Capítulo 14

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Capítulo 14

Peeta

Los médicos no decían nada, las enfermeras pasaban y no decían, nada, el silencio se estaba volviendo aterrador, la idea de un mundo sin Katniss no era posible, perdí a mi familia, pero si la ardí a ella de nada me servir seguir con vida, podía soportar que no se acordara de mí, que incluso jamás lo hiciera, pero la idea de estar en un mundo donde no existía mas, era impensable.

-¿Familiares de la señorita Everdeen?- dijo el médico, en seguida me levante de donde había estado sentado aunque no por mucho, ya que no duraba mi dos minutos sentado.

-Sí, yo soy su marido, y no es Everdeen es Mellark.-aclare, con la voz llena de miedo por lo que el medico pudiera decir.

-Bueno la paciente ha dicho que su nombre es Katniss Everdeen.-comenta el médico y decido dejarlo pasar, igual ella no recuerda nada que tenga que ver conmigo.

-Da igual, ¿cómo esta ella?.- Lo único que quiero escuchar de la boca de este hombre es que mi mujer está bien.

-Logramos estabilizarla, ha tenido un paro, afortunadamente logramos traerá de vuelta, está un poco aturdida por que no recuerda nada, pero lejos de eso sus signos vitales son buenos, y los golpes que sufrió no son de cuidado, tuvimos que practicarle un legrado porque él bebe ya está muerto cuando llegó aquí, pero no se preocupe ella podrá volverse a embarazar.-de alguna forma lo que el médico me dijo me tranquilizo, me dolía saber que nuestro pequeño diente de león no está ya con nosotros, pero ahora mi mayor preocupación es saber qué es lo que ella recuerda.

-¿Puedo verla?

-Hoy no, esta sedada y no despertara hasta dentro de 8 horas, por lo que le sugiero que se vaya a casa a descansar y no se preocupe si algo sucede durante la noche le avisaremos.- Eso no era discutible, yo no iba a ir a ningún lado.

-¿Sabe si su pérdida de memoria es...permanente?- Quería y merecía la verdad, necesitaba saber si había esperanza para que ella y yo estuviéramos juntos.

-No lo sabremos hasta que, mañana por la mañana la revisemos y sepamos que parte de su cerebro, o más bien, que parte de su memoria fue dañada y si es temporal o permanente, lo único que sabemos es pregunta es sueños por alguien.-dijo el médico, como quien no quiere la cosa, todos en Panem la conocen y saben quién es y por su tono mi mente en seguida se va por el nombre de una sola persona, Gabe.

-¿Quién?, es Hombre o mujer.-Si era hombre por el que ella preguntaba seguramente se trataría de Gabe.

-Es mujer, pregunta por su hermana Prim.-la boca se me seco al instante, si ella pregunta por Prim es entonces por qué no recuerda lo que le pasó a Prim, seguramente su memoria no recuerda más allá de la cosecha.

-En cuanto despierte, hágamelo saber, quiero verla, necesito saber hasta qué punto recuerda.

-Está bien, pero debería hacerme caso, ella no va a despertar por hoy, es mejor que valla a casa, descanse, mañana será un día agotador, y le recomiendo traer a alguien que sea muy cercano o cercana a ella, si a usted no lo recuerda podría alterarse y eso es lo que menos queremos.

En seguida el medio regreso por donde vino, pensé en llamar a Effie o a Haymitch, pero si mis sospechas eran verdadera y ella no recordaba nada de la arena o del vasallaje y todo lo demás, lo más seguro es quién de ellos se acordara, no tenía más opción que llamar a...Gabe, porque todo al fina terminada llevando a Katniss con Gale, es que de verdad su destino era con Gabe y no con él, no puedo permitir que eso pase.

Katniss

-¿puedo pasar?- dijo una voz desde el otro lado de la puerta, mi mente estaba confundida, tenía imágenes en mi mente que no sabía si eran verdad o no, cosas horribles, lo último que recordaba era ofrecerme como tributo por Prim, y luego había un vacío, no sabía que había pasado después de eso, y luego ese chico, sé que lo conozco, lo he visto antes, pero su forma de verme, me incomoda.

-Adelante.- dije, y en seguida mis nervios aumentaban, era él.

-Hola, ¿cómo sigues?.-pregunto y había un dejo de tristeza en su voz, algo dentro de mi hizo clic, como si con solo verlo pudiera sentir algo por él, por un desconocido, porque eso era, por mucho que en un tiempo me hubiera regalado ese pan cuando casi moríamos de hambre, no era un conocido, lo que mi mente necesitaba era ver a Prim, saber si ella estaba bien, necesitaba ver a Gale.

-Bien, Peeta no sé qué diablos pasa.-dije, y al instante algo se encendió en sus ojos, casi podría jurar que lloraría.

-¿Me recuerdas?.- dijo con la voz entrecortada y con una ansiedad patente.

-Si, por que no habría de hacerlo, hace un rato estaba, alterada, pero si te recuerdo, tu nos salvaste la vida a mí y mi hermana, con ese pan nos devolviste la vida.-en cuanto termine de decirlo sus ojos volvieron a la tristeza y eso por alguna razón hizo que mi corazón diera un vuelco.

-Solo recuerdas eso ¿verdad?, perdón no puedo tengo que irme.-en seguida salió cerrando la puerta detrás de sí, no sabía a lo que se refería, pero algo me decía que yo tendría que recordar algo más, aunque no sabía a ciencia cierta, que.


La Historia Después del Sinsajo (Editando)Where stories live. Discover now