¿De Quién Me Enamoré?

Cap 6

Después de haber pasado 10 minutos donde se suponía tenía que empezar la clase, alguien toca la puerta y entra sin que le abran.

Logan.

Al entrar a clase su cabeza se movía en torno al rostro de cada uno para encontrar a alguien. Yo.

Caminó en dirección a los asientos donde Connor y yo compartíamos nutella juntos. Al llegar al frente de las carpetas se paró con los brazos cruzados.

-Tenemos que hablar.- me dijo.

-Ella no tiene porque hablar contigo si le dejaste en claro lo que crees que es ella.- dijo Connor en defensa de May.

-Connor tiene razón además... No tienes que explicarme nada porque no me importa.

Logan me miró volviendo a su risa egocéntrica de siempre.

-Es cierto pero solo venía a decir si vieron a mi nueva NOVIA Megan.

El estúpido recalcó la palabra NOVIA y admito que me molesta pero sé que no debería. Si quiere guerra... Guerra tendrá.

-No para nada Logan solo pienso en mi cita de hoy con Zack.- levanté una ceja.

El apretó un poco su mandíbula pero trató de controlarlo y colocó una sonrisa en el rostro.

-Si nos disculpas, pero mi mejor amigo y yo estamos pasándola bien.

*Connor*

"Mejor amigo" "soy su mejor amigo" unas simples palabras lograron que mi día se vaya a la mierda.

¿Por qué?

La verdad no puedo negar que siento algo por ella. Es tan.. Perfecta.

Sé que no me recuerda pero yo si la conocía de hace tiempo en la primaria. Estaba al lado de las macetas pintadas intentando esconderme de una profesora que decía que el recreo acabó pero un sollozo llamó mi atención. Me acerqué a una niña muy frágil de vestido rosa mojado por las lágrimas.

-Oye..Niña ¿que te pasó?

-Me quedé sola ya no tengo a mi papito.-sus gestos eran tan reales que necesitaba abrazarla para intentar sentirse mejor.-era mi mejor amigo él..él..murió ayer cuando venía a recogerme un carro vino y lo atropelló.

-Lo siento mucho ya va a pasar.- le ofrecí mi toalla del hombre araña para que seque sus lágrimas.

-Ayer fue mi cumpleaños.-dijo la pequeña May.

En ese momento no supe que decir. Pobre niña no merecía esto en su propio cumpleaños. Tengo una idea.

-Pues yo voy a celebrar ven.-caminamos por el patio y entramos a la casita de plástico donde las niñas solían jugar.

-¿Qué hacemos aquí niño?.-en ese momento no sabía su nombre ni ella el mío.

La dejé en la mesita y agarré la caja llena de plastilinas. Hice un pastel tan rosa como su vestido un poco chueco. Salí con mi obra de plastilina.

-Feliz cumpleaños...-espere a que dijera su nombre.

-May me llamo May.- dijo sonriente con mi pastel.

Pagaría por ver su sonrisa siempre.

-Yo me llamo..

-¡Engendro!.- la profesora me encontró para llevarme al aula

Me despedí con la mano y corrí para que deje de gritar.

Al día siguiente mis padres tomaron la decisión de irnos a España por su trabajo. No quería. Necesitaba decirle mi nombre a May, necesitaba verla.