Narra Ross.
Mis labios presionaron los suyos crenado un ritmico baile entre nuestros labios, esta chica me esta haciendo perder la cordura, no se porque siento la necesidad de protegerla, cuidarla y quererla. Acaricié su mejilla mientras tocaba uno que otro cabello rebelde que vagaba por su rostro, sus mejillas estaban calientes, de seguro estaba sonrojada, era extraño, no la conocía, bueno algo, pero ese no es el punto... Estoy besando a una extraña practicamente, nuestros labios calzaban como dos piezas de un rompe cabezas, me separé lentamente, ella aún no abria sus ojos, lamió sus labios saboreando lo que quedaba de nuestro beso, jadeé por aquel inesperado acto.
-¿Por qué me besaste?-susurró aún con los ojos cerrados.
-No me preguntes porque tampoco lo sé, ¿qué me estás haciendo?- susurré en sus labios, los rocé... se sentía tan bien.
-No esta bien, a penas nos conocemos.- Caí de vuelta a la realidad, como si de flechas se tratara.
-Lo siento.- murmuré avergonzado
-No te preocupes Ross, todo esta bien.- estaba intentando esconder lo avergonzada que también se encontraba pero sus rojas mejillas la delataban, era sumamente adorable.
-Bien, creo que es hora de que me cuentes la razón mejor explicada de porque te escapaste de tu casa.
-Bien.- bufó y suspiró. Yo no soy de aquí, soy de México, era feliz, no necesitaba nada más que aquellas dos personas que me dieron la vida, siempre fui apegada a mi padre, era mi mejor amigo, mi confidente, a la edad de cinco amos, papá nos dijo que nos veníamos para acá, Los Angeles, California, cuando tenia trece mi padre falleció gracias a un chofer borracho, mi vida cambió por completo, mi madre nunca fue la mejor madre ni la peor, pero en este caso, una de las tantas que maltratan a sus hijos, estaba harta de sus borracheras, que llegue a altas horas de la noche golpeándome o gritándome, odiaba el hecho de que me golpeara.- sus palabras salian con mucho dolor y remordimiento.- Ella siempre me culpaba de algo, que le recordaba sufrimiento y dolor, no entendia, no lo entiendo, hoy antes de escaparme ella llegó gritando que quería su comida, pero no habia nada para cenar, no tenia nada en las dispensas o en el congelador como para hacerle su cena, sin embargo, solo me golpeó, no me dió tiempo ni de explicar nada, le suplicaba que parara... ella no lo hacia Ross, seguía gritándome, maldiciéndome y tirando de mi cabello.- Su respiración comenzaba a entrecortarse- Le dije "mamá" y eso al parecer funcionó, ella se detuvo, me mando a mi cuarto, yo... solo tome mi bolso y huí, y mírame, aquí estoy con la persona que hace feliz mi vida-me miró- Solo te pido algo.- murmuró agachando la cabeza.
-¿Qué?.- Pregunté ansioso.
-Que a pesar de los rumores, el odio, las humillaciones o lo que piensen de ti, nunca dejes de ser el chico que eres, que nunca abandones a tus fans, que nunca me abandones Ross. ¿Me lo prometes?- susurró casi inaudible.
-Te lo prometo- La abracé.- nunca cambiaré, por nada ni por nadie.
~Connie Lynch <3
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Me enamoré de una Rosser.
Fanfictie____ (tn) Morris, una adolescente de 17 años, sola y vacía, maltratada por sus padres desde que tiene memoria, sin esperanzas y sin nadie que la ayude... o eso creía, hasta que llegó él, Ross Shor Lynch, un famoso cantante, 18 años, vida perfecta y...