Lo que siento

9-Nuestra distancia

La distancia, esa palabra que siempre arruina todo.

Mágicamente sus mensajes me alegran el día, pasamos horas hablando y no me canso, no me aburro de hablar con él, es difícil tenerlo lejos cuando lo quiero lo más cerca posible.

Nuestra distancia impide que haga lo que quiero hacer.

Nuestra distancia impide que no pueda abrazarlo, que no le diga todo lo que le tengo que decir, que no pueda verlo ni escucharlo. Son kilómetros los que nos separan, y esos mismos kilómetros hacen que me de cuenta que lo quiero conmigo, aunque nos separe la distancia.

La distancia es una forma de darse cuenta cuanto te importa una persona, y él me importa. Si lo tuviese a mi lado me encantaría pasar tiempo con él, pero por ahora me alcanza con hablarle, desvelarme noches sólo para que hablemos.

Daría todo por ver esos ojos de cerca y ver esa hermosa sonrisa en persona, por sentir sus brazos y escuchar su voz. Que estemos cerca y que lo único que podamos hacer sea mirarnos.

Porque cuando no tienes a esa persona físicamente, la quieres más, la necesitas y eso me pasa a mí.

Necesito sentirlo conmigo, quiero pasar días, tardes y noches riéndome con él, quiero conocerlo mucho mejor, saber que se siente tenerlo a mi lado. Quiero hacer tantas cosas con él.

Ni la distancia hará que cambie de idea, la distancia es una forma de darse cuenta de que por más lejos que estés de una persona, tus sentimientos se harán cada vez más fuertes, seguirán intactos, porque la distancia puede impedir el contacto físico, pero no puede impedir un sentimiento.