Cap 28

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Esteban

Sacudo mi cabeza alejando esas malditas imagenes, no quiero recordar más esos horribles días

Hago un esfuerzo extremo por sacarlas...

- Piensa en algo bonito, piensa en algo bonito- me repito una y otra vez golpeando suavemente mi frente con el celular... si no saco esas imagenes de mí, se me hará imposible moverme

Marco en el celular, el número de Derick, por que no sé cuanto tiempo llevo perdido aquí sentado y ya me estoy desesperando; no a sonado bien, el primer timbre cuando ya me está contestando

- Hombre, llevo una hora aquí esperando como un mamao y tu no acabas de llegar, que carajo!!, ¿te estabas haciendo una paja?- es el saludo que recibo de mi hermano y mejor amigo

- No seas cabrón Derick, no estoy para juegos- sin perder ni un segundo más le dije- te espero en la comisaría, en veinte minutos, Elena me llamó... Demonios! yo no sé qué le está pasando, estoy desesperado, Derick, ella se escuchaba tan... tan vulnerable, me acordó a cuando...-

- Ni lo digas hermano, olvidalo ya... en quince estoy allá- me dijo y colgó, no sé que haría sin él

Yo estaba a menos de cinco minutos del cuartel, pero antes, aún necesitaba serenarme, así que dejé mis recuerdos volar, una última vez, al momento que, para mí, definió mi relación con Elena... Con mi amor...

5 años atrás... Una semana antes del baile...

Mis manos estaban sudando más de lo normal, me las estrujaba una contra otra y luego las pasaba de arriba a abajo sobre mis pantalones, para secarlas y repetía... Ya había pedido la cuenta, de cuantas veces lo había hecho...

Caminaba en circulos sin parar- de vez en cuando me mareaba y me detenía, pero una vez los nervios salían a flote de nuevo, comenzaba a caminar en circulos otra vez...

Llevaba una camisa de mangas largas color blanca que ya se adheria a mi piel por el sudor (en algun lugar, escuché a alguien decir, que el blanco es símbolo de pureza y sinceridad y ambos sentimientos son los que definen, a la perfección, mi amor por Elena). También llevaba corbata, pantalón y zapatos de vestir, todo en color negro (por la seriedad del asunto). Debía dar una buena impresión, así que, antes de venir me di una ducha rápida, me eché mi perfume favorito (Abercrombie) y peine mi cabello hacia atrás, con un poco de gel

No sabía cuánto tiempo llevaba dando vueltas allí, pero una vez más, estaba parado frente a la puerta de la casa de la mujer que amaba, esperando el momento oportuno, para atreverme a tocar y enfrentarme a mi suegro, una vez más...

- ¿Será que tarda mucho en cansarse?- escuché que decían

- No lo sé querida y espero que no tarde más de quince minutos por que si no, yo mismo salgo a buscarlo- ruedo mis ojos mientras mis suegros hablan en voz alta, con toda la intención del mundo, mirando por la ventana

Por fín, tomo valor y doy varios toques a la puerta, pero ésta no se abre de inmediato- vuelvo y ruedo mis ojos porque sé que ahora son ellos los que se están haciendo de rogar- vuelvo, toco y ésta se abre, antes que mi puño se separe por completo de la puerta... Los nervios vuelven a mí...

- Pero si eres tu cariño, que sorpresa verte por acá, Elenita no está en casa pero si quie...

- ohh venga ya mujer! déjalo en paz... entra hijo Elena no tarda en llegar, en que te podemos ayudar

Mientras entro en la casa, y antes de saludarlos, me parto de la risa, a veces mis suegros deberían trabajar en Hollywood, tienen un arte para la actuación que ni se imaginan

Pesadilla© (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora