Capitulo 21º

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DIMITRI BELIKOV

Un rayo de sol cegó mi visión luego que abriera mis ojos, mire a ambos lados pero no veía a mi Roza por ningún lado, me encontraba totalmente solo, me levante y la busque en el cuarto de baño pero no estaba y sus cosas tampoco, no podía creer que se haya marchado sin siquiera despedirse, vaya a saber cuando la volveré a ver, perdí parte de mi, no se a donde fue, se que solo serán tres años, pero mi corazón dice otra cosa... Rápidamente me cambie y fui a ver a Lissa, quien siendo abrazada por Christian y llorando desconsoladamente gritaba el nombre de su mejor amiga. Miro a Christian a los ojos y con un gesto de afirmación le reconfirme que Rose se había marchado, pasados unos días la Reina se encontraba en un estado alterado, envió a varios guardianes a recorrer la zona en su busca y dio una alerta de que si la veían que con suma urgencia la trajeran al castillo. Pero el peso del concejo podía mas que ella, de pronto Alberta se acerca hacia mi;

- Guardián Belikov me ha llegado una noticia, al parecer vieron a Hathaway en una gasolinera en las afueras de Montana-

- ¿Estas segura de esto?

- Si, es una fuente confiable, un sujeto que trabaja para nosotros confirmo ver a una mujer con las características de ella-

- Si estaba en las afuera de Montana, de seguro el concejo la envió otra vez a la Academia de St Vladimir-

- Seguro, ante esa pista es lo mas probable, déjame decirte una cosa Belikov, no planees decirle a la Reina ni mucho menos ir a buscarla o verla, nadie puede saber esto, solo tendríamos que confirmar que se encuentre alli.-

- No le diré nada a la Reina pero de lo otro no puedo asegurarte nada, a menos que se confirme que este alli recién ahi me quedare mas tranquilo.-

- Tu no cambias nunca, antes eras diferente y ahora...estas mejor ahora-

- Sigo siendo el mismo, solo que ahora estoy enamorado y eso es algo maravilloso que no quiero perder-

- Se que nosotros tenemos una obligación por la cual pasamos años entrenando pero el día en que nos enamoramos seremos capaces de hacer cosas que no imaginábamos-

- Tienes razón  y nunca le agradecí por guardar aquella vez el secreto de Rose y yo-

- No tienes que  agradecer yo me entere cuando se hizo publico(una sonrisa se formo en su boca)- dijo Alberta mientras se daba vuelta para irse

ROSE HATHAWAY

Luego de irme del castillo, una camioneta con vidrios polarizados me esperaba fuera, subí y arrancamos el largo camino, una vez alejados un poco, me recosté en el asiento trasero y desde ahí miraba como pasaban velozmente la copa de los arboles y me quede dormida. En un momento la camioneta se detuvo, me levante y vi que habíamos parado en una gasolinera, les pedí por favor a los guardianes que me dejasen ir al tocador, me acerque al mostrador y le pedí amablemente al señor que estaba atendiendo, si me dejaba pasar al baño y él accedió. Cuando salgo del baño un gran mareo me tomo desprevenida, mi sed estaba activo, necesitaba alimentarme, cuando fui hacia el auto les dije a los guardianes quienes se miraron entre si y dijeron - Sube que te llevaremos a un lugar que queda por aquí cerca-, subí al vehículo y de repente estaba en un comedor donde hombres y mujeres se ofrecían como alimentadores. Una vez que sacie mi sed, retomamos el rumbo.

Algo me resultaba familiar del camino, si mi memoria no me falla creo que es el camino a Montana a mi querida Academia de St Vladimir, bueno veamosle un poco el lado positivo o mejor dicho cómico, volver a cursar los años que ya había hecho, volvería a ser una estudiante adulta(riendo), una vez que llegamos a la  entrada mi sonrisa se hizo mas grande, tenia razón y mucha razón hacia donde iba. Cuando baje del auto me esperaba Ellen Kirova en la puerta y siempre con su misma cara de arrogante, me da las bienvenidas e irónicamente se ofrece a darme un tour por la academia pero le agradecí cordialmente y dije que ya la conocía demasiado bien. Me escoltaron a mi lugar en las afueras del castillo, según las ordenes del concejo tendría que estar alejada del resto de los estudiantes, cambiaron mis horarios de alimentación, en fin ser una deshonra para los Dhampirs y Morois no es tarea fácil. Mis primeros días fueron realmente duro acostumbrarme al horario de alimentación y un cambio realmente de trecientos sesenta grados. Dos meses pasaron ya desde que pise otra vez la academia, lo único que me incentivaba a seguir es que solo me faltan dos años y diez meses para volver a ver a mis amigos y al amor de mi vida, durante una clase mi estomago comenzó a revolverse, unas inaguantables nauseas me invadían, mi malestar se reflejo en mi rostro, que el profesor pidió por favor que me dirija a la enfermería, allí el doctor no estaba así que  me recosté en una de las camas a descansar por unos segundos, en cuanto vi que mis nauseas mermaron, me levante de la cama y volví a la clase por mis cosas y de ahí directamente a alimentarme, hicieron falta tres alimentadores para saciar mi sed. Por suerte que mis horarios son todo lo opuesto a lo de los estudiantes, tengo un profesor para mi solita, ha y sin olvidarme hasta los doctores se van porque una ves por semana tengo la visita de uno personal, asignado para revisar mi estado. Al día siguiente cuando salia de bañarme, alguien golpea mi puerta, cuando pido que aguarde un minuto a que me ponga algo, siento que abre la puerta, quien era ni mas ni menos que mi ma....que la Sra. Janine Hathaway. 

Se acerco a mi y con gran fuerza me abofeteó dejando ligeras marcas de sus dedos;

- ¿Que demonios te sucede?- dije apretando mis dientes para no reaccionar violentamente

- ¿ A ti que te sucede?, ¿Como es eso que eres una Moroi?- dijo Janine gritándome

- ¡Como vez! ahora no se como, pero soy una Moroi, y no necesito a alguien que venga a golpearme sin saber como fueron las cosas- dije

- Hum...aunque te hagas Moroi, sigues siendo la misma niña altanera de siempre, necesito saber ¿que paso por tu cabeza en el momento que decidiste hacerte Moroi?- dijo ignorando por completo lo que había dicho

- ¿Crees que estoy feliz de estar así?, lo mas probable es que debes estar pensando que yo quise ser así para poder estar con Dimitri y formar una familia, pero lamentablemente no es así, porque tengo que vivir completamente alejada de ellos, soy una deshonra para los Moroi y tambien para los Dhampirs- dije con lagrimas en mis ojos y voz temblorosa

- ¿Entonces porque lo has hecho?

- Lo primero que debes saber es que no lo hice apropósito, porque ni siquiera sabia que se podía, y segundo fue en un accidente que me sucedió hace bastante, que de seguro no sabes nada porque se que no te intereso, solo aquella vez que pensé que de verdad habías cedido un poco ante mi, pero me equivoque. Siendo un poco consiente de ello, ¿tu sabias que un Dhampir podía convertirse en Moroi?, porque tu forma de hablar me resulta algo confusa- dije inclinando mi cabeza para entender 

- No, no lo sabia, acabo de enterarme y tambien quede en shock cuando me lo decían, entonces miles de cosas pasaron por mi mente, y todos tus sentimientos hacia Dimitri, por eso pensé que tu imprudencia te había jugado una mala pasada- dijo mientras trataba de arreglar las cosas

- Pues no ya vez todo esto fue un simple accidente y yo no planee nada, eso es lo que quiero que entiendas, ya vez ahora tengo que cursar de nuevo la academia para aprender a ser una Moroi, recibiré una ayuda económica, de seguro dada por mi padre, porque lo mas probable que ahora si este orgulloso de tener una hija Moroi(dije entre risas)-

- Rose...Rose sabes que con tu padre te amamos igual seas o no Moroi, el concejo me pidió que este aquí acompañándote estos años, y si todo sale bien seré yo quien elija a tu guardián-

- ¿lo dices enserio? ya pensaba que te habían asignado a ser mi guardiana, eso si seria raro, en fin, ¿podrías dejar que termina de cambiarme?

- Oh cierto, lo lamento y me marcho-dijo mientras salia

Cuando salió mi cuerpo cayo muerto sobre la cama, puse mis manos sobre mi rostro y me dije a mi misma que tengo que seguir adelante, me cambie y luego fui con mi madre, una semana paso volando, cuando estaba saliendo de alimentarme, me quede quieta un momento para pensar en algo que me ha estado ocurriendo, desde hace bastante tiempo que me alimento demasiado a comparación del principio, lo que recordé fue cuando Lissa usaba sus poderes se alimentaba en exceso para recuperarse, pero como no tengo poder alguno y no hago ejercicios, me parecía raro, pero lo que estoy demasiado nerviosa últimamente debe ser la consecuencia. Luego de un día de mucho estudio y exámenes, por fin entraba a mi cuarto, me recosté en la cama y ahí me quede dormida profundamente.









Nueva Vida: RevertimientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora