Realidades Cruzadas

Capitulo 3

Narra Mary.

Luego de varios encuentros en el basurero y conversaciones para conocernos más y confiar el uno en el otro, recibí su invitación para vernos:

- Mary, sé que solo hablamos pero me gustaría que aceptaras una invitación para salir.

- Si Jason, claro que acepto salir contigo. Pero... -me temblaba la voz - ¿A dónde quieres ir?

- Elige tú el lugar, no conozco por aquí. - me dijo con un tono de decepción y por lo tanto le ofrecí lugares, elegimos encontrarnos en la plaza central y se lo ubique para que sepa dónde es

- Mira Jason, tenes que ir hasta esta avenida que se llama Juan B. Justo y en la calle que se llama Pte. Perón doblar a la izquierda luego haces 5 cuadras y doblas a la derecha en una rotonda y de ahí, son 1, 2, 3 - cuenta en el mapa - y llegas a un bar en la otra esquina queda la plaza - te vas a dar cuenta porque esta toda rodeada de flores.

Me despedí de Jason con un dulce beso en la mejilla y me di media vuelta para regresar a la mansión donde mi padre me estaría esperando. Al llegar, subí a mi habitación para pegarme un baño y relajarme, luego preparé ñoquis ya que es la comida favorita de mi papá y lo llame para que se siente a cenar:

-¡¡Papaaaaa!! La cena está en la mesa - grite ya que él se encontraba en su habitación.

Fue una cena silenciosa y cuando terminamos de comer me agradeció por lo rico que estaba, lave todo lo utilizado para la cena y subí a mi habitación muy cansada ya que tuve un día muy largo, estuve un largo tiempo intentando dormir pero finalmente no me pude pegar un ojo en toda la noche de lo ansiosa que me estaba porque llegue la hora de ver a Jason. Al día siguiente, me levante temprano y estuve horas y horas pensando la ropa que escogería para la ocasión. Me arregle para ir a la plaza y sin saber la hora, le pedí a mi padre que me lleve. Por lo tanto nos subimos al auto y arrancó rumbo a la plaza central. En el camino, me pregunto:

- ¿Hija, por qué vas a esa plaza donde se junta toda la gente de bajo status social? En la plaza del norte están la gente como nosotros y aparte están los hijos de mis compañeros de trabajo (que también son millonarios) con los que solías juntarte de pequeña. Ese es tu lugar, no esa plaza.

- Mira papá, quiero cambiar de aire, siempre fui a la plaza del norte y quiero conocer más el mundo que me rodea - me miró sorprendido por lo que acababa de decir pero sin embargo no respondió nada. me puso una cara extraña todo lo que restó del camino ya que hace tiempo no salía de casa salvo para ver a mis amigas, dudo que se haya creído mi pequeña mentira, pero estaba feliz que no haya recibido una respuesta de su parte a pesar de que sabía que estaba en algo raro porque mi papá es mi papá y me conoce desde que nací pero sin embargo no insistió en seguir preguntando y se lo agradecí mentalmente porque no sabía hasta dónde podía llegar esa mentira y no quería revelárselo bajo ningún punto de vista.

Al llegar lo vi que estaba sentado en un banco dándole de comer las palomas, sin nada en los pies y con ropajes viejos y rotos. Me acerque a él tímidamente, me senté a su lado y allí empezó a hablar con su cálida y dulce voz en donde me perdí por horas. Ahí fue cuando me contó quién era, cómo era su vida y cuál era el motivo por el que llego a mi basurero. Descubrí que él venía de una familia muy pobre y que estaba revolviendo mi basura para encontrar comida. Me conto que tenía 21 años, y que estaba haciendo lo posible por mantener a su madre la cual estaba muy enferma ya que su padre había desaparecido cuando él era niño y sus hermanos han muerto por eso es que toda su vida se baso en proteger y mantener a la mujer que le dio la vida y lo crió el poco tiempo que tuvo antes de empezar los tratamientos por la enfermedad. Caminamos un rato por la plaza y seguimos hablando de la vida de los dos, cuando de repente me pregunto la hora, al decírsela me pidió disculpas, me saludo y se fue sin darme ninguna explicación de nada, quede asombrada por lo que acaba de vivir. Llame a mi padre para que venga a recogerme, quería llegar rápido a mi casa sin pensar en otra cosa ya que tenía muchas dudas sobre que había pasado o por qué habría reaccionado así con respecto a la hora, pero lo que más me preocupaba es que no sabía si iba a poder volverlo a ver por no tener manera de comunicarme, y no quería desaprovecharlo.

Se había generado una lucha en mi interior, sabía que él era de una clase social más baja como también yo sabía que él era un extraño chico. Pero pese a eso, algo me había cautivado de él, algo extraño tenía Jason que no podía parar de pensar en él y aunque sabía que era complicado y mi familia se negaría, quise seguir viéndolo y construyendo esta relación que recién empezaba. Por un tiempo no lo vi más y creí que era por vergüenza que no me buscaba y no estaba en el basurero pero creyendo eso pasaron días y días, casi un año sin verlo ni pistas de dónde encontrarlo...