Sueño

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La música suena, las personas se acercan a mi cada que doy un paso y me felicitan. Yo agradezco y continúo caminando.

—Alexa

— ¡Mamá! Cielos el salón les quedo hermoso

—Esto fue obra del hotel, aunque claro que dimos ideas ¿Dónde estabas?

—Necesite ir al baño... Gaby y Mandy tuvieron que ayudar con mi vestido —digo riendo y ella me secunda

—Tengo que ir por tu padre para bailar... adoro esta canción —dice ella

—Claro amm... bueno

Se van sin decir más. Cinco felicitaciones más tarde por fin estoy a donde quería llegar.

— ¿Todo bien? —pregunta

—Complicado... pero bien —respondo divertida

— ¿Tengo que preocuparme?

—No

—Ven un segundo —me dice tomando mi brazo y mientras da un vistazo asegurándose de que nadie este observando me jala con delicadeza fuera del lugar hasta una pequeña salita que en realidad no sé de donde salió— Estaba siendo abrumado por tantas personas

—No eres el único —confieso, él solo me mira sonriendo de oreja a oreja— ¿Qué te pasa?

—Estoy feliz ¿Es un crimen?

—No, no lo es... yo también lo estoy... más que eso en realidad

—Me alegra escucharlo, estaba pensado que después de que te pidieran firmar el acta saldrías corriendo y pedirías que te llevasen a casa

Yo me río mientras él se acerca rodeando mi cintura con sus brazos.

—No podría... esto era lo que quería

— ¿Ser mi esposa? —pregunta es una manera un tanto seductora muy cerca de mi oído para luego depositar un ligero beso en mi cuello

—Serlo o no serlo, lo que realmente quiero es estar siempre a tu lado

—Pero ahora eres mi esposa —susurra y suena feliz— Eso es más grande que mi novia o mi prometida, me siento orgulloso de mi, subí de nivel, evolucioné

— ¿Qué somos, pokémones? —él se ríe— Todo este día ha sido como irreal, aun siento que iré a dormir para luego levantarme y darme cuenta de que todo fue un sueño

—No será así, soy tu esposo, eres mi esposa y todo es bastante real, de alguna manera y no sé cómo tendré que agradecerles a todos por esto que hicieron —Él aparta su cabeza lejos de mi cuello para mirarme— Además mañana cuando despiertes estarás a mi lado y me encargaré de que no creas que solo fue un sueño

—Eso suena bastante prometedor

Él alza una ceja hacia mí para luego acercarse a besar mis labios.

—Te amo, esposa

No puedo evitar reír.

—Yo te amo a ti esposo

— ¿Ya te dije que luces hermosa?

Yo sonrío.

—Como muchas veces para ser exactos

—No es suficiente, luces hermosa claro... pero es que eres hermosa

Me acerco para poder besarlo, aun me parece bastante increíble que ahora seamos marido y mujer, pero sin duda es lo mejor que he vivido en mucho tiempo.

La apuesta 2.5 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora