, soy toda una poeta.

Al pasar media hora Derek llego con la caja de pastillas, era de 48 horas, así que todo está bien, no había de que preocuparse. Pero se tuvo que retirar ya que tenía algunas cosas que hacer, nos dimos un largo beso de despedida y se marchó. Yo decidí levantarme a comer algo y me encontré con Isaac y mi hermano en la cocina, charlando, bueno, más bien estaban susurrando.

-¿Entonces...-Ellos se sobresaltaron con mi voz-a quien asesinaron?

-Hoy haremos guardia para cuidar a mama, por si quieres acompañarnos-Dijo Scott amablemente-Tememos que quien está haciendo los sacrificios se lleve a los sanadores. Y mama es una de ellos.

-Está bien.

Mi madre ya estaba dormida así que nos metimos a su habitación sigilosamente, me senté en una silla que estaba ahí, Scott haría la primera guardia, luego Isaac y al final yo, y así sucesivamente. Pero comenzó a darme sueño, estaba cansada. Había tenido días pesados, solo quería dormir, y eso fue lo que hice.

-Chicos...-Dijeron a lo lejos-¡CHICOS!

Me levante de la silla atontada y adormilada.

-¿Qué creen que hacen?-Pregunto mi madre enojada.

-Ah...estábamos cuidándola-Contesto Isaac mientras se estiraba.

-Es que no queríamos que fueras el tercer sacrificio mami-Hice un puchero.

-Pero todos estaban dormidos...

-Tú estabas vigilando al final...-Me señalo Isaac.

-¿De qué hablas?-Fruncí el ceño-Era tu turno de vigilar.

-No, te tocaba vigilar a ti.

Agache la cabeza avergonzada.

-Ah...puede que me haya tocado a mí al último-Confesé.

Mi mama soltó una enorme carcajada-Mis héroes, oigan, ¿no dijeron que todos los que desaparecen son doctores? No hay un doctor antes de mi apellido así que estoy a salvo.

-Pero si, podría tratarse de cualquier clase de sanador mama y tu definitivamente actuaste así ayer-Scott sonrió.

-Si...pero no creo que vaya a ser sacrificada el día de hoy, así que vayan a la escuela.

-Lo que me faltaba.

**

FELIZ NAVIDAD Y AÑO NUEVO ATRASADO! Las amo como no tienen una puta idea, lo son todo, por siempre estar siguiendo la novela. LAS AMO!  


Banshee. (#1 Derek Hale) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora