Wrong Life.

Capítulo 21.

Holaaaaaaaaaa :) disfruten el capítulo.

Pd: Cambiamos a la actriz que tiene Bárbara, ahora es la bella Emma Stone. En multimedia :) <3

Capítulo 21

Katyle

Silencio. Todo estaba en silencio.

Estábamos alrededor de la mesa sentados. Bárbara a mi lado tranquilizándome, era difícil para mí.

-¿Irte a Londres? -pregunta mi ma...Kannia. -¿Por qué?

Resoplo. -Por favor, sabes perfectamente por qué.

-Pero Katy, deberías conside... -interviene Steven.

Lo interrumpo. -¿Me harías el favor de no dirigirme la palabra, y si puedes la mirada? Gracias.

Emma habla después de mucho rato. -Papá, -él la mira. -¿Al menos te disculpaste con Katyle?

Él ríe. Lo que me hace enojar mucho más.

-¿Qué da tanta gracia? ¿Qué le hayas pegado a la hija de tu esposa por no saber controlarte? -dice Bárbara con enojo. -No vale la pena hablar contigo.

-No te desgastes, Bárbara. La decisión está tomada. -le digo. -Solo gasté innecesariamente mi tiempo diciéndoselo. -me levanto de mi asiento. Bárbara repite mi acción. -¿Emma, vienes?

Emma mira hacia su padre y luego a Kannia, repite la acción varias veces.

-No.

-¡Emma! -grita Bárbara.

-No, amiga. -le digo. -Es su decisión y la respeto. -miro a Emma. -Sabes que las puertas siempre estarán abiertas para ti. 

Ella se levanta y me abraza. -Cuídate.

Doy una mirada a Kannia quien no ha dicho nada. Luego a Steven.

-Hija. -me llama ella. -No lo hagas. -dice con la voz quebrada.

Por más que me duela me iré igual. Tengo oportunidades en Londres. Vivir acá ya no sería lo mismo, no habría felicidad por más que lo intentase. Quiero una vida feliz.

-Adiós, Kannia. -le digo para salir de ahí seguida por mi mejor amiga.

Salimos de ahí con mi maleta que ya estaba hecha, a casa de Bárbara.

-Katy, ¿estás segura? Aún puedes arrepentirte. -me habla ella con su vista fija en el camino.

-¡¿Bromeas?! ¡No! -suspiro. -Amiga, será una nueva vida, y una mucho mejor.

-Entonces, ¡Londres nos espera! -levanta sus dos brazos bailando y riendo.

-¡Bárbara, el volante! 

-Oh, cierto. Perdón. -dice volviéndose completamente seria.

Que normal.

Llegamos a la casa de Bárbara y nos dimos cuenta que solo eran las diez de la mañana así que dormimos unas tres horas, luego almorzamos. Queríamos pasar el tiempo antes del vuelo. Vimos algunas películas. Hasta que por fin, faltaban dos horas para que nos fuéramos.

-¡MIERDA! -grita Bárbara.

-Sí, son muy tiernos Augustus y Hazel.

-¡NO HICE MIS MALETAS!

-¡¿QUE?!

[...]

-¡Mierda, Bárbara, rápido! -digo con desesperación.