-DIDI- grité enojada y pateé el suelo- Sabana, Evelyn, PIPER- dije aun más enojada intentando de buscar a las personas que se suponía que debía encontrar en este juego, el Escondite.
Escuché risitas provenir del armario de la floristería. Corrí rápidamente y abrí la puerta, eran Didi y Piper.
-Piper- se quejó Didi- Te dije que no te rieras, ¿ves? Ahora Bea nos ha encontrado.
Piper siguió riendo ante la cara de enojo de Didi.
-Ahora les toca buscar conmigo- dije cruzándome de brazos.
-Va, pero sin Piper, esa chica riéndose hará que todos se nos escapen- se quejó Didi.
Mi hermana hizo un puchero.
-Anda, Pi- le dije rogándole.
En eso apareció mi madre.
-Vamos Piper, es hora de tu siesta- dijo y la niña de mala gana entró en sus brazos.
Didi y yo sonreímos.
-CHICOS- dije- YA SALGAN DIDI Y YO BUSCAREMOS AHORA.
Nadie salió.
-¿Sabes Bea?- susurró Didi- creo que el objetivo del juego es seguir buscando hasta encontrar a todos.
Me soné la frente.
-Cierto, cierto- reí y fuimos como ninjas gateando por el suelo.
En eso mi cabeza se chocó con la de alguien.
-¡Ay!- me quejé- Que daño- susurré.
Escuché a alguien reírse, levanté la vista al cielo, y delante de mí se encontraba un muchacho alto de ojos claros y cabello oscuro.
-¿Estás bien pequeña?- preguntó el muchacho.
-Sí- dije y me levanté, Didi hizo lo mismo
- ¿Vienes a comprar flores?- preguntó mi amigo.
El joven rió.
-Pero que listo eres- dijo y le revolvió el pelo.
-Eh, eh- se quejó Didi, yo me reí- ¿acaso no ves que este look toma tiempo en hacerse?
-Ah, ¿sí?- dije riéndome aun más.
-Sí señora, es mucha dedicación- dijo y se pasó la mano por el pelo.
El muchacho rió y yo también.
-Pero que linda sonrisa tienes pequeña- me dijo el muchacho y me levantó en los aires, yo, asustada, me agarraba de su camiseta.
-UAAAA- dije por miedo a caerme.
-¿Cómo te llamas?- dijo él riendo, Didi no se veía muy contento.
-Bianca- dije mientras miraba al suelo.
-Qué lindo nombre- sonrío- Yo me llamo Alex.
En eso apareció mi madre.
-Oh, bienvenido- dijo ella- ¿Qué desea?
-Buenas señora yo…- dijo pero fue interrumpido por alguien más.
-Alex, perdona por demorar, no había estacionamiento cerca- dijo una hermosa joven rubia que entró a la floristería- Hola Sra. Bloom- dijo con una sonrisa, no sabía que mi madre la conociera.
-Hola Chris- dijo mi madre con una sonrisa- ¿Quién es este joven tan apuesto? ¿Tu novio?
Alex sonrió mientras me cargaba.
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Lets fall in love again
RomanceEsta es la historia de Bianca Bloom, una joven chica de 16 que solo tiene dos cosas en su cabeza: 1- Cuidar de su hermana mayor, Sabana y 2- Convertirse en la nueva Rony de la compañia en la que trabaja, no tiene tiempo para los chicos, mucho menos...