Erick
Llegamos a la segundaria sin ningún problema, esta mañana cuando salimos de la habitación de mi princesa Daniel me miró raro pero no me dijo nada, me bañé y como tenía ropa en la casa de Daniel entonces no hubo problema.
Eran las siete y veinte cuando llegamos, mi princesa se fue con Abbie, Ivy y Lydia para sus clases y Daniel y yo nos fuimos para donde estaban los demás.
El día paso como todos los demás, pero lo que me llamó la a tención fue que vi a mi princesa hablando con un tal Max. Me contaron que compartían tres clases y que se habían estado hablando durante estos días.
Ya eran las tres de la tarde, nosotros teníamos entrenamiento de fútbol americano ya que se acerca un partido amistoso.
Creo que no les había contado que practico fútbol americano, bueno ya se enteraron.
Pasó el tiempo muy rápido, ya eran las seis y diez de la tarde. El entrenador nos colocó a trotar y hacer estiramiento en esas tres horas, a veces me da un fastidió ese entrenador porque pareciera que no sabe nada más que colocarnos a trotar y estirar, es lo único que nos coloca hacer.
Llevé a Daniel a su casa, ya que queda cerca de la mía. Llegue a mi casa y estaba mi padre sentado en su sillón leyendo el periódico, como siempre.
A penas cuando me vio comenzó a gritar como loco diciéndome que en dónde me había metido en estos cuatro días, por qué no contestaba el celular, para qué tenía un celular si no lo iba a contestar, bla...bla...bla... Yo no entiendo por qué los padres se malgastan haciendo ese tipo de cosas si nosotros, bueno por lo menos yo, no los escuchamos, cuando comienzan con la cantaleta siempre terminan con dolor de garganta, dolor de cabeza y mucho estrés, entonces ¿por qué no se ahorran todo eso y nos dejan en paz a nosotros? A veces pienso que ellos no quieres que crezcamos y que vivamos nuestra vida pro lastimosamente la tenemos que vivir sí o sí.
Después de hora y media de estar aguantando la cantaleta de mi padre y de estarle diciendo que ya tengo diecisiete años y puedo hacer lo que yo quiera, al fin me dejó en paz y me fui para mi habitación, cinco minutos después Emma llamó a mi puerta diciéndome que la comida ya estaba lista. Bajé a comer con mi escandaloso padre y su querida esposa.
- ¿Puedes dejar ese teléfono? – preguntó mi padre. Estaba hablando con Daniel, que me decía que mi princesa iba a cumplir años en un mes, y que tocaba organizarle algo épico.
- No – dije de mala gana – no ves que estoy ocupado.
- Si no vas a respetar la hora de comer es mejor que te divas a tu habitación – dijo subiendo la voz.
Me levanté y me subí a mi habitación, al parecer ese es el único lugar de la casa que tengo paz.
Terminé de hablar con Daniel y me acosté en mi cama y no sé en qué momento me quedé dormido, pero lo hice.
Estaba en el jardín jugando con mis carros de carreras, mi madre estaba el invernadero de la casa de Londres, era una tarde hermosa aunque el sol ya se estaba escondiendo para que saliera la luna y las estrellas. Cuando vimos que estaba haciendo un poco de frio entremos a la casa y mi madre comenzó a hacer un chocolate caliente. De repente escuchamos la puerta abrirse muy bruscamente, era mi padre, venía furioso, muy antes lo había visto así, entro a la cocina y le dijo a mi madre que necesitaba hablar con ella, ella asedió y se fueron de la cocina a la sala dejándome solo. Yo estaba jugando con mis carros de carreras cuando escucho gritos y cosas romperse, fui a ver qué era lo que pasaba y era mi padre rompiendo todo lo que estaba en su camino, mi madre estaba llorando y mi padre rompiendo y llorando a la vez, no entendía nada y por miedo escondí para que no notaran mi presencia. Después de diez minutos están allí, salí de la casa para ir a la casa de mi mejor amiga Sara, ya que ella vivía en la casa de al lado, por suerte no tardó en bajar, le conté lo que estaba pasando y me dijo que me podía quedar en la casa de ella ya que yo no quería ir a esa casa, a mi casa.
Me desperté de un salto, tenía la camisa empapada, la cara y las manos mojadas y mi corazón acelerado. Hace rato no sueño con este tipo de cosas, ese sueño fue cuando mi padre comenzó a cambiar y creo que por esa razón mi madre y yo nos fuimos para Alemania, una razón que yo desconozco. A veces sueño con esa niña Sara, aunque no recuerdo muy viendo con era, sé que ella y yo fuimos muy buenos amigos cuando éramos pequeños, me pregunto cómo estará, seguirá en Londres, no sé pero me gustaría volverla a ver.
Me coloqué otra camisa y traté de dormir, aunque no puede porque ese sueño es algo que marcó mi vida, desde ese día hubo un antes y un después en esta "familia"
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Con Una Nota Me Bastó Conocerla.
RomanceErick: Solo quería tener un futuro estable, no ser como mi padre, alcohólico, drogadicto, etc... pude llegar a tenerlo pero la vida me quitó a la chica que desde un principio fue una desconocida, pero al pasar el tiempo me di cuenta que ya nos conoc...