The Forbidden

Navidad

Narra Liam

Al día siguiente me levante temprano, comencé a recoger toda la casa, cuando termine entre a la habitación y estaba mi pequeño sentando bostezando-

-Feliz navidad Harry -me acerco a él y lo abrazo-

-Feliz navidad hedmano -lo pongo de pie en la cama, le pongo una chamarra y lo cargo a la sala, le preparo un cereal y le prendo las caricaturas, mientras el almorzaba puse a hervir un poco de agua, de pronto comencé a escuchar gemidos provenientes de la habitación de mis padres, corro a donde esta Harry y le tapo los oídos, solo me mira confundido, unos segundos después paran-

-Ven, vamos a bañarte -lo cargo al baño, después voy por el agua caliente y la nivelo en la bañera con agua fría, le comienzo a quitar la ropa y lo meto en la bañera-

-¿Po qué me tapaste los oídos? -Dijo mientras le echaba agua en la cabeza-

-Por que, pensé que tenias frio -mentí y el solo se rio-

-No tenía frio, pero gacias -cuando termine de bañarlo lo saque de la bañera, pase la toalla por su hermoso cabello con rulos y él solo reía por las cosquillas-

-Hoy te voy a llevar a comer ¿quieres? -el niño sonríe-

-Pero mi papá se llevo el dinedo -dice triste-

-Tengo más -el niño sonrió-

-Y ¿Dónde lo conseguiste? -dice feliz, puse una sonrisa fingida-

-Soy tu hermano mayor, y voy a hacer lo que sea por ti -el sonrió y me abrazo, me susurro un "gracias", le pongo su ropa y le termino de peinar su cabello- listo -le digo sonriendo- me voy a bañar para irnos, ahora ve y espérame afuera -comencé a desnudarme, mire mi rostro en el espejo roto y solo vi a un chico triste, infeliz y con solo un motivo para vivir: su hermano, me meto a la ducha y con el agua que sobro de Harry me bañe, olía a bebe por el jabón que usaba el pequeño, cuando iba a salir entra Harry y cierra la puerta- ¿Qué pasa pequeño?

-Hay un señod en la habitación de mamá, no se quien es -dice el pequeño asustado-

-Es un amigo de mamá, quédate aquí -me cambié y peine rápido, agarro mi suéter y le pongo una chamarra a Harry y una bufanda, salimos de la casa e íbamos agarrados de la mano caminando por las calles, tenia frio pero no tenia mas que ese suéter, todo mi dinero lo gasto en Harry y lo demás me lo quita el estúpido de nuestro papá, en donde lo escondiera él lo encontraba y si no le daba golpeaba al pequeño, me gustaría irme de ahí pero si lo hago los amigos del viejo que son unos policías corruptos me amenazan que me van a meter preso, miro a Harry y veía a los niños jugar con sus juguetes nuevos, solo de ver que él no tenia nada mi corazón se rompió, después de agarrar un taxi llegamos al centro comercial, Harry nunca había estado ahí, miraba las grandes tiendas de ropa, comida y otras cosas, entramos a una juguetería y él estaba corriendo por los pasillos mirando todos los juguetes, de los 200 dólares me quedaban 150 pero no me importaría gastarlo todo por él-

-¿Qué vas a querer? -dije contando el dinero-

-Solo quiero una cosa -agarra un peluche de un conejo de trapo muy extraño pero lindo-

-¿Algo mas? -negó con la cabeza, se me hizo extraño, llegue a la caja y pague, al salir pasamos por los puestos de comida- vamos a comer ¿Qué quieres?

-No, eta bien -dijo el niño bajando la mirada, me detuve, lo suelto de la mano y me agacho para quedar a su altura-

-¿Por qué estas triste?, ¿no te gusto tu juguete? -me mira con sus hermosos ojos verdes- dime que pasa

-Es mejor que guades el dinero, no quiedo que papá te pegue ota vez por gastarlo en mi -lo abrazo y lo cargo-

-No te preocupes pequeño, de donde vino este dinero va a venir mucho mas -lo bajo y me sonríe- ven vamos a comer pizza -se puso contento y compramos la pizza, él no dejaba de abrazar a su conejo-

-Me guta que tu también comas y no solo me veas -dice recordado cuando le preparaba comida que había en casa, que era muy poca y solo alcanzaba él a comer-

-Lo se, y voy a tener que "hacer" dinero mas seguido -el pequeño me sonríe, pasaron algunos minutos y seguíamos comiendo, muchas chicas se acercaban a tocarle los rulos a Harry y otras a coquetear conmigo, pero ninguna me llamaba la atención, no me gustan los hombres, pero después de correrme pensando en uno no estoy tan seguro o tal vez no ah llegado la persona indicada, de vez en cuando también señoras me "alquilaban" por una noche, así que no se que me gusta, caminamos un poco mas por todas las tiendas, recordando cuando mis papas me traían y me compraban todo lo que pedía, algún día Harry podrá comprar lo que él quiera de aquí también, le compre dulces se paseo en juegos y compre un poco de comida, regresamos a la casa, ya era un poco tarde, le puse la pijama-

-¿Hoy no domidas conmigo? -dijo triste-

-No, tengo que "hacer" dinero, pero no tardare, cuando despiertes aquí estaré -le doy un abrazo y le doy a su nuevo conejo, espero a que duerma y cuando lo hace salgo de mi casa, mi mamá estaba en su habitación tal vez drogada, ella no nos hacia nada, era como si yo no existiera para ella, al llegar al trabajo veo a mi amigo Niall-

-Hola -el rubio me sonríe-

-Ayer te contrataron muy rápido ¿eh? -dice sonriendo-

-Lo se y ¿a ti como te fue? -hace un gesto de mas o menos- ¿Cómo esta tu abuelita? -el solo tenia a su abuelita, no conocía a sus papás y ella era la única que le quedaba pero estaba muy enferma y necesitaba medicinas, al no tener estudios ni nada no le quedo mas que esta "vida"-

-Bien, ayer le compre medicinas y ya se levanta -me dice sonriendo-

-Eso esta bien -lo abrazo-

-Gracias -me dice sonriendo- sabes, ayer le hable por primera vez al chico que me gusta, trabaja en una cafetería, se llama Josh, pero no seguí hablando con él, ¿crees que quiera salir con un prostituto? -dice triste-

-Pues...-una voz nos interrumpió-

-El rubio -dice la voz del tipo-

-Me tengo que ir amigo, nos vemos más tarde -le sonreí y se fue con el cliente, después me habla un señor a mí, estaba ebrio-

-¿Cu, cuanto? -logro decir-

-100 la noche señor -me lleva a un motel que esta ahí cerca-