Otra idea

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-¡Levantate, que tenemos trabajo que hacer!- Sebastián apareció abriendo la puerta de la habitación de un dormido pelinegro, abriendo las cortinas de par en par para que entrara la luz del sol.
-¡No quiero!- se quejó tapándose con las mantas hasta la cabeza otra vez, si algo amaba de los domingos era despertarse tarde, pero al parecer su amigo no entendía eso. Iván creyó que Sebastián se había ido al no escuchar respuesta, así que solo se acomodó hasta que sintió a alguien agarrarlo con manta y todo -¡Sebastián!- gritó, logrando destaparse y salir de los brazos de su amigo, solo para caer a la bañera llena de agua -¡Estúpido!- se quejó.
-Solo bañate ¡Debemos salir!- sonrió Sebastián con burla tratando de disimular el rubor de sus mejillas al ver a su amor platónico en paños menores, antes de cerrar la puerta.
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Estos dos XD
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Convirtiéndote en el uke idealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora