~Wings Of Love 2~

Capítulo 13

(Narra Alexia)

-¿De verdad no quieres que te ayude? -le pregunté a Dylan.
-Tranquila, además, no creo que te apetezca cargar y guardar un montón de cajas.
-Está bien, iré a mirar algunas tiendas.

Dylan me sonrió, para después darme un casto beso en la boca.

-Te veo en una hora, preciosa.
-Te esperaré en la salida.

Dylan se fue hacia la tienda de un amigo suyo, ya que tenía que ayudarle con unos encargos.

Tenía una hora, así que me puse a dar vueltas por el centro comercial, esperando a que el tiempo se pasase rápido.

Miré un par de tiendas de ropa, pasé por una de perfumes, y terminé en una de animales.

Me quedé embobada mirando unos peces de colores, viendo como nadaban de arriba abajo y de lado a lado.

-Son bonitos, ¿verdad? -me sobresaltó una voz.
-¿Qué? Ah, sí, son muy bonitos -le sonreí a la persona que me había hablado.

Era una chica, de estatura media, con el pelo recogido en una coleta alta, y unos ojos marrones claros. Parecía de mi edad.

-Igual me compro algunos, ¿qué opinas? -me dedicó una sonrisa.
-Los naranjas son muy bonitos -respondí.
La chica se giró hacia mí.
-Soy Meghan.
-Alexia, encantada.
-¿Te apetece, no se... dar una vuelta? -me preguntó un poco tímida.

Normalmente hubiese dicho que no, ya que no suelo pasear con gente que no conozco de nada, pero esa chica parecía muy simpática.

-Claro -le dije -Aun tengo mucho tiempo.

                           ***

-Entonces, ¿cuanto tiempo lleváis Dylan y tu juntos?
-Casi dos años -contesté muy orgullosa de mí misma.

Sonreí al recordar por todo lo que habíamos pasado Dylan y yo, y de verdad aun no me creía que ya llevásemos todo ese tiempo saliendo.

-Vaya, entonces vais muy enserio - dijo Meghan.

Asentí.

-¿Me creerías si te digo que vivimos juntos? -sonreí nerviosa.

Meghan casi se cayó al suelo al oír eso.

-¿Cómo? ¿¡Ya!? Que rápido -me miró sorpendida, pero con una sonrisa en la cara.
-Yo también me sorprendí al principio, incluso dudé en si sería una buena idea -confesé algo avergonzada.
-Y, ¿cómo quedó la cosa?
-Muy bien, independizarse no está nada mal, aprendes cosas nuevas, y Dylan siempre está a mi lado.

Meghan sonrió de oreja a oreja.

-¡Que romántico!
-Y bien, ¿hay alguien especial para tí? -le pregunté.

En cuanto lo dije, ella se sonrojó.

-Pues... hem, hay... una persona.
-¿De verdad? ¿Y cómo es?

Nos cansamos de dar vueltas, así que nos sentamos en un banco al lado de una cafetería.

-Pues, bueno, nos hemos conocido este año en la Universidad, y, aunque es bastante tímido, es muy simpático.