CAPITULO 13: AL BORDE DEL ABISMO.

68 3 0
                                    

Mark y Rose visitaron a Sloane, bueno a despedirse.

Sloane estaba triste, aun no podía ir a la universidad, apenas y se ponía de pie.

- Si podemos vendremos el viernes – dijo Mark.

- Recupérate pronto Sloane, queremos verte por allá.

- Lo harán pronto, Rose.

- Bueno nos vamos, cuídala – me dijo Mark.

- Siempre – le conteste.

Rose y Sloane se despidieron y luego ellos se fueron.

Mire a Sloane, estaba sentada en el sillón de su sala, medio triste, me acerque a ella y la obligue a mirarme.

- ¿Qué tienes? – le bese la mejilla.

- Ya quiero caminar.

- No te desesperes, lo harás pronto.

- Pero…

- Sloane no te des por vencida tan rápido.

- Es fácil para ti.

- No, es muy difícil verte así, yo te amo y me duele ver esta carita así – le toque la punta de la nariz con mi dedo índice.

- Te amo – dijo sonriendo.

- Te amo mas – se acerco aun más a mí, sumiendo su cara en mi pecho, mi barbilla topaba con su frente.

Sentí como Sloane suspiraba profundamente, toque su rostro y estaba mojado, levante su cara y grandes lagrimas caían de sus hermosos ojos, bese sus mejillas.

- ¿Por qué lloras?

- Porque te tengo conmigo, porque te amo tanto que no quiero perderte pero…

- ¿Pero que…? – dije consternado por sus palabras.

- Algún día lo hare…

- No… no me perderás.

- Si y no podría soportarlo, pero no soportaría aun mas tenerte amarrado a mi, que no puedo caminar y no se si algún día lo haga.

- Sloane, ¿estas consciente de tus palabras?

- Si – sus palabras hicieron eco en mi cabeza.

- Llevas un día, un solo día con el fisioterapeuta y ya dices que no volverás a caminar.

- Ian hay que ser realistas – dijo ella, muy segura de si.

- No, tu se realista… ya te das por vencida, sin siquiera haber luchado y me dices que me tendrás amarrado, no quieres eso y por eso…

- Por eso debemos terminar – finalizo.

- ¿Qué?

- No soporto estar así.

- ¿Así como? – me levante rápidamente y la mire a los ojos.

- Que tengas que estar cargando conmigo…

- Sloane, déjame estar cerca de ti – me arrodille ante ella sosteniendo su mano.

- No.

- ¿Por qué?

- Porque no puedo hacerte pagar con mi pena.

- Todo esto es mi culpa.

- Claro que no.

- Si y déjame decirte que no te voy a dejar sola, no me alejare de ti, ¿me oyes?

- No quiero verte, no quiero tu lastima.

¡Te Sigo Amando!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora