Me metí en la cama e intenté dormir pero no lo conseguí así que bajé al comedor y encendí la tele. Había maratón de Historias Corrientes, mi serie favorita.
Eran las 2 de la mañana cuando ví una sombra en las escaleras. La luz de la televisión permitió ver su rostro. Era Johnnie.
- Hola - le dije - ¿Que haces despierto a estas horas?
- He tenido una pesadilla y he decidido bajar a por un poco de agua - dijo medio dormido - ¿Y tu que haces despierta? - preguntó -
- Bueno, no podía dormir asi que me bajé a ver la tele un rato ¿Quieres quedarte aquí? - le pregunté -
- Claro, voy a por un vaso de agua y ahora vengo ¿quieres que te traiga agua? -
- No, gracias - dije con una sonrisa -
Johnnie volvió con el agua y se sentó a mi lado. Nos reiamos con cada tontería que pasaba en la serie. Johnnie me escupió el agua encima porque no paraba de reirse.
Nos quedamos dormidos en el sofá y la tele se quedó encendida.
Cuando nos despertamos era la 1 y media del mediodía y mi tía estaba preparando la comida.
- Buenos días tía - dije adormecida -
- Buenos días Claire - dijo Johnnie de la misma forma -
- Buenos días chicos. Ayer os pasasteis la noche de juerga. - dijo divertida -
- Si - dijimos los dos al mismo tiempo riéndonos -
- Estoy preparando la comida, id a sentaros si queréis -
Johnnie y yo nos dirijimos a la mesa. Al rato llegó mi tía con los espaguetis. La comida pasó silenciosa. Terminamos de comer y nos sentamos en el sofá. Johnnie y yo estuvimos hablando de tonterias hasta que llamaron al timbre. Abrí la puerta y me encontré a Mary.
- Hola cariño ¿está mi hijo? - dijo la mujer -
- Sip - dije remarcando la 'p' - ¡Johnnie! - dije llamándole - Ha llegado tu madre -
Johnnie se asomó a la puerta.
- Hola mamá -
- Hola cariño ¿que tal te lo has pasado? -
- Muy bien - dijo alegre -
- Me alegro. Bueno, nos vamos ya, gracias por todo -
- No se preocupe Mary - dije amablemente -
Johnnie y Mary se fueron y yo me pasé la tarde aburrida sin nada que hacer.