*Capitulo 13*

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 Rika se encontraba en lo que era su nuevo hogar desde hace años, una vieja cabaña en un bosque del lado opuesto del bosque creepy. Las dos hermanas se encontraban fuera en el patio donde estaban enterrados los restos de Kira y Nightmare.

 Como era costumbre de ellas desde que murió, ambas hermanas junto a Doman y Demonio comenzaban a cantarle cada mañana al amanecer y cada noche al atardecer. Mientras lo hacían, recordaban cada momento que pasaron juntas hasta el día de su muerte, sin poder evitar que lagrimas inundarán sus ojos.

 Su tío Esteban y su tía Sofía solo las miraban desde el interior de la casa, no decían nada, solo las miraban con tristeza junto a sus lobos. Esa mañana, luego de cantarle a Kira y Nightmare, fueron a pasear por el bosque, Rika preguntándose como estaría Jack con su pequeño hijo mientras que Lina no dejaba de pensar en Toby.

—Espero que Jill no haga su aparición ante Jack estando con Trent—pensó en voz alta Rija.

—Tranquila hermana si eso pasa estoy segura de que Jack te avisará―intento animará Lina.

—Eso espe...—antes de siquiera poder terminar la frase un aullido captó la atención de las tres hermanas, el lobo que había llevado a Trent con Jack regresaba cansado y jadeando lleno de heridas mientras el bebé en el interior lloraba.

—Zazu—dijo Doman preocupado corriendo hacia el—¿Qué paso?

—La payasa... apareció... el payaso la confrontó con el pequeño y esta...enloqueció—explico cómo pudo el lobo— Me ordeno traerlo de regreso, pero en medio del camino me la encontré y quiso asesinarlo.

 Antes de que pudieran seguir, se escucharon gritos y aullidos provenientes de la cabaña, rápidamente Lina y Rika junto a Doman y Demonio corrieron en dirección a la casa mientras que Zazu se encargaba de cuidar del pequeño. De una patada, Rika derribo la puerta y para su completo horror, sus tíos y los padres de sus lobos yacían en el suelo en un charco de sangre, mientras que a su lado, Jill, con una verdadera aura de demonio rodeándola y todo su cuerpo y su moto sierra cubierta de sangre.

—¡Tu!—bramó Rika.

—¡Jajajaja! ¡Aquí esta Jill!—rió la payasa.

—Y aquí Jill se despedirá de esta vida!— masculló la hermana del medio transformándose nuevamente y comenzando a atacarla sin compasión alguna.

—¡Tu no debiste entrometerse entre yo y mi Jackie! Ahora te matare a ti y a ese bastado que llamas bebe!— grito la payasa mientras esta intentaba atravesarlo con sus garras ya que Lina logro desarmarla.

Doman y Demonio salieron de la casa dispuestos a ayudar a Lina Dika, tan rápido como sus patas lo permitían, ingresaron al bosque Creepy y de allí, siguiendo el aroma del payaso, llegaron hasta su carpa donde el se encontraba hablando con los integrantes de su circo. En cuanto ellos los vieron, inmediatamente Jack supo que algo andaba mal, no obstante, como no podían entender su idioma, no podían descifrar lo que trabajaban de decirles.

Ambos lobos optaron por tironear de sus ropas para indicar que los siguieran, y gracias a Dios que aquello, Jack, Jason, Pop, Canes y April comprendieron. De regreso en la cabaña de las hermanas, Lina ya se encontraba en el suelo muy malherido, mientras que Rika ahora luchaba junto al lobo que se encargaba de proteger a su hijo.

Jill intentaba llegar hasta Trent, quería que primero la loba que le quito a su amor sufriera viendo la muerte de su hijo, pero lamentablemente, no logro acercarse ni un poco ya que Doman y Demonio llegaron junto con Jack y los del circo y este no dudo ni un segundo en atravesarlo con sus garras. Sabia que aquello no la mataría, pero si la heriría de gravedad solo hasta que encontrasen su caja y la destruyeran matándola definitivamente.

I'm not her |Laughing Jack|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora