~Wings Of Love 2~

Capítulo 2 *1*

*Parte 1*

(Narra Alexia)

-Libros, material, carpetas y apuntes... Ah, y el ordenador. Y que tampoco se te olvide el...
-Mamá, tranquila, lo tengo todo -dije calmando a mi madre, la cual estaba hecha un matojo de nervios.
-Perdón cariño, es que es tu primer día de Universidad y...
Le abracé para que se sintiese más segura.
-Te prometo que me irá muy bien -le dije sonriendo.
Ella me devolvió la sonrisa, y me sentí más tranquila.
Desde que me dejaron tener una relación con Dylan, no ha habido
nada de peleas entre mi madre y yo, cosa que agradezco, al igual que con mi padre, aunque claro,
siempre tienen ese pequeño punto sobre protector...
-Bien, me tengo que ir -dije suspirando.
A quien quería engañar, yo también estaba nerviosa.
-Disfruta de la Universidad cielo -me dijo mi padre  -pero estudia mucho, eh -me señaló con el dedo.
Así era mi padre...
-Sí papá, lo prometo -le contesté abrazándole a el también.
-Espera, ¿hoy vas a... ? ya sabes,¿mudarte con Dylan? -preguntó un poco nervioso.
-Venga Tom, ya hemos hablado de esto, estarán bien, son jóvenes, déjales -le contestó mi madre.
Vale, este momento era un poco incómodo...
-Está bien... lo dejo -dijo levantando las manos.
-Venga, entra ya o llegarás tarde -me sonrió mi madre. Y por cierto, este sábado tenemos comida, recuérdalo.
-Sí mamá... ya me lo has dicho unas cuantas veces... -les dije ya entrando a la universidad.

Entré, y podía asegurar que nunca había estado tan nerviosa...
Comparado con el instituto, todo esto era... enorme.
Andaba sin rumbo, hasta que encontré mi clase, y al entrar, me llevé una sorpresa.
-¿Susan? -pregunté incrédula.
La prima de Chloe se giró al instante, y al verme, me dedicó una sonrisa.
-¡Alexia! Cuanto tiempo. Por favor, dime que has entrado en ciencias.
-Pues sí -le dije un poco tímida.
-Bien, así no estaré sola -me abrazó.
Vaya, que directa era...
Había que ver lo distinta que era de Chloe. Ella era bastante dulce y simpática, mientras que Chloe era... Chloe.
Decidí soltarme un poco, ya que pretendía hacerme su amiga.
-Bien Susan, vamos a disfrutar nuestro primer día de Universidad.

                           ***

El día se pasó muy rápido. Susan y yo visitamos todas las instalaciones, para conocer el sitio un poco mejor, y luego comimos juntas. Además de simpática, era muy graciosa, cosa que agradecía.
Cuando ella se fue, me dirigí a la puerta para esperar a Dylan, aunque el ya estaba ahí.
Fui a paso rápido hacia donde estaba, y le abracé por detrás.
El se sobresaltó un poco, pero al verme, se giró y me dio un corto beso en los labios.
-Alexia, ¿cómo te ha ido el día? -me preguntó con esa sonrisa tan particular en el.
-Genial, ¿y a ti?
-Me encanta esta Universidad -me contestó.
-Me lo tomaré como que te ha ido bien.
-Ven, vamos a casa -me dijo cogiéndome de la mano.
Fuimos andando hacia nuestro apartamento, siempre cogidos de la mano.
-Dylan, he estado pensando... Una casa es mucha responsabilidad... ¿Sabremos llevarlo bien? -le pregunté un poco nerviosa.
-Tranquila, seguro que podemos hacerlo bien.
-Ya, pero hay que hacer comidas, y mantenerla limpia, y...
Me interrumpió.
-Wow, wow Alexia, calma, de verdad, podemos ocuparnos de eso -me dijo tranquilizándome.
-Está bien, señor perfección -le dije sacándole la lengua.
El esbozó una gran sonrisa, para después girarse y besarme.
Nunca sabía cuando Dylan iba a besarme, aunque eso me encantaba.
Poco a poco el beso se profundizó más, hasta que Dylan empezó a tocarme por debajo de la camiseta.
-Dylan... no me... apetece... hacer el amor... en medio... de la calle -dije entre besos.
El se separó lentamente de mi.
-Es verdad, mejor lo dejamos para esta noche... -me contestó entrando al portal de nuestro apartamento.
Mm, sí, me gustaba como sonaba eso...

(Narra Mackenzie)

Eran las seis de la mañana, y ya estaba despierta.
No paraba de pensar en Hugo, y casi no podía dormir.
<<Tienes que distraer tu mente>> -me dijo Alexia.
Y lo intentaba, de verdad que lo hacía, pero me era imposible.
Al hacer otras cosas, de algún modo Hugo acababa en mis pensamientos.
Por si no fuera poco, hoy era mi primer día en la escuela de Bellas Artes, y no tenía ánimo.
Al cabo de una hora, me levanté y
lo preparé todo:
Un bloc de notas, mi cámara, bolígrafos, un pen usb, etc...

(Chat)

-Buenos días, Mack -me escribió Hugo -que hoy te vaya muy bien.
-Hola mi chico favorito... Lo mismo digo.
-Ya me contarás que tal.
- Y tu. Y no ligues mucho -se lo dije de broma, pero por dentro ese tema me tenía muy nerviosa.
-Descuida preciosa.
-Yo... te quiero mucho, Hugo.
-Y yo más, Mack.
-Adiós.
-Adiós, ya hablaremos.

(Fin del chat)

Apagué el móvil y resoplé.
No se si aguantaría tantos días sin verle, sin tocarle, sin sentirle.
Si había pasado dos días, y estaba así... no quería imaginarme dos meses.
<<Tranquila, Mackenzie, tranquila>>
Pero no lo estaba.

                            ***

A las ocho entré a toda prisa a lo que sería mi nueva clase.
Algunos me echaron unas miradas, pero no les hice caso.
-¿Mackenzie? -me dijo la profesora.
-Sí. Perdón por el retraso.
Con una amable sonrisa me dijo que por hoy lo pasaba.
-Siéntate ahí detrás, y escucha lo que diga.
-Claro...
Conté casi veinte en la clase. La verdad es que éramos muy pocos.
Hice lo que había dicho y me senté al final, con un chico que ni me saludó.
-Abrir vuestros portátiles y copiad este texto -dijo dándonos una ficha a cada uno.
Lo cierto era que no me apetecía nada ponerme a copiar, y abrí la carpeta de imágenes.
Ahí ví algunas fotos con Hugo, y me entró un poco de bajón, pero no podía permitirlo.
Luego ví las fotos de esa noche en la que dormimos Mark, Hugo y Alexia. Fue genial, aun me acuerdo de lo que nos soltamos...
-¿Esa es amiga tuya? -un dedo señaló la pantalla del portátil.
Era el chico de al lado,que al parecer, le había dado por hablar o algo...
-Sí. Y tiene novio -no se porque dije eso.
-Que lástima...
<<Que idiota...>> -pensé.
-¿Y tú? -me preguntó.
-Yo que.
-Si tienes novio.
Tragué saliva y ni le miré.
-Sí...
-No pareces muy segura.
<<¿Y este de que iba?>>
-Hem, no deberías meterte donde no te llama.
-Mmm vale, ya me callo.
Me giré para verle y me sorprendió con una media sonrisa.
-Yo...
-Tranquila, no me has molestado.
-No, no... es que... -resoplé. ¿De verdad iba a contárselo a este chico? -nada, no importa.
Volvió a lo suyo, y yo con las fotos.

Al acabar la primera hora, fui a salir de clase cuando el mismo chico de ojos azules me paró.
-Hey, ¿como ha ido la clase?
-Bien.
-No pareces muy contenta...
-Mejor déjalo.
-Vale, Mackenzie.
<<¿Por qué se sabía mi nombre?>>
-¿Vas a todas mis clases?
-Casi todas.
-Pues no me hagas preguntas molestas, si es posible...
-Vale. ¿Y tú? ¿No me haces preguntas?
Me paré para observarlo mejor.
-De acuerdo, te haré una: ¿desde cuando eres tan pesado? Oh no, igual es de nacimiento...
-Ja-ja, mírala que graciosa.
-Yo me voy -pasaba de hablar con él, aunque me tuviera entretenida.
-¿Y no vas a preguntarme como me llamo?
-No...
-Vale, te lo diré yo -me dedicó una sonrisa juguetona -soy Evan.
-Muy bien, Evan, un gusto conocerte -nótese el sarcasmo.
Y aun así una parte de ese chico me mantuvo curiosa.