Capítulo 4: El Partido

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Mario empezó a usar su celular, así que Marco decidió hacer lo mismo. Faltaba poco para el partido, 5 minutos exactamente.

Al revisar su celular, Marco vio que tenía varios mensajes de Marcel.

7:03AM

Marcel: Hola Marco

¿Dónde estás?

7:58AM

Marcel: Maaaarcooo

Contesta

No me puedes dejar en enviado

Marco había pasado tanto tiempo pensando que iba a usar y en el problema de su cabello que ni siquiera se acordó de revisar su celular.

-Espero que Marcel no se haya enojado conmigo

-¿Qué?-Dijo Mario

Marco sin querer lo había dicho en voz alta.

-No nada, perdón, solo estaba pensando en voz alta.

Marco volvió la mirada a su celular.

-Y ahora que le respondo a Marcel-Pensó Marco- No le puedo decir que estoy en Dortmund con mi ex compañero de colegio Mario Gotze para conversar de mi probable traspaso al Borussia Dortmund.

8:29AM

Marco: Perdón por no responderte rápido Marcel pero estoy muy enfermo en mi casa.

Marco no tuvo tiempo de decirle algo más a Marcel porque enseguida sonó el himno de la FIFA y todos en los alrededores de Mario y Marco se paró.

Marco guardó rápidamente su celular en su bolsillo y se paró junto a Mario. La gente estaba emocionada pues era un excelente partido.

¿A quién no le encanta vencer a su eterno rival?

El Dortmund – Bayern ya era un clásico en Alemania.

Mario estaba muy emocionado, sonreía y aplaudía a su equipo.

-Tal vez también sea mi equipo-Pensó Marco

Luego de que los jugadores se saludaran y vayan cada uno a su campo se sentaron.

Había un gran ambiente en Signal Iduna Park. Marco metió las manos en los bolsillos en busca de su celular, pero encontró otra cosa. Sacó eso del bolsillo y lo vio. Era un chicle. Marco no recodaba de cuando sería pero no le importó, lo sacó de la funda y se lo metió a la boca.

El árbitro pitó y el partido comenzó finalmente.

La primera parte fue realmente emocionante, Marco permaneció en silencio todo el primer tiempo pues Mario se veía muy concentrado en el encuentro. El Bayern tenía un poco más la pelota pero el Dortmund era muy rápido atacando y complicaba mucho.

-Vaya primer tiempo-Dijo Mario

-Ha sido un partido muy parejo y emocionante-Respondió Marco.

-Marco

-Si Mario

-Yo, em, enserio espero que vengas acá la siguiente temporada. Creo que vas a llevarte muy bien con el grupo en el vestuario, y creo que ayudarías mucho en el equipo.

-Sí, me encantaría, solo que...no sé si estoy preparado para volver.

-Lo estás, estoy seguro. Yo te ayudaré en cualquier cosa que necesites en el club.

-Gracias Mario, enserio aprecio mucho lo que dices. Consideraré todo la semana que viene.

-De nada. Tomate el tiempo que quieras, solo espero que tomes la decisión correcta.

Pronto empezó la segunda mitad. El partido seguía siendo igual. El Bayern tenía un poco más la pelota pero el Dortmund atacaba muy bien en el contragolpe, pero ahí estaba Manuel Neuer.

Todo parecía que el partido iba a acabar 0-0 a pesar de que los dos equipos han tenido chances de marcar. Solo faltaban 15 minutos.

2 minutos después llegó el gol del Dortmund. Las 80,000 personas en el estadio, incluido Mario. Marco se quedó admirado de toda la pasión, de cómo todo el estadio gritó con todo el alma este gol anotado por el joven delantero polaco de 23 años, Robert Lewandowski. Marco vio como Jurgen Klopp, el entrenador del Dortmund, salió corriendo para celebrar el gol.

Toda la emoción del momento contagió a Marco.

-Esto sí es Echte Liebe-Dijo Marco en voz alta, pero nadie lo escuchó por todo el ruido que había.

Increíblemente, 8 minutos después todo el estadio calló. Había penal para el Bayern Munich.

El jugador que cobrará el penal es Robben. El estadio empezó a silbar y a abuchear para lograr desconcentrar al pateador. La tensión y el nerviosismo era tal que contagió a Reus. Él se sentía un hincha más.

Robben pateó, y falló. ¡El arquero Roman Weidenfeller lo atajó! El estadio volvió a enloquecer. La gente lo celebraba como un gol más.

Luego de 5 minutos de mucha tensión, más los siempre dramáticos minutos de adición, el partido finalizó.

La gente saltaba y celebraba, era una victoria muy importante para poder acercarse cada vez más al título, a poder ganar la tan ansiada Bundesliga.

Marco y Mario se pararon, al igual que el resto del público. Mario se quitó su gorra y abrazó a Marco.

-Que gran partido, y lo mejor de todo es que logramos ganar-Dijo Mario en medio de toda la bulla.

-Lo sé, me han contagiado toda la emoción.

Había sido una mañana muy emotiva, llena de emociones por el deporte que tanto ama Mario Gotze y Marco Reus –Gotzeus- El fútbol.     

Holaa, aquí Mario y Marco viendo el partido-con sus gorras jeje- y los dos abrazándose luego del partido. Intenté hacer esto lo más realístico posible basándome en estos gifs. Voten y comenten si les gustó :)   

Soulmates (Gotzeus)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora