¿De Quién Me Enamoré?

Cap 16

-Gracias Logan.-dije en un susurro apenas audible para él.

El seguía en la misma posición acogiéndome en sus brazos mientras yo sollozaba por la triste realidad que tenía. Las preguntas rondaban por si solas en mi cabeza.

¿Qué hice de malo para que me odien?

¿Siempre estaré destinada a acabar sola?

¿Por qué Logan es así conmigo después de ser indiferente?

-May, será mejor que nos vayamos de este lugar, alguien nos puede encontrar.-Habló Logan en mi cuello provocando un electrizante  sentimiento dentro de mi.

Intente ponerme de pie pero caí en el intento hasta que sentí las grandes manos de Logan al rededor de mi cintura levantándome como si fuera una pieza única de porcelana.

Una vez parada me di cuenta cual serían las consecuencias de la amabilidad suya hacia mí. Podrían hacerle daño o arruinarlo socialmente como lo hicieron conmigo, no me lo perdonaría el no tiene culpa de que yo sea una perdedora sin rumbo.

-Si.. Creo que debes irte ya no quiero causar más problemas para ti ni para nadie.-Le dije quitando algunos restos de mis lágrimas.

-Joder, May no digas esas cosas. Ya te dije que no me iré de aquí.-Respondió acercándose a mí.

-Claramente era hasta que yo te lo pida.-Dije en un sollozo.-Aléjate de mí como la última vez que me lo dijiste y no vuelvas a hablarme ¿Entiendes?.

No podía evitar sentirme mal al pedirle que se vaya pues la verdad que no quería que lo haga. Nadie como él se había comportado así desde que me quedé sola en este maldito lugar que tantos malos momentos me hizo pasar.

-La verdad es una lástima, porque yo no estoy dispuesto a irme a ningún lado.-Logan dijo acariciando mi mejilla, por acto reflejo me alejé de su contacto.

-Por favor, no lo hagas tan difícil yo no puedo juntarme con nadie. ¿No te das cuenta que soy la apartada?.

Él comenzó a sobar mi cabello de forma delicada aproximándose a mi rostro.

-Entonces eres la apartada más bella que he visto en toda mi vida, Mayra Wilson.-Mencionó antes de que sus labios chocaran con los míos.

Su mano se deslizó desde mi cabello hasta mi cintura provocando que la distancia entre ambos sea casi inexistente, yo posaba mis manos entre su rubio cabello mientras lo desordenaba. La mezcla de emociones era mágica y de alguna manera adictiva, sé que sonaría cliché pero era una droga estar cerca de él. Logan pareció pedir permiso al paso de su lengua hasta que estaba prácticamente flotando en el paraíso  de felicidad, después de unos minutos ambos nos separamos por algo de aire pero la distancia entre ambos seguía siendo mínima.

-Ahora estoy decidido, no te voy a dejar aquí sola.-Mencionó cuando tenía su nariz rozando con la mía.

Respondí con una sonrisa y acto seguido se acerco a mí dejando un beso más corto pero lleno de necesidad y dulzura que transmitía con solo una mirada.

-Vámonos.-Susurré en su oído al momento de abrazarlo.

Tomó mi mano no sin antes me dijera algo con voz suave.

-Me gustas y no sé que hacer.-Tenía su cabeza gacha con actitud de ¿Vergüenza?.

Yo no respondí pero tengo que admitir que sus palabras me habían alegrado en parte mi día, digo en parte porque ya ni sé en quién creer y en quién no.

Me miró con disimulo y antes que me preguntara sobre mi respuesta me acerqué a él y le di un casto beso.

-Gracias por hacerme sentir que no estoy sola en este horrible sitio.-Apreté su mano para evitar lágrimas o algún sentimiento triste.