Mi verano especial.

Capítulo 15. Más golpes.

Capitulo 15.

-Nick, vete por favor - le suplico, no quiero que más gente sufra.
-Explícame esto, te ha golpeado y lo defiendes.
-Ha sido sin querer- se excusa Thomas- jamás le haría daño a mi nenita-me mira mientras dice esto último, como si fuese el mejor novio del mundo.
-Adriana...-insiste Nick- quiero hablar a solas contigo.
-Si si, yo os dejo solos- sé que está enfadado- luego te veo nena.

Thomas se aleja de nosotros y me relajo un poco.

-Ahora me vas a contar la verdad-me reclama Nick.
-Nick, de verdad, no ha pasado nada-necesito que me crea- sabes que os lo contaría, sois mis amigos.
-Por esta vez voy a confiar en ti, pero estaré atento-me mira seriamente, pocas veces había visto a Nick serio- con estas cosas no se juega.
-No le digas nada de esto a los demás, por favor-le digo mientras le abrazo- no quiero preocuparos por nada.

Al día siguiente, nos reunimos en la plaza, hoy toca jugar un partido de fútbol, por fin algo de alegría.

Ben está en el equipo contrario, llevo tanto sin hablar con él. Pero es por su bien, prefiero que se enfade conmigo a verle herido por mi culpa.

Por un rato me olvido del infierno que estoy vivivendo últimamente, me encanta el deporte y sobre todo el fútbol. Por primera vez voy perdiendo pero no me importa. Ben marcó para su equipo y me miró, no pude evitar aguantarle la mirada, desde entonces cada vez que nos cruzamos, nos miramos, no puedo evitarlo.

-Narra Thomas-

Se está riendo de mi en toda mi cara. Se cree que no la veo como tontea con ese. Ya le dije las consecuencias que habría si no me hacia caso. Le tengo que dar un pequeño susto. Pero tengo que tener cuidado nadie puede verme.
Para el segundo tiempo, entro yo de arbitro, es mi oportunidad. En cuanto ese niñato esté cerca haré que caiga.

-Narra Adriana-

Corro para defender la portería y escucho un grito de dolor que me sobresalta. Me giro hacia el mismo lado que mis compañeros. Hay un grupo de gente alrededor de alguien pero no logro verlo. Busco a Ben con la mirada y al no verlo, me da un vuelco el corazón.
Voy hacia ellos y por fin veo quien está en el suelo. Ben se encuentra recostado, ayudado por Nick y otro chico, tiene algo de sangre en una rodilla y una ceja partida. Thomas ha llegado a mi lado e intenta sacarme de allí pero me niego, otra vez se enfada, pero ahora solo me importa Ben. Los chicos le ayudan a ir a la enfermería ya que se encuentra mareado. Me abro paso y me pongo frente a él. Le veo sonreír cuando me ve y eso me tranquiliza un poco.

-Chicos-dice Nick-creo que es mejor que nos vayamos-todos le hacen caso y pasan por mi lado. El último en salir es Nick, que me guiña un ojo antes de salir.

No sé muy bien como empezar, después de todo lo malo que le he dicho, me siento como una estúpida. Espero que la enfermera termine de curarle y me acerco a la camilla.

-¿Te duele?-le pregunto. No me contesta, dios, esto está siendo incomodo. -Te has llevado un buen golpe eh- sigue sin contestar. Esto me pone nerviosa y cuando estoy nerviosa hablo mucho-¿Qué tal la rodilla? Por una vez no soy yo la herida eh, que mala suerte que te pasará cuando ibais ganando, ¿has jugado antes al fútbol? Bueno, qué tonta, claro que habrás jugado-me estoy desesperando-¿por qué no contestas?
-Llevo tanto sin oírte hablar, que podría pasarme toda la tarde escuchándote- debo de estar roja como un tomate. Maldito dios griego-¿Por qué Adriana?
-¿Por qué?- no sé de que me habla-¿de qué?
-¿Por qué estás con él?-dice ahora más serio-no te entiendo.
-Prefiero dejar eso de lado-me siento mal al mentirle-¿te duele?La pierna digo.
-No ha sido nada, una tontería. Y lo de la cabeza otra tontería- me dice intentando quitar hierro al asunto.

Le toco la frente suavemente, pasando cerca de su herida pero sin hacerle daño. Nuestros ojos se encuentran y por un segundo siento la necesidad de decirle la verdad. De decirle que lo siento mucho.
Se acerca más a mi, sus ojos bajan por mi nariz hasta mi boca y después sube otra vez hacia mis ojos.
-Te lo pregunto otra vez- me dice calmado- ¿por qué? No quiero que sufras- yo tampoco quiero que tú lo hagas pienso.
Me despido de él antes de que me haga más preguntas y me voy a la cabaña a cambiarme antes de comer. Al salir del baño me encuentro con Kelly con cara de pocos amigos.
-Me vas a contar ahora mismo que pasa contigo.
-No sé de qué me hablas-intento pasar pero no me deja-Kelly, dejame pasar.
-Hasta que no me lo cuentes todo no te dejo ir.
-Es que no sé de qué hablas-intento hacerme la tonta.
-Estás con ese tonto, que es un agresivo, no te entiendo. Él hizo que Ben tuviese esa caída, yo lo vi-no asimilo lo último que ha dicho.
-Me dijo que no le haría daño...-susurro para mi,pero kelly me escucha.
-Sabía que había algo raro. Cuenta -me mira- ahora.
Después de contarselo todo, tengo que pararla porque quería ir a golpear a Thomas. No puedo dejar que haga eso o le hará daño a ella también.
Me sube las pulseras que llevo en las muñecas y lleva una mano a su boca.
-Dios mío, Adriana- siento pena en su mirada-¿te ha pegado? Debiste contarlo.
Llegamos al acuerdo de que yo iré a hablar con Thomas sobre lo ocurrido, me prometió no hacerle daño a Ben y lo ha incumplido.

Lo busco por todos lados pero no lo encuentro, así que decido ir a su cabaña. Como esperaba está allí. Al verme puedo notar su enfado. Yo lo estoy más.

-Por fin te dejas ver- me grita- ¿estabas con el niñato? ¿Ya te lo has tirado?
-No voy a seguir contigo- es lo primero que consigo decir- me das asco.
Sin esperarlo me agarra del cuello y me estampa contra la pared.
-No me vas a dejar- dice tranquilamente. Tan tranquilo que asusta- eres mía ¿entiendes?
-Le has hecho daño- intento decir ya que sigue apretándome contra la pared- no seguiré contigo.
Me tira al suelo de pura rabia. Necesito salir de aquí. Me llevo una mano al labio y veo que tengo sangre. Intento levantarme pero él lo hace por mi.
-Das pena- me dice sin soltarme- ¿me quieres dejar para irte con ese? Eres una puta.
Me acerca a él e intenta darme un beso pero me opongo. Recibo una bofetada de su parte y caigo en la cama. Doy gracias de no haberme golpeado con el suelo.
Thomas se acerca y cuando creo que me va a golpear otra vez, la puerta se abre. Ben.