Capitulo 11

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Chanyeol llegó esa noche con el labio partido, ensangrentado. El pelo demasiado despeinado, como si alguien se lo hubiera estirado con fuerza, varios moratones adornaban sus fuertes brazos pero lo único que le jodía de verdad a Chanyeol era que no podía fumarse un puto cigarro porque le dolía el labio.

Después de varios quejidos Chanyeol escupió sangre y entró por la puerta de su casa sobre la madrugada, como ya se había acostumbrado, pero esta vez su madre le esperaba con la luz de la sala encendida.

El adolescente no dijo nada, su madre le miraba con aquellos ojos negruzcos, con pena, con lastima, como si sintiera dolor de ver a su hijo así; de nuevo golpeado y ensangrentado, como si esto ya hubiera ocurrido demasiadas veces en su vida.

—C-Chanyeol. —Su madre elevó la mano, rozando la mejilla de su hijo, Chanyeol no se inmutó, miró a su madre con aquellos ojos vacíos, como si no hubiera señal de sentimiento, de emoción alguna, como si estuviera delante de una estatua de piedra.

—No tengo ganas de hablar, vieja —soltó con brusquedad, su madre entrecerró los ojos evitando llorar.

—Me prometiste que si volvíamos... esto dejaría de pasar —gimió su madre, Chanyeol se removió el pelo mientras suspiraba, aburrido por la actitud de su madre.

—Igual te mentí, igual no quiero cambiar, igual me gusta ser así. Ya sabes... unas peleas, un poco de alcohol, droga, follar... ¿Qué de todo eso te molesta, eh? —dijo en tono calmado, su madre dio unos pasos hacia atrás.

—Todo. Me molesta todo.

Chanyeol sonrió, su madre no reconocía a su hijo. Aquella sonrisa era perturbadora, siniestra y demasiado oscura. Como la de una bestia.

—Pues entonces puedes matarme como lo hiciste con mi hermano, puedes matarme también.

—Chanyeol... no quiero hablar de eso, por favor. —Chanyeol se rió exageradamente.

—Ah, está bien podemos hablar de lo que yo hago pero no de lo que tú has hecho —escupió con severidad, su madre comenzó a llorar—. Ya sabes que me importa una mierda verte llorar.

Chanyeol subió las escaleras como un loco, tiró la ropa por el suelo y se encerró en el baño. Encendió la ducha y el agua caliente empezó a formar vaho en el pequeño baño. El pecho de Chanyeol subía y bajaba, su respiración estaba acelerada y tenía ganas de desfogar sus ganas de partirle la cara a alguien, elevó la mirada para verse reflejado en el espejo, no pudo contener la rabia que le dio verse tan alterado por tanta mierda y golpeó con el puño cerrado el cristal.

Las gotas de sangre empezaron a caer despacio de su puño, varios trozos de cristal se le habían clavado en los dedos pero aún así Chanyeol no sentía nada, necesitaba sufrir más, aquello no era suficiente. Con la mirada perdida, se arrancó los cristales de la mano y con el más alargado empezó a rozar la piel de su brazo, se hizo marcas en los laterales para que no llamar la atención, la sangre empezó a brotar de su piel y Chanyeol gimió, la sensación era muy dolorosa, pero él había pasado por situaciones incluso peores; aquello solo era una mota de polvo en su montaña de mierda acumulada.

Después de que la sangre empezara a salir de forma más abrupta Chanyeol decidido que ya era hora de parar, se metió en la ducha y el agua caliente empezó a caer sobre su espalda. El adolescente se sentó en el suelo de la ducha mirando como las gotas de su pelo caían sobre su cuerpo, su sangre se mezclaba con el agua y los moratones de su cuerpo se veían más morados bajo aquella luz pálida del baño.

Chanyeol parecía estar descompuesto, con la mirada oscura, el cuerpo destrozado y con la mente perturbada.

—Vaya situación de mierda —dijo en un susurro, apoyando la frente sobre sus rodillas.

Our love was painful (ChanBaek- BaekYeol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora