54.Narrado

36.5K 3.4K 275
                                    

Y ahí estaba yo.
Tocando el timbre de la casa de Ashley.

Observe por última vez mi mochila, tenía algunas cosas que ocuparía para el proyecto y más en el fondo los productos que me había regalado el misterioso Anónimo.

En lo que tardaban en abrirme repase mi plan: Cuando terminemos el proyecto pediré entrar a su baño, de ahí haré todo lo que se me venga en mente.

La puerta se abrió y ashley sonrió de mala gana.

—Quiero terminar esto antes de que venga mi madre.—Dice haciendo un gesto.

Ashley. Vestía con un vestido muy de primavera. Hacia resaltar su figura, una figura perfecta. Era delgada y tenía todo bien distribuido. Su hermosa melena rubia caía bajo sus hombros. Grandes ojos azules. Era la chica perfecta para cualquiera.

Sólo había algo que era imperfecto en ella. La superficialidad que la consumía de pies a cabeza. Esas veces en las que me humillaba, en las que me dica un montón de cosas haciéndome sufrir, cuando me agredía físicamente.

Yo no iba hacerlo. No le haría daño. No sería como ella. No me iba a vengar.

Entro a su casa siguiendo sus pasos.

—Puedes sentarte ahí.—Me señala el sofá color negro que resaltaba con las paredes blancas.

—Bien ¿De que problema social lo elegiremos?.—Pregunto. Pero ella no me pone atención estaba hablando por telefono.

—Eres una maldita zorra.—Dice ella riendo.

Pero me sorprendió ver a su mamá caminando hacía nosotras enojada.

—¿¡CÓMO ME DIJISTE!?.—Grita la señora pegándole una cachetada a Ashley.

—Pense que no estabas.

—¿Cómo rayos me has dicho?—Pregunta de nuevo su mamá.

—No mamá, a ti nada. Hablaba con una amiga.—Ashley me mira por un segundo y luego voltea hacía abajo.

—¡No soy tú madre! ¡Eres una desgracia en mi familia! La prueba de que tú asqueroso padre me engaño.—Observo como la señora castaña golpea a Ashley. La golpeaba con los puños cerrados.

Sólo me quedaba viendo sin hacer nada. Tenía ganas de llorar de gritarle que no la golpeara de esa forma tan brutal.

Ashley sólo se cubria la cara con sus brazos, no se defendía hasta que logró alejarse.

—¿¡No te da vergüenza que alla gente viéndote!?—Podía escuchar el rencor.

—¿Qué pasa aquí?.—Dijo una voz masculina.

—Que tú hermana me a golpeado.

Abro la boca ante tal mentira.

Podría que Ashley allá sido mal educada, me allá humillado pero no quería que esa mujer le hiciera más daño.

Doy un grito ahogado cuándo observo que él chico le dio un puñetazo a su media hermana.

Estaba por darle otro pero yo me interpuse. Me avalance para abrazarla antes que él la golpeara nuevamente. Sabía que él no iba a golpearla si yo la cubría. Sabía que él no me iba a golpear a mi.

—¡Quítate!.—Gritó él chico.

—¡No!.—Pude sentir como las dos sollozabamos.

—¡Qué te quites!.—Me vuelve a gritar.

No iba a quitarme. No iba a dejar que la golpeara.

Lo escucho bufar.—¡Veras lo que te espera esta noche!.—Dice él hermano y se va.

Me aparto de ella y se me queda viendo.

—Anda corre.—Dice llorando.-Dile a todos lo que acabas de ver.

Niego con la cabeza.

—Te equivocas sobre mi Ashley yo no soy así, no soy como tú.

Tu Amiga La GORDA. #PADP #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora