-Debes empezar a aprender a cocinar, limpiar la casa y hacer esas cosas- habló Sebastián llegando de improvisto a la casa del pelinegro, ambos no se habían visto desde hacía tres días e Iván se había dado cuenta que su amigo lo estaba evitando así que esos días había salido con su grupo de amigos tratando de ignorar él también ese hecho.
-Hola, Sebas- sonrió la madre de Iván.
-¡Oh! ¡Hola señora! Hoy trataré de enseñarle a su hijo a ser más responsable en las tareas del hogar- sonrió bellamente, la mujer dejo escapar una risita.
-¡Espero que lo logres!- ambos padres de Iván trabajaban, no estaban mucho tiempo afuera de casa pero el pelinegro se había mudado a un departamento cercano y varias veces los visitaba.
-Adiós, mamá- le dio un beso en la mejilla Iván.
Ambos se quedaron solos, Sebastián le sonrió.
-¡Ahora, a intentar!-
.
-¡No! ¡Debías ponerle las verduras a la olla con agua! ¡No las verduras a la olla sin agua!
.
-¡Mierda, Iván! ¿¡cómo rayos no sabes la diferencia entre el orégano y el anís?!
-¡Son parecidos!
-¡El anís no se utiliza en las comidas saladas, que yo sepa!
.
.
.
.
.-. Yo se hacer fideos *se esconde lentamente*
ESTÁS LEYENDO
Convirtiéndote en el uke ideal
القصة القصيرةIván es un uke que no logra tener una relación que dure más que una sola noche, Sebastián, su mejor amigo, trata de ayudarlo a cambiar eso. Va a tratar de volverlo el uke perfecto o, en su defecto, encontrar su seme ideal. . Portada hecha por HelloD...