▪Llámame Senpai▪ [Mikayuu]

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Después de las palabras del imponente Guren se generó un silencio sepulcral. Todos tenían sus propios pensamientos en la cabeza pero era de esperar que la de Yuuichirou estaba hecha un desastre hasta esas alturas, teniendo miles de sentimientos que querían explotar en ese mismo segundo pero que por fuera solo lo expresaba manteniéndose rígido y con el ceño fruncido.

¿Ese era el hijo de puta que seria su "superior"?, de inmediato se sintió indignado. El nunca necesitó de nadie para orientarlo y mucho menos se iba a rebajar a dejarse guiar por un chico con cabello rizado de niña.

Le tuvo cierta envidia por tener un cabello tan sedoso y fácil de acoplar, pero se auto ánimo pensando que el suyo se miraba mejor rebelde por que eso era de hombres.

No tenia idea que eso lo hacia ver como un pequeño animal algo descuidado necesitado de atención, hasta en el cabello.

En pocas palabras: delicado pero orgulloso.

-¿Es una broma?- soltó finalmente el moreno carcajeándose exageradamente en un intento de no mostrar debilidad ante nada.-Pensé que cuando me hablaste sobre un tutor seria alguien como Shusaku pero no a un nerd aniñado que parece risitos de oro.

Claramente se vio como las venas de la sien de Mikaela se sobresaltaron cuando su ceño se tenso por el insulto que le dio el chico. Guren solo observaba detenidamente las reacciones de los dos, conocía perfectamente las personalidades de cada uno y a pesar de ser completamente diferentes sabia que la de Mikaela era mas dominante entre las dos y que era capaz de enderezar la mala actitud y mal genio de Yuu.

-Me dice aniñado a mi al niño que le dijeron princesa hace dos días- dijo mientras una sonrisa ladina se le formaba en sus labios cuando vio como el otro enfureció y se puso completamente rojo de pura vergüenza.

-Siguen jodiendo...-estaba cansado de eso, gracias a ese incidente sus compañeros y amigos no dejaban de llamarlo así -¡Solo pedí una maldita servilleta para secar mis papitas fritas! La grasa en exceso puede hacer engordar.

-No me Jodas Yuu, ¿Es en serio? Que sigue después, ¿Una Coca-Cola light?- Y sin poder evitarlo Guren estalló en carcajadas tan sonoras que parecían ser de algún villano sacado de una película, hasta llegando a darle palmadas algo fuertes es la espalda Del rubio. Yuu apretaba sus puños fuertemente mientras su rostros se pintaba de un rojo intenso haciéndolo parecer como si fuese a explotar o algo.

-En todo caso- añadió Mika elevando un poco su voz para ser escuchado en medio de las fuertes risas del director- Quisiera que me asigne de una vez que es exactamente lo que quiere que haga con él, Guren-sensei.

-Cierto, Cierto- se limpió una pequeña lágrima que se deslizaba por su mejilla y se recompuso lentamente -Sus maestros han tenido demasiados problemas por causa de este cabrón, necesito que lo ayudes a dejar esas pendejadas de rebeldía y lo hagas que mejore en sus calificaciones y conducta. Y si se puede...quitale lo princesa por favor.

-Maldito Guren, ¡TE VOY A-

-Okey ya entendí, daré mi mejor esfuerzo. Vamos Yuu-chan.

Antes de que algo mas pasará tomo el delgado brazo del pelinegro y lo jaló hasta la salida para evitar que este se abalanzara sobre que volvía a reírse estruendosamente, ignorando las quejas del que ahora seria su Kōhai.

✴✴✴
Caminaban por el solitario pasillo de la institución en busca de las aulas vacías que se utilizaban mayormente para clases extraordinarias o de detención, el timbre para salir de clases había sonado hace mucho por lo tanto no había ni una sola alma trancitando por ahí a esas alturas.

Yuu caminaba detrás del chico de ojos zafiros mientras observaba ese porte tan recto y fino que este poseía al caminar, desde que habían salido de la oficina de dirección no habían intercambiado palabra alguna. Ambos poseían la dificultad de expresarse libremente ante un desconocido y se les hacia muy difícil hacer una nueva amistad con facilidad cuando únicamente esperaban que el otro les dirigiera la palabra y en este caso ambos eran del mismo modo. Eso explicaba el pequeño circulo social que poseían los dos.