Todos eran muy agradables, excepto el tal emmett. Seguramente había aprendido sus ‘tácticas de conquista’ con su hermano mayor. Era muy parecido a Edward, solo que este tenía un cabello castaño inundado de rulos perfectamente marcados, piel apiñonada y ojos color marrón. Sus facciones eran más afiladas pero aun asi se notaba el parecido entre ellos. jasper, era muy parecido al anterior, al igual con cabello lacio, piel blanca con pequeños lunares. Pero a diferencia este tenía una hermosa mirada verdosa. Y por último la menor Rosalie cabello Lacio, ojos marrones, sin duda una hermosura y por cierto... una gran PRINCESA
—Bueno esperen un momento… les llamo cuando este lista la cena— dijo esme sonriente después de que Edward me presentara a cada uno de los miembros.
—Te ayudo esme— me ofrecí amablemente, volteé a ver a Edward y le sonreí, para después caminar detrás de esme hacia la cocina.
—Wow… ¡3 hombres y una princesa!— le dije sorprendida cuando entramos a la cocina — ¿No es pesado?— le pregunte riendo
—Solo un poco…— dijo uniéndose a mis risas —Pero son buenos chicos y claro la princesa es una ternura que por cierto… me ayudan mucho con la casa, también los 3 — dijo sonriente
— ¿Con que te ayudo?— le dije poniéndome a un lado
—Podrías poner cubiertos y los platos todo lo demás estará listo en segundos— me dijo mientras me indicaba el lugar en donde estaban los cubiertos.
Tome siete parejas de cuchillo y tenedor y siete platos. Los lleve a la mesa, acomode primero los platos en los lugares y después tome los cubiertos para acomodarlos.
—Chicos a cenar…— les aviso esme y rápidamente llegaron al comedor, buscaba con mi mirada a Edward pero no lo encontraba, hasta que entro al último, se veía serio pero apenas su mirada se encontró con la mía me sonrió. Le devolví la sonrisa y regrese a la cocina para ayudarle a esme a llevar los recipientes a la mesa.
Con sumo cuidado tome dos recipientes y camine siguiendo a esme hacia el comedor, los acomode sobre la mesa, esme tomo asiento y mire Justin quien me hizo una disimulada seña para que me sentara a su lado.
Carlisle estaba sentado en la cabecera, de su lado derecho estaba esme Jasper y por ultimo emmett y del lado izquierdo estaba edward y rosalie quedando yo entre estos dos últimos.
— ¿…Y como te trata Edward?— pregunto Jasper rompiendo el silencio, todos voltearon divertidos a vernos. Dirige mi mirada Edward y lo volví a encontrar muy serio, miraba perdidamente su plato. Todos lo miraban extrañados ya que no había tocado su plato, levanto la mirada y sonrió.
—Lo siento…— dijo acomodándose mientras tomaba el tenedor para comenzar a comer
—Muy bien…— le conteste —Es muy amable…—
—Y no te aburres de él…— dijo emmett riendo a lo que Edward le contesto con un gesto haciéndonos reír a todos aun mas
—De hecho no…— le conteste sincera
La cena paso rápido, casi la mayor parte del tiempo reía, las ocurrencias de Justin unidas a las de sus hermanos era demasiado.
—Hay cariño… seguro extrañas mucho a tus padres— me dijo esme cuando nos despedíamos —Pero si te sirve de algo, ven aquí cuando quieras— me dijo amablemente mientras me abrazaba
—Muchas gracias…
—Si… cuando quieras ven y podemos ver películas o algo…— se acerco jasper
Edward termino de despedirse y salimos para dirigirnos al auto, el regreso fue silencioso, cosa que era totalmente extraña. Edward siempre teníamos algo de qué hablar, pero esta vez ninguno producía algún sonido.
—edward … ¿qué te pasa?— decidí hablar, asi que le pregunte volteándolo a ver, Edward volteo a verme seriamente y luego regreso la mirada al camino
—Claro… me encantaría— dijo haciendo una aguda vocecita. Lo miraba sin entender hasta que comprendí a que se refería
—Mira primero… yo no hablo así…— le dije riendo —…Y segundo ¿que querías que le dijera? —
—Un… ‘no, no puedo’— volvió a hacer la aguda voz
—El solo estaba siendo amable, no le iba a contestar eso...
— ¡Oh vamos! Sabes bien que no solo estaba siendo ‘amable’— dijo apagando el auto
— ¡EDWARD CULLEN ! ¿Estás celoso de tu propio hermano?— baje del auto
—Claro que no— dijo caminando rápidamente hacia la puerta de la casa dejándome atrás
Camine sin prisa hasta llegar a la puerta, apenas cerré esta y me saque los zapatos, con ellos en las manos subí las escaleras.
Entre a mi habitación, deje caer los zapatos y deje mi bolso en una de las repisas del closet, tome un short y una blusa para poder cambiarme.
Estaba por acostarme cuando recordé a edward. Siempre que discutíamos, bueno las pocas veces que lo habíamos hecho siempre era a causa de sus ‘celos’ los cuales negaba rotundamente, y como siempre ahí voy yo detrás de él. –Ahora no iré yo tras de el- firmemente dije en mi foro interno, pero en cuanto volteé a la mesa de noche y vi las fotos que nos habíamos tomado en el parque de diversiones, unas inmensas ganas de tenerlo a mi lado me arrollaron por completo. Le tenía más cariño del que creía tenerle.
Salí al pasillo y desde la puerta de mi habitación veía como la suya estaba cerrada, respire profundo y camine hacia a la habitación de Edward ...
Di tres leves golpes sobre el trozo de madera, después de unos segundos escuche un ‘Esta abierto’ del otro lado de la puerta. La abrí lentamente y me quede parada sobre el umbral. Lo mire por unos segundos, estaba recostado mirando televisión, según por lo que lograba escuchar, eran deportes.
— ¿No vas a dormir conmigo?— le pregunte con voz suave. Volteo a verme y luego regreso su mirada al televisor
—No prefieres ver películas con Jasper …— ahí estaban sus celos, era estúpido que dijera que no lo eran. Aun asi no tiene por qué decirme nada cuando nosotros solo estamos ‘saliendo’
—Me encantaría…— reí —Pero sabes, dicen por ahí…— mire hacia arriba haciendo un movimiento con mi mano —Que su hermano… E… Ed… En…— fingía haber olvidado el nombre — ¡EDWARD!... si Edward si, asi se llama…— dije alegre como si hubiera recordado el nombre —…dicen que besa increíblemente— subía y bajaba rápidamente mis cejas, mientras que el me miraba atento
— ¿Asi que solo lo buscas por sus ‘besos’?— pregunto siguiéndome el juego…
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Mi Niñero.
Teen FictionUna historia de una chica normal de 17 años y la inesperada llegada de ¿Su Niñero?