Funeral

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Richelle P.O.V.

Ha pasado una semana desde que los padres de James fallecieron y que él despertara de su coma, pero sus hermanas siguen estándolo y me da muchísima pena.

Riley y los chicos estan con él cuando pueden ya que no ha vuelto sonreir, sólo cuando está con Riley y los chicos.

La señorita Kate, Phoebe y la Compañía A antigua y la actual estamos para todo y le ayudamos con lo que podemos.

Hoy era el funeral, ahora mismo me estaba preparando ya que enseguida me iba a recoger Noah para irnos. Tenía puesto un vestido por encima de las rodillas negro y es de tirantes y mi pelo rubio recogido en una trenza de costado y mi maquillaje es casi natural, el brillo sólo me resalta un poco los labios y tengo bailarinas negras.

Pero entonces escucho a mi madre gritar

—¡Richelle! ¡cielo tu novio está aquí!—me grito mi madre a lo que el color subió mis mejillas.

¿Mi novio?

Entonces salí de mi habitación y me dirigí hacia la sala de estar.

—¡Mamá!—le grité bajando las escaleras y me miro confundida.

—¿Que pasa tesoro?—me preguntó ella perpleja.

—¡No somos novios!—la regañé rodando ojos.

—Cielo no hace falta que sigas fingiendo.—me sonrió mientras que se pasaba las manos por su rubio cabello.—El otro día hablamos tu padre y yo con Noah y nos dijo que estabais juntos.—me dijo sonriente a lo que mi expresión era todo un poema, entonces sentí ira ¡Dios que vergüenza con mi padre!—¿Estas bien cielo?—me preguntó mirándome dulce.

Me dí una palmada en la frente.

—¡No! ¡No estoy bien! No estamos juntos ¡¿porque se inventó eso?! Papá me va a odiar ¡por toda la vida!—empecé a hablar sin callarme y a imaginarme lo peor.—No me imagino su expresión...¡le prometí que no tendría novio hasta los dieciséis y medio!—le dije paseando por toda la sala, ella solo me miraba burlona.

—¿Y tu la ibas a cumplir?—sonrió suspirando.—Tesoro tenemos que ser más realistas, estas creciendo y tu padre tendrá que aceptarlo, y cariño...—hizo haciendo una pausa y acercándose a mi y mirándome pícaramente.—Yo te cree aquí dentro y se que estas con él, a mi no me puedes engañar.—me dijo riendo y fue a abrir la puerta.

—Mamá, por favor no toques el tema delante de él.—le pedí antes de que abriera la puerta.

—Esta bien si así lo prefieres.—me dijo rodando ojos a lo que abrió la puerta y entró Noah.

—Buenas tardes señora Nolet.—la saludó sonriente.

—Hola Noah, que alegría verte aquí, Richelle te estaba esperando, ¿Quieres un vaso de agua?—le preguntó mi madre dulcemente.

—Si por favor.—le dijo Noah a lo que mi madre se fue a por el agua.

Entonces hubo un silencio sepulcral en el salón cuando mi madre se fue, yo sólo lo fulminaba con la mirada. Él me miro y se acercó a mi y me dio un beso en la mejilla.

—¿Que pasa cielo?—me dijo burlón a lo que yo le agarré del brazo y lo arrastré hasta el patio exterior.—Oye sabía que querías verme ¡pero no sabía que tenías tantas ganas!—me dijo sonriendo y le solté el brazo y le mire enfadada.—¿Que?—me preguntó confundido.

—¡¿Estas loco?! ¿Como pudiste decirle a mis padres que estamos juntos cuando en realidad no lo estamos?!—le pregunté nerviosa a lo que él se reía.—No me lo puedo creer...—dije suspirando.— ¿Que pensará mi padre ahora de mi?—le dije gritando.

—Oye ¡cálmate cielo!—me dijo sonriendo.

—¿Que me calme Noah?—respondí histérica.—¡Tu y yo no estamos juntos, te quedo claro! ¡Y no me llames cielo!

—Esta bien cielo.—dijo sonriendo y exagerando la palabra a lo que yo le mire mal.

—Como vuelvas a llamarme así, te juro que en tu vida volverás a decir esa palabra.—dije seria mientras me cruzaba de brazos.

—¡Esta bien! Esta claro que no estas de buen humor.—me dijo sonriendo.

—¡¿Porque será?!—le dije sarcástica a lo que entramos en mi casa de nuevo.

Mi madre dejó el vaso de agua encima de la mesa y nos miro.

—Chicos, creo que debéis iros ya es tarde.—nos dijo con media sonrisa

—Esta bien.—dijo Noah mientras que tomaba el vaso de agua.—Gracias señora Nolet, un placer verla.—se despidió sonriente.

—El placer es mío, adios cielo ¡cuídate!—me abrazo y me dio un beso en la frente.

—Adiós mamá.—le dije seria y nos fuimos.

Una vez salimos de casa entramos en el coche nos empezamos a dirigir hacia la iglesia, en todo el camino Noah no paraba de mirarme y realmente era bastante incómodo.

—¡Noah!—le dije y me miro confundido.

—¿Que?—me preguntó con el ceño fruncido.

—¡Para de mirarme!

—Disculpa, esque no hay nada más bonito en lo que mirar.—me dijo sonriendo pícaramente mientras el color subía pos mis mejillas.—Te ves dulce cuando te sonrojas.—volvió a decir sonriendo.

—Cállate.—le dije sin más a lo que dirigí mi vista hacia la ventana sonriente, él solo rió.

Estaba empezando a perder puntos, primero le dice a mis padres que estamos juntos cuando no es verdad ¡y ahora se la pasa llamándole cielo a todas horas! ¡Es increíble!

Dejando de lado mi pensamiento, ya estábamos llegando a la iglesia. Todos estaban fuera vestidos de negro, estaban: la familia de James, la antigua compañía A y la nueva, la señorita Kate, Phoebe, Riley, Emily, los chicos de Lost&Found y otros amigos de James.

Entonces bajamos del coche, antes de seguir Noah colocó mi brazo entrelazándolo con el suyo.

—¿Que? Nos vemos bien juntos.—yo simplemente rodé ojos.

Nos dirigimos a Riley, que tenía un vestido negro con campana, mangas cortas y su vestido dejaba ver el collar que le habia regalado James cuando cumplió 15, sus zapatos eran como los míos y su pelo estaba rizado. Su maquillaje era más oscuro que el mío y su brillo de labios también, entonces cuando llegamos a ella Noah y yo la abrazamos.

—¿Que tal?—nos preguntó sonriente.

—Muy bien.—dijo Noah pícaro mirándome.

—¡No todo va mal!—lo contradije seria.

—¿De que me he perdido?—nos preguntó Riley confusa.

—Pues verás...—empezó a hablar Noah pero yo le corté.

—¡Nada! Ya te lo contaré yo más tarde y en privado.—le dije yo seria.

—Pues debe de ser fuerte.—susurró Riley sorprendida.

—Los es.—dijo Noah sonriendo entonces yo rodé los ojos.

—Chicos, me voy con James no quiero dejarle sólo ahora mismo.—nos dijo seria.

—Tranquila, ve él te necesita más que nosotros.—le dije yo comprensiva.

—Gracias chicos, hablamos dentro.—nos dijo eso y entonces se fue con James que estaba con Kathy, Enzo y Arthur y él la abrazo cuando la vio y ella le correspondió mientras que yo suspiré.

—¿Porque suspiras?—me preguntó Noah confuso.

—Porque el amor es bonito.—dije mirando a James y a Riley que estaban abrazandose todavía.

—Oye si quieres podemos hacer realidad tu sueño.—dijo Noah pícaro refiriéndose a que deberíamos estar juntos.

—Si y luego te caeras de la cama ¡En tus sueños Erlic!—le dije mencionando su apellido y me fui con Giselle y Amanda

Es una pesadilla, una completa pesadilla pero me cae bien y me gusta, si acabo de reconocerlo me gusta Noah ¡¿contentos?!

The Next Step: El Viaje De Nuestras VidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora