Jueves 11 de Abril, 2013
Habían pasado dos días desde que Mario le había contado a Marco que se iba. Mario lo había llamado tantas veces que había perdido la cuenta, pero el rubio nunca le contestó. Mario sabía que no le iba a contestar, pero dentro de él existía esperanza.
Ambos estaban forzados a verse en el entrenamiento, pero Marco iba a hacer el mejor esfuerzo posible para evitar a Mario. Cuando empezaron a trotar alrededor de la cancha Mario intentó acercarse a Marco.
-Marco-Dijo Mario mientras trotaba-Por favor hazme caso
-Que quieres-Dijo Marco visiblemente enojado
-Necesito que me escuches-Intentó convencerlo Mario-Por favor
-Déjame entrenar en paz
- ¿Podemos hablar luego entonces?
-Lo pensaré-Fue lo único que dijo Marco mientras se alejó de Mario corriendo
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Luego del entrenamiento Mario citó a todos sus compañeros en el vestuario.
-Oh no-Pensó Marco. Él sabía de qué se trataría todo esto.
-Eh, hola-Habló Mario nervioso
Todo el mundo se calló inmediatamente. Había silencio absoluto en el vestuario.
-Bueno, pues, quería contarles que he tomado la decisión de irme del Borussia Dortmund al final de la temporada.
Nadie dijo nada, parecía como si todo el mundo estaba a la expectativa de escuchar algo más.
-Me voy al Bayern-Dijo Mario
Y la cara de todas las personas en el vestuario cambiaron drásticamente. Marco regreso a ver a todos y se dio cuenta como la gran mayoría de sus compañeros lo estaban juzgando con la mirada. Y Marco se sintió mal. Mario era su mejor amigo, y no importa lo que ha hecho, no se merecía esto.
Y ahora, Mario estaba sólo. No tenía con quien refugiarse, no tenía alguien que le diga que no acaba de cometer el mayor error de su vida. Mario era un alma rota, y, ¿quién se haría cargo de un alma rota?
-Marco, podemos hablar por favor-Habló Mario luego de lo ocurrido en el vestuario
Marco podía ver en la mirada de Mario cómo estaba sufriendo, cómo Mario necesitaba la compañía de alguien en ese momento.
-Está bien-Dijo Marco finalmente
Mario se sentía aliviado. Por lo menos alguien quiere oírlo y no sólo juzgarlo con la mirada.
-Nos vemos hoy en mi casa-Dijo Mario
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Ya en la casa de Mario, Marco no sabía que esperar. No sabía por qué Mario quería irse, especialmente al equipo rival, pero tenía que darle una oportunidad para explicarse.
-Gracias por venir-Habló Mario
Marco no dijo nada. Quería demostrar que todavía estaba enojado, aunque en realidad no lo estaba. Marco simplemente estaba decepcionado y confundido.
-Sólo necesito que me escuches. No espero que me perdones, sólo espero que lo entiendas-Dijo Mario
-Está bien, te escucho
-Se presentó esta oferta del Bayern. Y tú sabes que Guardiola será su entrenador la próxima temporada. Pensé que él me ayudará a estar entre los mejores jugadores del mundo. Pensé que esta oportunidad me ayudaría a mejorar y llegar a mí mejor nivel.
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Soulmates (Gotzeus)
Fanfiction-Marco, dime que te pasa. Sabes que puedes hablar conmigo de lo que sea ¿verdad? -Si lo sé, Mario. Es solo que, no me siento muy bien-Respondió Marco un poco triste ¿Es porque le marcaste dos goles a tu ex equipo, verdad? -Preguntó Mario con segurid...