Un deseo del corazón

descubriendo

-¿VISTE LO QUE OCURRIÓ?- el grito que Alya dio por el teléfono era tan fuerte que Marinette tuvo que separarse un poco del celular para no quedar sorda.

-es decir ¿Quién es ese chico de traje rojo?- la emoción por el descubrimiento de este enigmático personaje se desbordaba en cada silaba que la chica lanzaba- al blog han llegado infinidad de fotos de este chico en acción y brincando por las azoteas de Paris, incluso un muchacho quien asistió a una boda hoy pudo tomarle una foto de perfil. ¿Un zorro?¿Acaso tenemos un nuevo héroe? ¿Estará con Ladybug y Chat noir?- la ráfaga de preguntas que enumeraba Alya estaban rondando en la mente de Marinette.

-lo siento Marinette, pero no puedo dejar pasar esto, tengo que ponerme a investigar de inmediato, quizá la próxima semana podríamos ir al cine, o mejor aun, podemos organizar un día de chicas con todos los servicios incluidos- en el fondo se escuchaba como el tecleado de la computadora de su amiga era destrozado, literalmente, de ser usado tan rápidamente.

-Está bien, entonces te veo el lunes en clase, si me entero de algo ten por seguro que serás la primera en saberlo.

- Eres la mejor, nos vemos- el clic del otro lado de la línea le indicó que su amiga había dado por concluida la conversación. Marinette suspiró audiblemente y atrajo las piernas hacia su pecho mientras permitía que su mirada se perdiera en la vista que le ofrecía su balcón del hermoso Paris.

No había podido dejar de pensar en el chico de aquella mañana, Firefox. Estaba confundida, hasta el momento el chico no había mostrado señas de ser parte del equipo malo, pero tenía que tomar sus precauciones, porque en realidad ¿Qué sabia de él?

-¿Qué ocurre Marinette?- tikki se posó en la rodilla de su amiga. Su kwami era un ser muy especial, hermoso y único, entendía que chat debía de tener uno, pero era lgo tonto que hasta ese momento se preguntara cuántos más había como ellos.

-dime Tikki, ¿Quién era ese personaje que apareció hoy?- si tikki reconocía a otro de sus compañeros, posiblemente eso calmaría la inquietud de la chica. La pequeña criaturita quedó en silencio unos momentos, se veía pensativa, perdida en sus pensamientos, pero al final la respuesta no era la que la chica de coletas esperaba.

-la verdad es que esta es la segunda vez que veo aparecer este poder en este mundo.

-¿no es como tú, tikki? ¿Acaso no es un kwami que tiene su propio Miraculous?- la incertidumbre no era un sentimiento que le gustara a Marinette.

-no lo sé, solo una de tus antecesoras se topó con un ser similar a él, pero en realidad supimos muy poco de sus orígenes. No fue creado con nosotros, no sé su origen o quien lo creo.

La chica meditó unos momentos aquellas palabras mientras en su mente se conjuraban más preguntas, y una idea que había tratado de ocultar en lo más profundo se asentaba en la superficie de sus pensamientos, una idea que estaba relacionada con un tulipán rojo.

-esa vez que se encontraron ¿Qué ocurrió?

-no lastimó a la Ladybug de ese momento si esa es la pregunta- la respuesta fue parte de lo que quería saber, pero tikki no está contestando la verdadera pregunta.

-y... ¿y también le regalo un tulipán rojo?- el recuerdo del tulipán traía consigo el del beso en la mejilla. Solo recordar el casto contacto, dulce y suave le hacía sonrojar hasta las orejas.

Tikki negó con la cabeza- no tengo idea de eso, pero ¿no es curioso?

-¿Qué exactamente es curioso?- parecía que la chica no seguía la conversación de la kwami.