Opuestamente iguales (Cdm yaoi)

C.21 ¡Maldad pura!

Alexy estaba de buen humor ese día, las cosas se habían arreglado, disfrutaba estando con su novio, pero algo le decía que él no sería el único que tendría novio.

No se había olvidado de lo prometido a Armin, tenía una misión que completar.

- ¡Lysandro! -. Fue a saludar al pobre chico que trataba de concentrarse mientras estudiaba en el patio.

- ¿Pasa algo, Alexy? -. Respondió ya rendido, sabía que no podría deshacerse de él hasta que Alexy quedara satisfecho con sus dudas. 

- Me preguntaba si mi hermano te ha enseñando a jugar ya -. Una reacción, cualquier cosa, Alexy lo único que necesitaba era una señal para seguir con su juego.

Y quizás fue un poco más allá la señal que le dio Lysandro.

- ... -. El pobre victoriano se encontraba terriblemente rojo. Desgraciadamente , sus pensamientos lo habían delatado imaginandose la escena que tuvo con Armin cuando estaban en la enfermería. - Fue hace...hace algún tiempo.

Alexy se había dado cuenta de lo tenso que estaba Lysandro, y se sintió bastante bien al saber que tenía razón, Lysandro estaba loco por su hermano. Se sintió muy felíz, su hermano era correspondido, no hay nada mejor que ser correspondido en el primer amor, se sintió muy aliviado al pensar en Lys como cuñado y no alguna persona mala. Lysandro era un buen partido.

- ¡Qué extraño!, normalmente él no comparte con los demás -. Alexy seguía viendo cómo el chico quedaba cada vez más sonrojado por las palabras de éste.

- ¿E-En serio? -. Lysandro no se lo creía, quizás tenga una oportunidad con Armin. Quería gritar, de forma victoriana, al mundo de lo felíz que estaba.

- Sip, seguro que se enamoró de ti  .- Alexy procuró decirlo en forma de broma, pero bien sabía que Lysandro se lo tomaría en serio.

Pudo ver al chico de cabellos blancos que sonreía, trataba de ocultar su rostro porque no podía dejar de reir como idiota. Se había hecho una bolita tomando sus rodillas y escondiendo su cabeza. Alexy se derritió de la ternura, Lysandro era aun más mono cuando estaba enamorado. Tendría que actuar pronto o una chica le quitaría a su cuñado.

- Eso es... -. Nunca se había sentido tan felíz, era mejor que ver conejos en las tiendas, era incluso mejor que tomarlos, porque él tenía a Armin, a su querido Armin quien correspondía sus sentimientos.

- ¡No me digas que te gusta mi hermano! -. Exclamó con sorpresa fingida, qué pena que no participó en la obra de teatro del instituto. - ¿debería decirle? -. Comentó de forma graciosa, estaba aguantando la risa todo lo que podía pues Lysandro se había sorprendido tanto que terminó por girarse completamente a Alexy de forma brusca.

- ¡No le digas!, -. Y así solito Lysandro ya no pudo retractarse, practicamente había hecho público sus sentimientos hacia Armin, ya nada podría detener al gran Alexy. - Alexy, no estoy para bromas, ¡regresa ahora! -. Levantó la voz mientras veía cómo Alexy corría hacia el instituto.

Lysandro corrió tras él temiendo que lo delatara frente a Armin, está de más decir que su libreta se quedó en el jardín.

Alexy llegó a la sala B del instituto, donde su hermano estaba jugando con su psp, no dudó ni un segundo y gritó para llamar su atención.

- ¡Armin! -. Corría hasta él, pero una sombra le impidió el paso, Lysandro había saltado tres bancos con gran agilidad para llegar primero que Alexy.

Armin le puso pausa al juego y subió la vista para ver a su hermano tratando de soltarse del agarre de Lysandro mientras éste le tapaba la boca con una mano. No pudo decir nada sobre la situación en la que estaban, pues Lysandro habló primero.

- ¡Lo que diga Alexy es mentira!, ¡no le creas! -. Armin cada vez entendía menos.

- ¿Qué quieres decir?, ¡¿por qué no quieres que Alexy hable?! -. Armin estaba molesto, no quería ser el único que no se entera de nada, aunque en clases sea así.

Lysandro no tenía argumentos...

- ¡La curiosidad es un defecto muy feo! -. Los hermanos comenzaron a reír tanto que Lysandro terminó por soltar a Alexy sin entender qué era tan gracioso.

- Y ...- Habló Armin cuando las risas se calmaban. - ¿qué era lo que ibas a decir? -. Lysandro se quedó inmóvil, no podía ser que Alexy lo delatara, dónde estaban sus modales, por algo la curiosidad no era buena, y ahora ¿qué diría Armin?

- Si quieres saber, debes preguntarle a Lysandro -. Habló desafiando al chico alvino quien dio un gran suspiro de alivio al darse cuenta de que Alexy no diría nada.

- ...Debo ir por mi libreta -. Y nuevamente comenzó a correr, o huir, hacia el jardín, ni siquiera Alexy pudo detener la elegante huida de su futuro cuñado.

Alexy miró a Armin.

Armin miró a Alexy.

No supieron qué decir.

Lysandro había encontrado su libreta justo donde la había dejado, se podía decir que fue un golpe de suerte el haber recordado que la perdió, extrañamente justo cuando más necesitaba una excusa para alejarse.

Pensaba en Armin, en éstos momento pensar en él ya no era una novedad. No sabía si era posible inventar una excusa o mentir a éstas alturas, quizás ya iba siendo hora de aclararle sus sentimientos a Armin.

Recordó aquél día cuando perdió su libreta y Armin la encontró por él, ésa vez le había intentado besar. Y se sintió tan tonto, quizás si eso nunca hubiese pasado, él no estaría tan inseguro, pues perfectamente se le llamaría rechazo cuando Armin no lo besó.

¿Y si pasaba de nuevo?, quizás Armin lo rechazaría, ¿y si todo este tiempo estuvo imaginando que Armin le quería?, pero entonces no tendría sentido para Alexy hacerle una broma como ésa, era muy cruel.

Pero sabía, muy a su pesar, que debía decirle. Ya estaba aburrido de no poder besarle, de no darle un abrazo o tomarle la mano. Tantas ganas de querer derretirse en esos ojos que eran los trozos del cielo más hermoso del mundo.

"Monócromos versos,
en una hoja de papel,
ya gastados por su uso,
ya sé que inútil es.

Nunca comprenderás,
ni yo me entiendo muy bien,
las gotas de lluvia
tus ojos no dejan ver.

Mis pobres letras no podrán volar para ti.
Mi pobre poesía contigo quiere salir...

Por favor, dime que entiendes,
dime que sabes lo que se siente caer. Yo sé bien que lo comprendes,
te espero porque siempre te amaré.

Con cada página
que lleva tu nombre,
pinta las blancas hojas
de colores azules.

Nunca pude mirar
el cielo tan cercano
que escondido estaba
encerrado en tus ojos."

Lysandro no podía creer lo cursi que había escrito en su libreta, pero era lo más sincero que pudo haber pensado para Armin. Quizás el amor si se trate de estúpidos. Lysandro volvía a leer la letra de la canción, quería que fuese perfecta para Armin, ya no podía esperar a darle música.

Porque ya lo había decidido, Lysandro se le declararía a Armin, él no era ningún cobarde, aunque haya huido. Tenía que decirle, sabía que no aguantaría más con sus sentimientos casi saliendo de su boca, sabía que era necesario dejar de mentirse y mentirle a Armin.

Pero Lysandro no se declararía así como así, él le iba a cantar...y necesitaba ayuda de Castiel para eso.

Tragó seco y guardó su libreta en un bolsillo. Recuerda: libreta-bolsillo. Luego de eso, caminó hasta el sótano del instituto, ya era tarde y de seguro que encontraría a Castiel ahí y si no estaba, pues debía estar sí o sí en la azotea...o con el delegado.

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Wa Zapallos! Me demoré un poco. Es que comencé a tomar los fármacos de nuevo y estuve muy mareada. Y quizás este cap fue un poco mierda pero son las 2 am y debo ir a la escuela.

A62~