No está corregido aun...
"...por más que cuidara de una rosa esta siempre se marchitaría..."
Leyó aquello y no pudo evitar pensar en Kuroko. Cerró el libro y lo dejo en la estantería en donde lo había tomado, se alejó, pero no camino más de dos pasos cuando detuvo su andar, regreso su vista al libro y lo agarro; aquella frase, quería saber cómo había surgido. Se dirigía a la caja cuando sintió un pequeño golpe a su costado, giro a ver quién era y levanto una ceja.
El chico al notar la presencia de aquella persona no pudo evitar tartamudear.
—D...disculpe, Akashi-san.
—No te preocupes... ¿Furihata?
—Si.
—Bien, si me disculpas —dio media vuelta para dirigirse a su destino.
—A...a....Akashi-san —lo llamo con la voz débil.
Solo giro su cabeza.
— ¿Si?
—Ah...emm —sus manos temblaron —. ¿Sabe qué libro le gusta a Kuroko?
Lo pensó unos momentos, comenzó a recordar todas aquellas veces que había visto a Kuroko con libros, los cuales siempre eran de géneros y autores diferentes... ¡Vaya pregunta le habían hecho!
—La verdad no sabría decirte, pero supongo que —camino hasta una estantería donde estaban las novelas ligeras, acerco su mano a un libro de portada de colores — este es de un nuevo autor —se lo entrego al chico —. Le gustara —una pequeña sonrisa afloro en sus labios.
Solo hizo acto de presencia durante uno segundos, pero fueron suficientes para que el chico frente a él lo notara.
—Akashi-san, ¿conoce bien a Kuroko?
Su mirada seguía fija en el libro.
—Supongo que si —se acomodó su mochila y volvió a caminar a la caja registradora.
Furihata camino a su lado.
— ¿Por qué supone?
—Él es alguien impredecible. Conozco ciertas cosas de él, pero no creo conocer todo de Tetsuya —entrego el libro a la chica que atendía la caja —, pero eso lo hace interesante —susurro.
El pelicafe lo miro interrogante.
...
El tiempo había pasaron tan rápidos que le sorprendió ver que llevaba más de un mes sin verlo, todo debido a que su padre le había prohibido ir al hospital, ya que no le había sentado bien el hecho de que perdiera la Winter Cup, y lo hubiera desobedecido de no ser porque su padre le mandaba guardaespaldas, además de que quería evitarse problemas; por suerte ya se había comprado un nuevo teléfono y hablaba o mandaba mensajes a Kuroko todos los días, lo cual lo mantenía de buen humor, pero a veces no era suficiente. Quería verlo. Más porque durante las llamadas escuchaba algo raro en la voz de Kuroko, algo diferente, su voz ya no era la misma. Se escuchaba entrecortada, débil y un poco turbia, tan diferente a la de él, serena, fuerte y clara. Algo andaba mal. Lo sabía o al menos lo presentía.
Suerte para él mañana podría ir a verlo. Bueno, no solo él sino todo Serin y la generación de los milagros y sus compañeros, todos por primera vez irían a ver a Kuroko; eso no significaba que nadie hubiera ido, sino que era la primera vez que iban todos juntos.
Suspiro.
—Tetsuya —fueron las letras que salieron de sus labios sin que se diera cuenta.
...
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Atardecer
Romance❝Tanto Kuroko como él no estaban bien: uno estaba por morir y el otro iba a ver como eso pasaba.❞