Mi Niñero.

Capitulo 26.

  EL NIÑERO - Cap. 26

#Narra ______(tn)
Íbamos sin rumbo por la ciudad y yo iba demasiado pensativa, pensaba en miles de cosas y una de esos era el cómo me puse acostar con Peter, quede como toda una perra al hacer eso, pero estaba confundida no sé porque lo hice, a lo mejor por venganza y coraje o porque de verdad quería hacerlo, también recordé aquella cifra que me había confundido aun mas, aquel "te amo" que soltó Peter..¿como me puede amar si nos vimos recien ese día despues de tantos años?
Tenía que hablar con él y aclarar que lo que paso aquella noche solo fue una total locura y un momento de placer para mí, lo que me preocupaba era como reaccionaria él, yo sabía que le gustaba, pero pensé que todo eso ya había quedado claro entre nosotros 2 hace ya bastante tiempo.

--En que piensas—las cálidas palabras de Edward, me sacaron del trance en el que me encontraba—
--En cosas sin importancias—mentí—
--E..estado pensando las cosas sobre tu problema –dijo, sus palabras me dejaron fría y yo solo lo mire—
--que tiene eso—conteste—
--tenemos que buscar más respuestas, no conformarnos con una sola, e estado pensando en llevarte a Europa y buscar nuevas respuestas algo tenemos que encontrar y así nos sirve de unas vacaciones también. ¿Qué opinas? –dijo aparcando el carro en frente a un lujoso restaurante—
--que hacemos aquí –dije mirando el restaurante—
--tenemos que celebrar que volvemos a estar juntos de nuevo –solo le regale un cálido beso—
--te amo Edward –dije—
--y yo a ti princesa—
Ambos bajamos, el portero nos abrió la puerta de cristal, entramos y nos dirigimos a la recepción.
--Buenas Tardes –dijo amablemente el señor de ya avanzada edad— Tienen reservación –pregunto--
-- Claro –contesto Edward, me sorprendió que la tuviera, esto seguro y estaba planeado, pero como sabía él que esto pasaría—
--a que nombre –pregunto—
--Edward Cullen –dijo su nombre orgulloso, la verdad un nombre hermoso—
--Acompáñenme por aquí Señor y Señora Cullen –dijo aquel hombre con mucha cortesías—
Yo solo me sonroje, al escuchar a que "señor y señora Cullen", en verdad me encantaba que me llamaran así. Edward como todo buen caballero que es, habría la silla para que yo me sentara, después el señor de la recepción llamo a uno de sus mesero el cual nos dio las cartas para elegir.
--Con que señora Cullen –dijo Edward en tono de broma, yo solamente me sonroje ante su comentario—me encanta como se sonroja mi Señora Edward –volvió a repetir—
--Chistoso –dije—Me encanta cuando me dicen Señora Cullen
--y a mí me encanta como suena –contesto—
-- y se podría saber, como obtuviste la reservación y.. sobre todo que dijera que si, a todo lo anterior? —pregunte curiosa—
--No lo sabía, pero era mejor prevenir que lamentar ¿no lo crees?
--¿les puedo ofrecer algo para tomar? –pregunto el mesero—
--Claro tráiganos una botella de su mejor vino –contesto Edward—
El mesero se marcho y nosotros seguimos centrados en nuestra plática.
--y qué opinas sobre lo que te comente en el auto –pregunto Edward—
--Me parece una maravillosa idea—respondí—pero Edward que tal y si no encontramos una solución, todo esto sería una pérdida en lo absoluto –conteste—
--No hay que perder las esperanzas y si todo esto que haremos no nos da una solución, no habrá ningún problema, porque sabremos que lo intentamos y nunca nos rendimos –acaricio suavemente una de mis mejillas...