La historia solo acaba de empezar.
El camarero el díptero retira,
pero el caldo espumante no lo tira
pensando en quien después pueda llegar.
Al ratito, aparece por el bar
un marica, que al guapo mozo mira
ahogado de calor. Luego respira:
"¡Camarero! Una caña pa empesar:"
El mozo va y le da la del gitano.
El otro busca el gusto; pero en vano.
Y dice el camarero: "Escucha, guapa,
¿quieres con la cerveza alguna tapa?"
Y el moña le contesta descompuesto:
"¡Una poca de caca le va a esto!"