Quizás me esté confundiendo en muchas cosas, quizás todos estos cambios físicos que he echó y que intento hacer no van a servir de nada.
Sólo quería salir de lo que para mí era cómodo, lo que me anclaba al pasado y con ello a todo lo que realmente quiero dejar atrás.
No puedo cambiar lo que hice.
No puedo fingir siempre ser una persona que acepta cualquier cosa y que esta contenta por todo porque no soy capaz.
No puedo fingir que no me importa lo que pasó hace años y que aún no se ha resuelto, no puedo simplemente olvidar todo el rencor, el odio y la desesperación que sentía al verme atrapada en aquella jaula y viendo que mis únicas vías de escape se iban cansando de esperar y una a una me iban dejando atrás.
No quiero quedarme atascada en el pasado y por ello me renuevo demasiado, tanto que ha llegado un punto en que ya ni siquiera me siento yo.
No me siento cómoda, no siento que mi imagen refleje lo que de verdad soy o con lo que me siento a gusto, no veo que los demás me miren con buenos ojos ante los cambios y no se que hacer.
Me niego a hablar con nadie por el simple echo de que eso me llevaría a revelar todas aquellas mentiras que en su día me ayudaron a creerme que estaba todo bien, pero realmente no lo estaba.
Todas aquellas mentiras con las que me autoconvencía de que todo estaba llendo bien y que me ayudaban a fingir haber superado cosas que seguían matándome por dentro.
