Tied • jb [Terminada]

Capítulo treinta

Abbie's POV:

Tras la ducha volví a la habitación y, como Justin me había dicho, él ya no se encontraba allí. Dejé la ropa que me había prestado al lado de su maleta y me giré hacia la cama aún deshecha. Decidí hacerla antes de bajar a desayunar.

No fue hasta que me acerqué al lado derecho de la cama, en el que había dormido Justin, que me di cuenta de que la pantalla de su iPhone estaba encendida y el nombre de Heather aparecía en ella. Al parecer anoche había puesto el móvil en silencio y por eso no me había dado cuenta de que le estaba llamando. Cuando la pantalla se apagó de nuevo cogí el teléfono y vi que ya era la tercera vez que le llamaba, sin contar las dos de anoche. Tenía que hablar con ella ya.

Acabé de hacer la cama y salí de allí, no sin antes coger el móvil de Justin para entregárselo.

—Oye Justin —Empecé a decir cuando iba aún por el pasillo que llevaba a la cocina—, creo que deberías hablar con Heath- —Callé al darme cuenta de que no estaba solo y fruncí el ceño al ver a Natalie a su lado.

—Buenos días —Me saludó ella sonriendo.

—Ho-hola —Acabé de acercarme a ellos—. Perdona, pensaba que Justin estaría solo.

—Sí, ya le he explicado que hoy solo trabajo por la tarde —Me informó antes de darle un sorbo a su taza—. ¿Has dormido bien?

—Mhm... —murmuré mirando hacia otro lado al notar algo de calor en mis mejillas.

No seas imbécil, ella no sabe nada.

—¿Ese es mi móvil? —habló Justin por primera vez.

—Ah sí —Se lo entregué—, he visto que Heather estaba llamando. Quizás debas llamarla. —Le sugerí, aunque mi mirada decía: "Hazlo".

—Lo haré después de desayunar —dijo al dejar el móvil sobre la barra de desayuno.

—¿Qué te apetece comer? Hay café, cereales...

—Café está bien, pero yo puedo prepáralo.

—No pasa nada, yo ya he acabado —dijo levantándose de su asiento—. ¿Quieres leche con el café?

—Sí, bastante por favor. —Asentí sentándome donde antes estaba Natalie.

—¿Y azúcar?

—Dos cucharadas pequeñas.

Justin seguía comiendo sus cereales mientras veía la televisión del salón. Me extrañó verle tan callado, pero supuse que era porque lo de Heather le había incomodado o algo así. Después de unos segundos yo también miré el televisor porque la que ahora empezaba a estar incómoda con el silencio que se había formado era yo; fue entonces cuando me di cuenta de que tenían puesto E!.

Al poco Natalie dejó una taza de café y un paquete de galletas integrales delante de mí.

—Por si querías algo más —Sonrió—. Voy a darme una ducha que anoche al llegar tan tarde no pude. —Nos avisó antes de irse.

—No sabía que te gustaban los programas de cotilleos... —bromeé para romper el silencio.

—No me gustan, Natalie lo ha dejado porque hablaban del preestreno del otro día y le hacía gracia ver si salíamos en alguna foto.

Su respuesta me pareció algo brusca, pero preferí pasarlo por alto.

—No habéis salido, ¿verdad?

Ambos sabíamos lo que conllevaría que reconociesen a Justin.

—No —Negó—, pero si que habéis salido tú y Joe. —Me miró.