Capitulo 11

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Steve no abría su boca, no articulaba palabra, estaba quieto y pensativo, su mirada estaba perdida en el aire. Por lo que parece no va a hablar...¿Qué se cree? ¿Cree que me va a tomar el pelo? Lo siento mucho pero debe responderme, no voy a seguir quedándome sin respuestas, esta vez ¡No!

—Steve, te he hecho una pregunta, te agradezco que me respondas por favor—espeté.

—Muchacha, yo no puedo contestar preguntas, si no tengo las respuestas.

—No me sigas mareando ¡Basta!, Estoy cansada de que todos me oculten algo, ¿Por qué? ¿Qué no entienden que vivir en medio de secretos es desagradable?

—De verdad me gustaría poder ayudarte—medió Steve.

—¿Enserio? Pues ayúdame, si tu de verdad quieres ayudarme, dame respuestas, solo eso, ¿Te cuesta mucho ser sincero? —solté, furiosa.

—Yo tengo un pacto de silencio, no puedo romperlo...

—Me importa un comino si tienes un pacto de silencio o no, Solo ¡responde! —Tiré al suelo los cojines que estaban sobre el mueble y me levanté. —Ese hombre por el que te pregunte es mi padre y quiero saber todo sobre el... Esa mujer que está desaparecida es mi mamá y lo que más deseo es encontrarla sana y salva, ¿No lo entiendes? Quiero saber qué es lo que pasa, quiero saber por qué debo estar escondiéndome, quiero saber donde esta mi amigo, quiero muchas respuestas y tu...Tu tan solo me las niegas, se hombre y ten los pantalones de decirme lo que sabes—Grité enfurecida.

—Cálmate o terminaras convertida en lobo—dijo uno de los chicos de la manada de Chris, creo que fue Angel.

—Sí, Respira Alis, si te conviertes en este momento solo será un problema—dijo Isabella.

¿Qué me calme? ¿Pero cómo? Uff... Vamos Alisson, ¡calma! ¡Calma! No ganaras nada si te sigues enfureciendo, ¡cálmate! ¡Cálmate!

—Está bien, tú ganas muchacha. —reconoció Steve.

—¿Responderás a mis preguntas? —pregunté ansiosa.

—Así es.

—¿ Papá era un cazador de los de tu clan?

—Si era Cazador pero no de mi clan, es complicado...

—¿Por qué es complicado? —indagué.

—Por cosas...

—¿Por qué cosas? —insistí.

—No sabría por dónde empezar.

—¿Cómo se conocieron?

—En California, los dos estábamos e entrenamiento para ser cazadores, queríamos pertenecer a el Clan de Federic, miles de jóvenes se entrenaban y competían cada año, para pertenecer a ese clan...

—¿Qué tenia de especial ese clan? —pregunté interrumpiéndole.

—Se decía que Federic iba a cumplir una profecía y muchos queríamos formar parte de ella.

—¿Lograron entrar al clan? —interrogué.

—Tu padre si, O'Brien siempre fue muy ágil para todo.

—y...¿Tu?

—Yo no lo pude lograr...

—Y ¿Entonces no seguiste en contacto con papa?

—Sí, el me iba contando todo lo que hacían, por ello forme este clan —Confesó.

—O sea que ¿Tu empezaste a entrenar a nuevos cazadores, por algo que papá te contó?

Amor Incompatible #WYNA2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora