Capítulo XIV

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-Susan, ¿quieres dejar de limarte las uñas y ayudarnos? Te Recuero que el trabajo es de los TRES, no de dos.- le dije cuando ya estaba harta de que no haga nada. Teniamos más de 3 horas avanzando con el maldito trabajo y la muy zorra no había hecho nada más que limarse las uñas, maquillarse o mirar su teléfono. Y ni hablar de la hora en la que llegó. ¡De verdad que es insoportable!

-¿Y qué? Sabes que poco me importa lo que digas.- dijo con una sonrisa que estaba a punto de ser borrada por mi bello puño.- Mmm digamos que ustedes son... mis esclavos.- siguió diciendo con esa estúpida sonrisa que daba náuseas.- Oh, no. ¡Espera! Mejor, tú eres mi perrito y tu bebé.- dijo dirigiéndose a Ethan.- eres mi novio.- soltó esto último mientras agarraba a Ethan del cuello.

Estaba a punto de sacarme de mis casillas. Iba a explotar y nadie quiere ver explotar a Emma Jhonson. Maldita sea la hora en la que el profesor Collins formó los grupos.

-A ver, primero, aquí nadie es tu esclavo.- dijo mi compañero sacándome de mis pensamientos.- Segundo. Emma no es el perro de nadie. Aquí la única con ese calificativo eres tú.- dijo sorprendiendome y a Susan creo que también le sorprendió y a la vez molestó. Se lo tiene ganado por haberme dicho perra. La única perra era ella aquí y tal vez en el instituto.- Tercero. Tu y yo no fuimos, no somos, ni seremos novios. ¿Cuándo será el día que tus pocas neuronas entiendan eso?.- yo estaba a punto de romper en carcajadas por todo lo que le decía y más por las caras que hacia.- y por último. Largo de mi casa. Le diré al profesor Collins que tú no has hecho nada.- dijo un muy serio Ethan caminando hacia la puerta. Yo tenía una sonrisa de satisfacción mientras que Susan tenía la cara desencajada y roja de la ira.

-¿Qué esperas querida? ¿Qué te lleve hasta la salida porque tus pocas neuronas no funcionan correctamente y ya olvidaron el camino hasta la puerta?- le dije con una sonrisa vacilante y ella gruñó mientras dio una gran pisada.

-Esto.no.se.quedará.así.Jhonson.- dijo con una pizca de rabia, o tal vez una tonelada de esta.

-Ethan.-dije para que Ethan me mirara.- parece que a nuestra compañera aún no le queda muy en claro como son las cosas.

-¿Aún no?- preguntó Ethan enarcando una ceja. Susan zapateó una vez más y cogió su bolso y salió echando humo por la puerta. Cuando ya había salido no aguanté mas y estallé en carcajadas e Ethan se sumó a esto.- Es...eso fue mu...muy chis...toso.- decia Ethan entre risas.

-Si.- es lo único que pude articular por las risotadas que dabamos. Después de unos cuantos minutos así, nos incorporamos aun con risas en la cara.- ¿Viste su cara? Eso le pasa por meterse con una Jhonson.- dije haciendo una cara de superioridad. Por fin las risas entre ambos acabaron y nos sentamos en el sofá.

-Creo que ya hicimos mucho por hoy, Emm's. ¿Qué tal si ordeno pizza y vemos una película?- dijo tranquilo volteandome a ver.

-Va, pero yo eligo la película eh.- le dije con un dedo amenzante, se rió y asintió para después levantarse y supongo que ir a buscar su teléfono.

-Las películas están en esa repisa bajo el televisor.- dijo antes de perderse en la llamada.

Pero antes de ir a ver las películas, ordené un poco la mesa en la que habiamos estado trabajando. Guardé mis cosas en mi mochila y los libros de Ethan los dejé en una pila al lado de la mesa. Después de hacer todo eso me fui a ver las películas. No era muy fan de las películas de amor y tampoco creo que Ethan lo sea, asi que me decidí por una de género diferente, "El Hobbit".

La coloqué en el DVD pero le puse stop hasta que Ethan venga.

-Listo.- dijo el susodicho sentándose a mi lado en el sillón.- La pizza vendrá en 10 minutos, ¿está bien una de pepperoni?- preguntó.

-Sí, no hay problema.- y así estuvimos hasta que la pizza llegará. Aún no habíamos puesto la película. El timbre sonó e Ethan fue a abrir al repartidor.
Yo fui a buscar unas latas de soda a la nevera para tomar junto a la pizza. Salí y fui al living, me senté al mismo tiempo que Ethan lo hacia y dejaba la caja en la mesita que había cerca. Le di una lata y cada uno cogió un trozo de pizza y le puse play a la película.

***

-Ésta siempre ha sido una de mis favoritas.- dijo Ethan cuando pasaban los créditos.

-Eso parece.- había estado demasiado atento y se sabía cada paso que protagonizaba Bilbo Bolsón. Miré la hora y ya era un poco tarde. Cogí mi celular para enviarle un mensaje a mamá diciéndole que llegaría un poco tarde y ella dijo que estaba bien pero que tenga cuidado.

-¿Qué haces?.- me preguntó. Al parecer había visto cada movimiento que hacia y no me había percatado de eso.

-Le envié un mensaje a mamá diciéndole que tardaría un poco.- le dije quitándole importancia.

-¿Quieres pasar más tiempo conmigo, enana?.- insinuó pegándose más a mi cuerpo.

-Claro que no idiota.- le dije dándole um suave golpe en el hombro. Pero, ¿por qué más le habría dicho a mi mamá que tardaría? Ay Emma, acabas de cavar tu propia tumba.

-Mjm, y yo soy el príncipe de Inglaterra.- dijo con voz sarcástica. Creo que será mejor cambiar de tema.

-¿Sabes algo de Mila y Jason?- pregunté poniendo en marcha mi súper plan sobre cambiar de tema.

-¿Sabes que no podrás cambiar de tema conmigo?.- me respondió con otra pregunta. Genial. ¿Ahora como hago para salir de esta? Tú y tu gran bocota Emma.

-Lavaré los platos. Hablamos luego.- Ethan se rió y me puse más nerviosa aún.

-¿Te has dado cuenta que no hemos utilizado nada de platos, vasos o algo relacionado con lavar?- preguntó con una sonrisa sarcástica acercándose cada vez más a mi.

-Eh... Puess no me había dado cuenta- articulé con las pocas fuerzas que tenía.

-¿Y tampoco te darás cuenta de esto?.- preguntó atrapando mis labios en un profundo beso...

Sin importar el tiempo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora