Capitulo 25

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Sara

Me desperté desorientada pero después me acordé que estaba en la casa de mi tía Helen, en el cuarto de huéspedes de esta misma.

Vi a Erick sentado al lado de la mesita de noche del cuarto, estaba profundo. Me di cuenta que tenía mi cuaderno personal en la mano derecha, no me coloqué brava ya que me acordé lo que Lorena me había dicho cuando estábamos en el hospital.

Cogí mi celular y vi la hora, eran las cinco y cuarenta de la mañana, así que me levanté con cuidado sin hacer ruido, cogí una cobija que estaba encima de la cama y se la tendí al cuerpo de Erick para que no se congelara, ya que estaba haciendo un poco de frio.

Salí de la habitación. La puerta de la habitación de Daniel estaba medio abierta, me dirigí allá y estaba roncando como un oso, me aleje y me dirigí a la habitación de mi tía Helen. Recuerdo que cuando era pequeña me encantaba mira sus cosas cuando nos iba a visitar a Londres.

Su habitación era grande y cálida. Comencé a mirar las fotos que tenía encima del mueble del televisor. Su armario era grande, tenía mucha ropa elegante que casual.

Me senté en una parte de su cama, en la mesita de noche tenía un papel medio abierto, lo cogí y lo comencé a leer, pero lo este papel decía era al muy grave.

Un kilogramo de cocaína.

Dos kilogramos de mariguana.

Dos kilogramos de éxtasis.

Tres kilogramos de bazuco.

¿Qué es esto? Mi tía no puede estar metida en estas cosas, esto es muy peligroso, no puede estar traficando drogas, esto de debe ser de mi tía pero su letra me indica que si es de ella.

Esto no puede estar pasando, acabo de descubrir que mi tía puede estar traficando drogas y tal vez por eso este de viaje, porque de pronto debe estar recibiendo la cantidad de droga que dice en este papel. Aunque yo solo estoy haciendo suposiciones que tal vez no son ciertas pero a la vez también pueden ser ciertas. ¿Qué debo hacer? ¿Debo esperar a que mi tía llegue?

No podía esperar a que tía Helen llegara de viaje. Salí corriendo de la habitación de mi tía, y me dirigí hasta la habitación de Daniel, lo desperté a toda prisa pero él es muy difícil de despertar entonces fui hasta al baño tome un vaso de vidrio que estaba allí, lo llené de agua y se lo eché en la cara haciendo que se despertara asustado. Cuando ya se dio cuenta que había pasado y quién se lo había hecho me miró con una cara de odio.

- ¡Sara que mierda haces! – dijo casi gritando. Cogió su celular – son las seis y media de la mañana, deja dormir.

- Deja de comportarte como un niño chiquito – dije sentándome en su cama – mira lo que encontré en el cuarto de tía Helen.

- A ella no le gusta que entremos a su cuarto.

- Solo mira lo que encontré – dije extendiendo el papel.

Daniel lo comenzó a leer e hiso una cara que decía ¿qué es esta mierda?

- ¿Qué es esto? ¿De dónde lo sacaste?

- Lo encontré encima de la mesita de noche de tía Helen.

- Son cantidades de drogas.

- Lo sé – dije preocupada – supuse que tal vez Helen estaría traficando drogas. Estoy preocupada, he escuchado que ese negocio es muy peligroso para la persona que lo hace y para la familia.

- No te preocupes, déjame que yo hablaré con ella – dijo Daniel para tranquilizarme un poco. Extendió los brazos para que lo abrazara, acepté el abrazo y me dio un beso en la cabeza.

Minutos después nos separamos, Daniel se fue para el baño mientras que yo iba a despertar a Erick que estaba roncando como un oso, al parecer mi hermano y el mejor amigo de mi hermano tienen el mismo tipo de sueño así que me tocó hacer la misma estrategia que hice con mi hermano, echarle agua en la cara.

Erick se despertó desorientado e hiso una cara de odio cuando se dio cuenta que me estaba riendo de la reacción que hiso ante mi acción.

No lo pensó dos veces y se levantó del suelo para cogerme de la cintura y tumbarme hacia la cama y hacerme cosquillas, mi mayor debilidad. No aguantaba más ya me dolía el estómago de tanto reírme.

- Ya, me riendo – dije entre risas.

- Te escucho – dijo colocando todo su peso en mi cadera.

- Perdón por haberte echado agua – dije en un susurro.

- Disculpa aceptada – dijo levantándose.

Me extendió la mano para que me levantara y la acepte. Erick hiso harta fuerza y termine al frente de él con muy poca distancia. Yo me coloqué nerviosa ya que nuestras narices se rosaban, él se iba acercando más a mí cosa que no me molestaba, quería sentir sus labios otra vez, ya que Erick Peterson besa jodidamente bien. Nuestros labios estaban a punto de hacer contacto pero lastimosamente mi hermano entro a la habitación interrumpiéndonos.

- ¿Interrumpo algo? – preguntó Daniel.

- No, para nada – dije antes de que Erick hablara – solo estaba despertando a Erick.

- ¿Cómo? ¿Erick se quedó aquí? – dijo Daniel confundido.

- Eh...- comenzó a decir Erick pero yo lo interrumpí.

- Miren qué hora es – dije señalando la pantalla de mi celular – tenemos que estar en la segundaria en media hora.

Y dicho esto, cada uno salió de la habitación de huéspedes dándome espacio para arreglarme.

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Hola bebes... 

Bueno.... tal vez me odien pero decidí continuar el libro porque es un libro muy interesante y pues... no me gusta dejar las cosas a medias. Probablemente me demore en subir cada capitulo pero tenganme paciencia.... no se les olviden comentar.. Gracias 

Con Una Nota Me Bastó Conocerla.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora