Capítulo 15 - Tú me...

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     Verlo en ese estado le partía el alma, no quería que llorara más, porque según escuchó de Chris, él había sufrido bastante. Tenerlo frente a él tan indefenso, le hacía desear aún más protegerlo.

     Experimentaba sentimientos que nunca antes había tenido,nunca sintió semejante necesidad de protección, de querer entregar todo por otra persona, ni tan siquiera con Watanabe.

     Si hubiese sido el manager el que estuviera en la situación del menor,Miyuki no hubiera dudado dos veces antes de hacerle todo tipo de cosas, sin importar que tan ebrio estuviera.

     Incluso después de los besos que se proporcionaron, él tenía la capacidad de resistirse y anteponer sus sentimientos, lo cual le parecía algo increíble. Estando de esa manera con Sawamura y aún así preferir su bienestar, le bastaba para ser feliz el tan sólo hecho de estar viéndolo dormir.

     Su corazón era cada vez apretado con más fuerza, tanto así que dolía. Pero ahora era un poco diferente,había calidez. Era un dolor agradable, uno que le hacía sentir bien, lo ponía de buen humor y le daba alegría.

     ¿Acaso eso era estar enamorado?, no lo comprendía bien, era la primera vez que lo experimentaba. Se quedó un rato más observando al menor, no podía evitar suspirar mientras lo hacía.

     No quería irse, pero era lo más pertinente. Se levantó de la cama, y puso una cobija sobre el pitcher. Llamó a Kuramochi y le explicó la situación sobre los chocolates, para que estuviera pendiente.

    Se acercó una vez más a Sawamura y lo besó en la frente. "Buenas noches" dijo abandonando la habitación.

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     Miyuki no pretendía contarle sobre lo que sucedió a nadie, tan solo le hizo saber al peliverde (quién dijo que se encargaría de darle una paliza), que el pitcher se había emborrachado, y que por ende no pudieron estudiar.
   
     El capitán caminaba pensante, ya no hallaba que hacer con Sawamura, quería estar con él pero aún no veía preciso buscarlo con esas intenciones. Dejaría fluir con naturalidad las cosas.

     Si debían estar juntos o no, era algo que solo el destino conocía. También comprendía las situaciones por las que debió haber pasado, seguramente fue difícil, se decía a sí mismo.

     "¡¡Miyuki-senpai!!" a lo lejos una escandalosa voz se escuchó y se acercaba corriendo."Miyuki-senpai... ¡perdona por lo de ayer! Dijo el pitcher haciendo una reverencia.

     El mayor no sabía a que se refería exactamente "Descuida, no pasa nada" respondió con tranquilidad.

     "No, no. De verdad lo siento, te hice ir hasta mi cuarto para estudiar y yo tan solo hice el tonto, de seguro que te causé muchos problemas" decía preocupado "lo cierto es que casi no me acuerdo de nada, mi memoria es muy vaga. Así que si te molesté yo... ¡LO SIENTO!" .

     El menor gritaba a todo pulmón, como típicamente lo solía hacer. "¡Shh! No grites tanto, en serio no me causaste ningún problema, así que deja de disculparte. Si quieres hoy puedo ir de nuevo. Y prometo llegar a tiempo" propuso el de gafas.

     "¿De verdad?... ¿No hay problema? Es que en realidad soy un poco lento para los estudios, podrías desesperarte y volverte loco" dijo haciendo puchero.

     "Deja de preocuparte, hablo en serio. Aunque seas un tonto o me saques de casillas, prometo ayudarte, además también tienes que mantener un margen de calificaciones para asistir a los juegos, así que piensa que lo hago como una labor de capitán. ¿Está bien?" preguntó el más alto.

     El contrario se sintió feliz al escuchar esto,pero también un poco mal cuando dijo que era una labor de capitán,¿Entonces sólo lo hace por obligación? Se preguntó.

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     La noche había llegado, Miyuki llegó incluso antes de la hora establecida. Por lo que se pusieron a estudiar desde entonces. De verdad estudiar con el pitcher era una de las cosas más estresantes que jamás hubiera hecho, pero a pesar de eso lograron avanzar un poco.

  Era sorprendente el nivel de estupidez de Sawamura, ¿o era acaso culpa del catcher?. ¿Podría ser que acaso el menor se distraía más cuando estaba cerca de él?, incluso si ese fuera el caso, era algo que ninguno notaría.

     "Bien, creo que es todo por hoy. Yo estoy cansado, pero tu pareces exhausto ¿no quieres ir a dar una vuelta para relajar tu mente?, creo que es algo que voy a empezar a hacer todas estas noches para desestresarme" propuso el mayor, rascándose los ojos por debajo de las gafas, en signo de cansancio.

     "¿Estás seguro? En realidad parece como si tuvieras mucho sueño, ¿no deberías mejor irte a la cama?...bueno,nada más lo digo por tu bien, pero si en serio planeas salir a dar una vuelta, podría acompañarte..." contestó un poco preocupado el pitcher.

     Sin más que discutir, ambos salieron de la habitación. Habían estado tan enfocados en el estudio que no notaron en que momento se hizo tan tarde, pero eso no importaba, en el fondo los dos se alegraban. Aunque fuera tarde, hiciera frío, o aunque tuvieran que despertar muy temprano al siguiente día, nada de eso importaba.

     El momento, ese en el cual caminaban bajo la luz de la luna por el camino que lleva de los dormitorios a los campos de baseball, ese instante era el que realmente importaba ahora.

     En realidad casi no conversaron en el trayecto, pero no era necesario. No había incomodidad ni nada parecido, es más,parecía como si se entendieran mejor de esta forma.

     Hasta que el mayor rompió el silencio "Hey ¿nos sentamos aquí?"preguntó señalando unas gradas. Aunque a pesar de eso se sentó antes de que respondiera.

     Habían pasado ya un gran rato en ese lugar, y ambos corazones latían cada vez más rápido, el menor tenía pensado decir algo, pero antes de eso el capitán habló.

    "Sawamura..." dijo mirándolo fijamente a los ojos"¿Q-qué?" respondió nervioso.

     Así que continuó"¿Sabes? Hay algo importante que tengo que decirte... pero antes de eso quiero que sepas que no debes sentir ninguna presión... enserio. No quiero hacerte sentir más confundido aún, así que..." 


A lo que nos lleve el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora