Opuestamente iguales (Cdm yaoi)

C.5 Nathaniel

POV CASTIEL.

Me fui literalmente corriendo hasta la sala de delegados, se me había olvidado por completo que tenía castigo.

Sólo iba por una razón, bueno, dos razones, uno: estoy a punto de repetir el año por faltas; dos: amo molestar a Nathaniel.

Llegué al frente de la puerta de la sala, iba a abrir la puerta, pero una extraña conversación hizo que me detuviese.

"Nath, estoy harta de esperarte..." Era la voz chillona de Melody, la lame-suelas de Nath. ¿Desde cuando tan confianzuda con él?, ella nunca le decía "Nath", de hecho él les dijo a todos que le dijeran "Nathaniel".

"Sabes que estoy enamorada de ti, y ni siquiera me das la oportunidad de demostrarte que puedo hacerte feliz".

La voz de aquella chica se estaba quebrando, ella estaba llorando y no escuchaba la voz de Nath. Me sorprendió bastante, pero ella era muy notoria, lo que me sorprende es que Nath ya lo supiera y no quiciese estar con ella.

De alguna forma me alivia bastante que Melody no fuera de su gusto, digo, ella se le pegaba mucho y siempre hacía todo por Nath, era muy estúpida para mi gusto.

"Lo siento Melody, yo no quiero herirte, pero no estoy seguro de que me gustes de esa forma."

Al fin escuché a Nath hablar. Como pensé, la rechazó de nuevo.

Sentí una gran satisfacción y unas ganas casi incontenibles de reír. Melody no me agradaba, no me agrada y nunca me agradará.

Quizás sea porque odio tanto a Nath que espero que se quede solo para siempre, ¿que el fuese feliz con una pareja?, ni pensarlo. Él no las merece,y yo no le desearía una chica tan idiota como Melody~

"Aunque sea... ¿puedo besarte?"

Abrí la puerta y ésta rebotó contra la pared dando un horrible sonido, poco me importó.

- ¡Mierda!, Castiel, toca antes de entrar.

Me encontré a Nathaniel completamente sonrojado y a esa chica muy cerca de él, de hecho, estaba apoyada en los hombros de Nath y muy pegadita a él.

- ¡¿Vengo a castigo y me encuentro con que te coges a esta zorra?!

Estaba enojado, no sabía por qué. Y es que esta chica me tenía los pelos de punta, el mismo Nath me dice que a penas son amigos, ¡¿y la muy pendeja quiere un beso de Nath?!, ¡Cómo si fuese a pasar!

Sentí un doloroso ardor en mi mejilla derecha.

Nath me había golpeado.

Tuve que retroceder un paso para no caerme, ¿cómo se atreve a golpearme?, el sabe bien que lo terminaría matando en una pelea.

Giré nuevamente mi rostro a Nathaniel para ver su cara.

Él estaba tan enojado que me comenzó a dar miedo.

- ¡No llames así a Melody! -. ¡No me lo creo!, ¿se había enojado porque le dije zorra a esa zorra?

- ¡Me importa una mierda!, ¡yo la llamo como se me da la puta gana!

Melody por fin soltó a Nath y se fue corriendo.

- ¡Basta! Yo no... voy a tolerar esto.

Nath comenzó a calmarse y esbozó una sonrisa fría y falsa como las que siempre hace.

Cuando Nath me decía lo último, la vieja de la directora llegaba y saludaba a Nath mientras recogía unos papeles del estante, ahí fue cuando entendí la situación, el pendejo de Nath quería parecer, como siempre, el niño bueno.