Después de un momento que nos quedamos abrazados en silencio no aguante más, Daniel me tenía que soltar ¡ya! Mi mente sólo pensaba en no alejarme de él y yo ya no podía seguir más con él, me había visto la cara de tonta ¿cuánto tiempo? ¿2 meses? ¿1 mes? ¿Cuánto? Eran muchas preguntas para tan poco tiempo.
-Suéltame por favor —dije como pude en medio del llanto.
-_____, por favor —dijo Daniel abrazándome más fuerte.
-Suéltame Daniel, solo estás empeorando las cosas —dije aún abrazada a él.
-______... —dijo él sin hacerme caso— por favor
-¡Qué me sueltes no escuchaste! ¡¿cuánto tiempo me viste la cara de boba?! ¡¿Cuántas veces me besaste después de besarte con ella?! ¡No quiero escucharte, ni ahora ni nunca! ¡Me engañaste, jugaste conmigo! —exploté y cómo pude logre zafarme de sus brazos—¡Vete Daniel!
-_____ yo... —me quiso agarrar del brazo pero ahí exploté aún más.
-Vete, déjame tranquila. No quiero saber nada de ti. ¿Qué más quieres de mí? TE DI TODO, DANIEL, TODO ¡Y MIRA CÓMO ME PAGAS! —comencé a golpearlo en su pecho— déjame en paz por favor —susurre y me fui sentando en el piso y apoye mi cara en mis rodillas, acto seguido abrace mis piernas y comencé a llorar como si no hubiera un mañana.
-______, princesa... —se inclinó Daniel a mi lado tratando de tocarme de nuevo.
-¿Eres tonto o qué Daniel? ¡TERMINAMOS ENTIÉNDELO! —le grité lo más fuerte mirándolo directo a los ojos cosa que creo que hice que se sorprendiera porque se quedo callado y yo volví a ponerme en la mamá posición que minutos antes me encontraba.
-Basta, ya hiciste más daño de lo que ya habías hecho, ahora vete de mi casa por favor. Mis papás no tardan en llegar y no quiero que te vean aquí para entonces Daniel. —apareció Mónica— ¿Qué haces mirándome? ¡Vete! ¡Largo! ¡Fuchila!. No quiero verte en mi cara —comenzó a empujar a Daniel a la puerta logrando así cerrarle la puerta en la cara, la verdad a mí ya no me importaba si él sabía cuánto daño me había hecho o no, que me vea llorar... Por él o no, yo simplemente quería desahogarme y eso está a haciendo. Mónica se quedó ahí parada recostada en la puerta qué momento antes Daniel había "salido" por ella, ella no me decía nada supongo que esperaba a que yo me calmara para poder hablar tranquilamente o que me quitara todo lo malo que llevaba adentro.
No sé cuánto tiempo nos quedamos en esas posiciones, yo llorando desconsoladamente y Mónica apoyada en la puerta guardando silencio, no sabía si ella estaba con su celular o no, solo sé que no me había dejado sola en estos momentos cuando más la necesitaba. Sentí que se paró y se sentó a mi lado, cruzó sus piernas y guardó silencio de nuevo. Simplemente seguí en la misma posición, llorando como una perdedora.-Recuéstate en mis piernas cariño y bótalo todo, vamos que salga todo, es la última vez que te voy a permitir que llores por ese idiota así que aprovéchala y saca todo. —hice lo que me pidió acostándome completamente en el piso y apoyando mi cabeza en sus piernas y ella procedió a acariciarme el cabello mientras seguía llorando lo que provocó que me durmiera y me olvidara de todo aunque sea por un rato.
(...)
Cuando me desperté seguía en la sala de estar, pero ya no estaba acomodada en las piernas de Mónica sino la remplazaba un almohadón, me pare rápidamente.
-Bella durmiente despertaste. Mis papás nos trajeron comida, iba a comer esperando a que me despertaras pero el tallarín chino se veía buenísimo así que no me pude resistir lo siento. Te guarde tu comida en el microondas para que la calentaras. —dijo quedándose sin aire— ¡Dios! Tengo que dejar de hablar tan rápido ¿quieres comer?
-Pues... —no me dejó terminar.
-Nada de pues... Vas a comer quieras o no —se fue a la cocina dejándome sola ahí— Venga que no imprimí invitación aún.
—Esta bien, pero no te pongas de mal humor hombre —dije riéndome y olvidándome por un momento mi dolor.
-Mario llamo, dijo que viene en la noche con los Sebas para comer pizza y jugar algo o ver alguna película, como es mi casa y te quedas en ella estás obligada a quedarte aquí. —Dijo prendiendo el microondas para calentar mi comida.
-Bueno. —mire por la ventana y vi que se había anochecido— ¿qué hora es?
-Las 19:30 —me respondió como si nada— ¿ahora me crees lo de bella durmiente?
-¿Por qué me dejaste dormir tanto? —pregunte sorprendida—
-Te veías cansada, además, necesitabas olvidarte de todo un rato —respondió mirando su celular— los chicos están por llegar, no te llenes con el tallarín ¿si?
-Trataré —comenzó a sonar el microondas indicando que ya estaba mi comida caliente—
-Provecho —me dijo Mónica poniéndome el plato delante mío para irse a la sala de estar a acomodar el almohadón que había dejado en el piso torpemente.
-Gracias —dije para comenzar a comer.
-Dicen los chicos que están por la calle pero no encuentran el edificio y Mario no está con ellos ya que dentro de un rato viene, saldré a la calle a buscarlos. —se dirigió a la puerta—Mientras tanto come.
-Ya mamá —dije lo suficientemente fuerte para que me escuchara ya que se encontraba por salir del apartamento.
(...)
No tardaron mucho en subir los tres al apartamento con una bolsa de comida chatarra y helado que nadie más comida aparte mío, al parecer ellos ya sabían que yo había terminado con Daniel pero no me mencionaron el tema ni nada por el estilo, simple gente al parecer yo era su amiga ahora pero ellos siempre tendrían una relación Daniel lo que me hacía sentir una entrometida estando con sus amigos.-Hey _____, yo también quiero helado —me llamó Villalobos haciéndome salir de mi trance— no te lo comas todo —apuntó su celular hacia mi cara lo que al parecer estaba grabando para su SnapChat.
-Yo me como todo lo que yo quiero —le saque la lengua— No molestes mejor, fíjate que hoy no estoy de buen humor
-Ya lo siento —se acercó a mi oreja como queriéndome decir un secreto— Aquí entre nos, ese helado es completamente tuyo, lo compre pensando en ti.
-Muchas gracias Villawolf.
Hola...
Ódienme si quieren, lo merezco creo... Mil disculpas por no actualizar hace rato no hay excusas que justifiquen mi falta de atención a la novela, pero aclararles que no las deje de pensar solo que no estaba de ánimos de escribir un capítulo porque la verdad si escribí durante este mes que no escribí ya que el anterior capítulo una niña muy bella me lo escribió ya que efectivamente no estaba de buen humor y eso se hubiera notado en el capítulo mi falta de interés por un capítulo a lo que consideró "decente". Gracias XoxoAddictedToU. También quiero decir que "¿Y si te digo que me gustas?" No está cancelada solo que por problemas de horarios de las dos ya que entramos al colegio de nuevo no hemos podido actualizar pero ya nos pondremos de acuerdo de nuevo. Paciencia mis amores. Espero que les haya gustado con todo mi corazón este nuevo capítulo y que me hayan perdonado por ausentarme.
Espero leer sus COMENTARIOS y ver sus VOTOS que me alegran la vida ❤️.
Las amo un montón y las extrañe mucho❤️.
Pd: trataré de subir más seguido.
Pd2: déjenme sus preguntas y las contestare en el otro capítulo ❤️.
Pd3: perdón por la nota tan larga.
-T.
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Solo fue un Tweet - Daniel Patiño y Tú
FanfictionTrata sobre ______ Pacheco, ella tiene 17 años y es una paisana. Todo comienza cuando decide responder un tweet de su amor platónico Daniel Patiño más conocido como PaisaVlogs y la sorpresa que se lleva cuando este decide contestarle.