Narra Ross.
Al llegar a la habitación mire a __(tn), estaba dormida, sus pestañas rizadas, sus labios algo morados a causa del frío, la coloqué en el sofá que se encontraba en mi habitación, saque una muda de ropa y busqué entre sus cajones una lencería seca, lentamente comencé a desvestirla, saque su polera y su brasier, reemplazando el mojado por el seco, luego saque el pantalón y me detuve en sus bragas, la observe un poco más, estaba hermosa y su frágil cuerpo era perfecto, trate de apartar esos sentimientos para evitar que mi erección crezca aún más pero fue demasiado tarde, estaba muy excitado, sacudí mi cabeza alejando los pensamientos lujuriosos y cambie su ropa interior por una seca.
Fui al baño a secarme y cambiarme y al volver a la habitación acosté a __(tn) en mi cama, me acosté junto a ella, sentí la casa en un completo silencio, Rydel y Ratliff habían ido a un parque de diversiones, Riker estaba con Savannah y Rocky con un amigo. No había visto a Ryland hoy y tampoco quería hacerlo, sigo enfadado con él, entiendo que le guste __(tn), es una chica tan hermosa, la palabra "perfecta" la describe totalmente, pero lo que vi hoy en la cocina de desconcertó demasiado... Sentí a __(tn) removerse en la cama y subió lentamente hasta llegar a mi pecho y acurrucarse ahí.
-Ross.- susurro.
-¿Qué pasa pequeña?
-Hazme el amor.- susurro en mi pecho, aún algo adormecida, wow, esto me desconcertó aún más que lo de la cocina.
-¿Q-Qué?.- respondí totalmente nervioso.
-Quiero que me hagas el amor Ross.
¿P-Por qué?- tartamudee- Cariño, no pienses que tengo prisa en esto.
-Quiero sabes si me amas, que me demuestres tu amor y me digas que me quieres mientras me haces tuya.
Trague saliva, abrí mis boca para responderle pero ella junto nuestros labios en un tierno y dulce beso, haciendo que olvidara lo que iba a decir, poco a poco el beso subía de tono...
~Connie Lynch<3~
4 votos y 2 comentarios y sigo
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Me enamoré de una Rosser.
Fanfiction____ (tn) Morris, una adolescente de 17 años, sola y vacía, maltratada por sus padres desde que tiene memoria, sin esperanzas y sin nadie que la ayude... o eso creía, hasta que llegó él, Ross Shor Lynch, un famoso cantante, 18 años, vida perfecta y...