Capítulo 6 - El principio del fin.

379 41 0
                                    

      "Ya llegué Miyuki, comí lo más rápido que pude. ¿Ya te duchaste?" dijo el manager.

     "Sí, ya lo hice, pero lo siento, hoy no tengo ganas de hacerlo" respondió el más alto. "¡¿Pero qué dices?! No te lo estoy preguntando por eso, no todo es sexo ¿sabes?. Lo decía porque pronto van a cerrar los baños y pensé que no habías ido" exclamó un poco molesto el contrario.

     "Si, tienes razón. Perdón. Deberías ir a dormir, no es bueno que te desveles siempre por estar tomando notas de nuestros rivales, además yo ya estoy cansado así que solo te aburrirás si te quedas aquí viéndome dormir" dijo el de gafas besándole la mano.

     "...A pesar de que vine lo más rápido que pude, y ya me estás diciendo que me vaya...Todo sería más fácil si estuviera en el primer equipo y pudiéramos estar juntos, pero a veces dudo..." añadió el más bajo.

     "No te enfades Nabe, es sólo que de verdad en este momento mi cabeza duele... quizás no sólo mi cabeza" susurró la última parte. "Si quieres acuéstate conmigo, perdón si casi no te pongo atención. Es sólo que... ser el capitán, el cátcher, estudiar y tener que dedicarte tiempo se me hace complicado, más bien te agradezco ser tan dulce y comprensivo conmigo. Ven" señaló un campo a su lado.

     "Rayos...no puedo decirte que no Miyuki. Te comprendo, es sólo que yo no estoy tan ocupado como tú, por lo que en ocasiones me siento un poco solo... pero luego cuando estoy contigo me acuerdo de que tengo a alguien grandioso a mí lado". Dijo colocándose a su lado y besándolo.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

     "Duraste mucho, ya es tarde. ¿Tanto tenías que hablar con Miyuki?" regañó el peliverde al pitcher quién parecía estar en otro mundo. Su cara reflejaba una combinación de emociones difícil de descifrar.

     "¿Qué rayos te pasó? Se nota que algo hiciste. Será que Miyuki te correspond-" el mayor fue silenciado por las palabras se su kohai.

     "Chris-senpai y yo nos besamos", la cara de Kuramochi mostraba una clara confusión al escuchar esto. "Nos besamos y se sintió bien... ¿alguna vez has besado a alguien Kuramochi-senpai?" preguntó el pitcher curioso.

     El mayor se ruborizó y le propició un par de golpes a Sawamura por haberle preguntado tal cosa. "¡C-claro que lo he hecho! ¿Crees qué soy tan estúpido como tú?".

     "¡Está bien! ¡¡Pero suéltame!!" suplicó el menor, pero no sin antes preguntar "Y ¿con quién?".

     El peliverde lo soltó, se puso de pie y le dio la espalda; no podía dejar que su "hermanito" viera el rostro tan vergonzoso que estaba poniendo. "¡N-no te importa! Es a-algo privado" respondió firme "Además ¿tú no estabas con  Miyuki? ¿Cómo es que terminaste haciendo esas cosas con Chris-senpai?... y por cierto ¿qué te dijo ese estúpido sobre lo que pasó ayer? Tiene que haber una buena excusa para haberte besado" dijo cambiando de tema.

     "...Eso no importa ya, estoy bien así. Estoy cansado así que creo que me voy a acostar ya" respondió el menor, estaba tan emocionado por lo que acababa de suceder que había olvidado por un momento lo que había pasado con el de gafas.

     Desde ahora estaba enfocado en enamorarse de Chris, así que tendría que tomar medidas más drásticas para lograrlo. "Ya no voy a esconder mi relación, pienso que no hay problema de que todos se enteren" dispuso con firmeza.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

     "Buenos días Chris-senpai" saludó con una sonrisa a su querido novio. El pitcher parecía una persona renovada, pero eso era bueno, había algo en él que emanaba felicidad. Mientras el mayor contemplaba su rostro éste fue sorprendido, de repente la mano del menor agarró la suya.

     "¿Qué haces? Estamos en la escuela nos van a ver" regañó el mayor, aunque por él no había problema alguno.

     "Pues tomo tu mano, eso es lo que hacen los novios ¿o me equivoco?" respondió tranquilo, ya la inseguridad estaba desapareciendo. El más alto, no dijo más. Sabía claramente cuanto se estaba esforzando por hacerlo delante de todos, en especial cuando el capitán los viera.

     Y hablando del rey de Roma en frente de ellos como si fuera por arte de magia, apareció Miyuki. De inmediato el pitcher estrechó con fuerza su mano en un impulso de querer soltarla.

    Entonces los ojos del de gafas se centraron en la escena de las manos, pero después de unos segundos se percató de la situación. Alzó la mirada directo hacia Sawamura, su expresión se tornó extraña, mostraba algo así como decepción y confusión.

     El menor lo notó, y su corazón empezó a volverse loco. ¿De verdad estaba preparado para hacer esto?, ¿Y si por alguna razón Miyuki estaba enamorado de él?, sabía que esas cosas eran imposibles pero aún así rondaban su mente en ese instante.

     No podía comprender la causa de esa expresión tan confusa. Como la situación se estaba volviendo un tanto rara el mayor decidió intervenir. "Buenos días Miyuki, ¿ya estás mejor?".

     El de gafas estaba absorto, pero lo más rápido que pudo volvió en sí, "B-buenos días Chris-senpai, ¡Ya estoy perfecto! No era nada de que preocuparse" dijo riendo tontamente.

     Luego de decir esto se retiró del lugar. Sawamura estaba agitado como si hubiese corrido una larga distancia, cosa que su pareja notó. Aunque se estuvieran tomando públicamente de la mano sabía que el pitcher aún no estaba preparado al cien por ciento.

     Él, mejor que nadie sabía que los sentimientos por la persona que quieres no desaparecen de la noche a la mañana, ni tampoco con un beso apasionado. Por lo que soltó al más bajo.

     "Será mejor que no hagamos esto, pienso que es una mala idea. Ve a tu clase, vas a llegar tarde" propuso dejándolo solo.

     "¿Por qué tenía que aparecer de repente?, ¿Por qué tenía que ser el primero en vernos?, ¿Por qué no dijo nada?, y ¿qué rayos fue esa expresión?" pensó el menor. Salió corriendo, no tenía intención alguna de ir a clase.

     Se sentó debajo de un árbol, no quería llorar, lo que sentía no era precisamente algo por lo cual hacerlo. Cada vez se sentía más confundido, lo único que tenía que hacer era querer a Chris y todo iba a estar bien, pero siempre Miyuki tenía que hacer algo que arruinara sus planes.

     "Quisiera poder ajustar mis sentimientos, borrar, acomodar y ese tipo de cosas. ¡Así todo sería tan sencillo!, crearía toda una serie de emociones destinadas a Chris-senpai, una con la cual podría hacerlo feliz. Si tan sólo yo no me hubiera enamorado de ese tipo, todo sería genial" se quedó toda la tarde pensando ese tipo de cosas absurdas.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

     Entonces el tiempo pasó y los sentimientos cambiaron...


A lo que nos lleve el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora