Opuestamente iguales (Cdm yaoi)

C.22 Plan en marcha.

Castiel no tenía idea de lo que le esperaba ése día. Si alguien le hubiese dicho, insinuado, aquéllo que Lysandro le vino a contar, seguramente le hubiese dado tanta risa que moriría asfixiado.

Qué bueno que no fue de esa manera...

Lysandro buscaba a Castiel, aunque no con mucho entusiasmo, era lento y no era a propósito. Sabía y temía que su mejor amigo se enojara con él, pues nunca había mencionado a Armin frente a él, nunca había insinuado que estaba enamorado frente a él, y Castiel no se tomaría muy bien que Lysandro haya estado enamorado de un chico por tanto tiempo y Castiel no se enterara de nada. Lysandro sabía que Castiel se sentiría herido por creer que Lys no confiaba en él, por eso mismo pensaba en cómo decirle.

Si era más fácil declararse a Armin que decirle a Castiel. ¿Tendría que escribir 2 canciones ahora?

Se paseaba por los pasillos que dirigian al sótano, esperaba que Castiel no estuviera ahí, quería ganar más tiempo para seguir siendo cobarde como siempre.

Mientras bajaba las escaleras, se daba ánimos diciendo para sí mismo que la cobardía es un defecto aun más feo que la curiosidad, pues ya estaba bueno esto de huir a cada rato, debía hacer algo por él Lysandro del futuro, quizás algo malo o algo bueno, pero tenía que cambiar de actitud si quería tener la atención, y amor, de Armin.

Así, con la fuerza de las palabras que se había dicho, llegó al sótano dando rápidos pasos, veía a Castiel sobre mesa que estaba en una orilla.

- ¡Castiel! Necesito... -. El mencionado casi se cae del susto, no había escuchado a Lysandro llegar. Por otro lado, Lysandro iba perdiendo rápidamente todas las fuerzas reunidas, se sintió tonto por gritar de esa forma.

- ¡Avisa cuando llegues! Casi me matas del susto -. Castiel se había irritado, justo en ese momento estaba pensando en alguien.

- Perdón...

- Y ¿qué quieres? -. Castiel terminó confundido, primero Lys le grita y ahora calla.

- ¿Qué?

- ... -. Castiel imitó uno de los famosos gestos de Nathaniel, luego se preguntó si pasar mucho tiempo con el delegado ya le estaba afectando el cerebro.- Lysandro me ibas a decir algo cuando llegaste -. ¿Será que su amigo ya estaba desarrollando Alzheimer?

- ¡Oh, sí! -. Apoyó su espalda en el muro cerca de la mesa, era hora.- Se que es inútil pedirte que no te enojes, pero es que ni yo mismo sabía eso...- Jugaba con sus manos mirando al suelo.

- Al grano.

- Me gusta alguien -. Y si sólo con eso Castiel se sorprendía, Lysandro no quería ni imaginar qué pasaría después.- Y es... Un chico.

Se contaban los segundos, Lysandro sudaba nervioso, se preparaba para esperar incluso un golpe, pero no fue así.

- Con tal de que no sea yo -. Decía en broma mientras le daba palmadas en la espalda.

Se reía de su propia broma y Lysandro estaba contento, la peor parte estaba dicha, y Castiel se lo tomó muy bien, algo sospechoso, pero no tenía motivos para dudar de Castiel, o no se había dado cuenta.

- Creí que te enojarías porque no te lo dije antes -. Lysandro le sonreía con alivio.

- Sí, bueno todos tenemos nuestro secreto... -. Se rascaba la nuca con nerviosismo, sólo se le venía a la mente una persona, y trataba de evitar a toda pensar en él.- y ¿quién es?, ¿lo conozco?

- Sí, y quizás lo encuentres un poco raro porque, bueno, es raro y... -. Castiel lo miró para que dijera su nombre de una vez por todas, ya lo tenía mareado con tanta excusa.- es Armin.