*Capitulo 1*

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  Una pareja de edad media entraba con sigilo a la habitación de sus tres hijas, en sus manos llevaban un gran pastel con velas de numero 13 y tres nombres grabados en ella: Kira, Rika y Lina.


—¡Sorpresa! ¡Feliz Cumpleaños niñas!—exclamaron los padres.

—¿¡Pero que demonios?! ¡Saben que odiamos eso!—se quejó una de ellas. Rika.

—Casi se me sale el corazón—añadió la otra. Kira.

—¡No vuelvan a hacerlo!—alegó la otra.


  Los padres les acercaron el pastel y las tres hermanas, juntas, soplaron las velas. Las tres no solo eran hermanas, sino que eran trillizas, cabellos de color marrón, tez clara y ojos color verdes. A pesar de ser trillizas, el trío de jovencitas eran completamente opuestas en cuanto a personalidad. 

 Cada una destacaba a su propia manera: Kira era la mayor de las tres por unos minutos, responsable, amable, inteligente y calmada, Rika, era temperamental, ruda y bastante peleonera, la segunda en nacer después de Kira y Lina, era tímida, asustadiza y muy inocente y por ende también la mas pequeña de las tres.  


 —Chicas arréglense que hoy vendrá su tío de sus vacaciones en Asia a verlas por su cumpleaños y de paso dijo que tiene una gran sorpresa—avisó la madre de las tres.


 Cerca del mediodía, un hombre se hizo presente en la residencia, consigo llevaba una caja en la cual contenía tres cachorros de lobos.Al ver a esos cachorros, las niñas felices se lanzaron felices sobre los lobitos. A pesar de que Kira, Rika y Lina podían parecer idénticas por fuera y diferentes por dentro, había algo que unía a las tres hermanas y eso era que su animal favorito eran los lobos.

 Si bien las niñas estaban contentas con sus regalos, los padres no, según ellos, los lobos eran animales salvajes, feroces y asesinos, no obstante, el tío aseguro que los lobos fueron criados junto con la madre en cautiverio, por lo que eran totalmente mansos. Eran dos machos y una hembra, los machos fueron a parar a los brazos de Rika y Lina, mientras que la hembra paso a ser de Kira.

 Aquellos lobos eran de raza pura y efectivamente no les costo nada barato aquellos lobos, pero el tío afirma que por sus sobrinas, con tal de verlas felices y con sus animales favoritos como mascotas y domesticados, el dinero no importaba. El día trascurrió con total normalidad, las niñas ademas de sus lobos mascotas, recibieron por parte de sus padres tres bellos collares con una luna creciente como dije y una bella piedra color purpura colgada en la punta de esta.


  —Bueno señoritas, espero les haya gustado su regalo, muy feliz cumpleaños a las tres y mas vale que cuiden bien de esos tres pequeños—se despidió el tío.

—Hasta pronto tío Sebastián—saludaron las tres hermanas.

—¡Auch!—se quejó Kira—Oh, parece que alguien necesita un juguete para morder.

—¡Ay!—chilló de dolor Rika—Este también.

—Y este—agregó Lina.

—Tengo un mal presentimiento de esto querido—le susurró la mujer a su marido.

—Tranquila amor, si Sebastian dice que esta bien, hay que confiar en el—intentó calmarla él—¿Y como los llamarán?

—La llamare Nightmare—sonrió Kira.

—Mmm...Doman—musitó Rika.

—Demonio—dijo segura Lina.

—¿Por que ese nombre hija?—pregunto el padre.

I'm not her |Laughing Jack|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora