Después del velorio y funeral de mamá, me dediqué a desalojar su casa, iba a ponerla en venta y quería sacar y ordenar todas sus cosas antes de que me fuera. Decidí no enterrar a mamá, sino incinerarla, si me quedaba a vivir a Corea, prefería no vivir con la culpa de que nunca visitaría su tumba y tener sus cenizas de alguna manera me hacía sentirme cerca de ella.
Era nuestro segundo día desalojando la casa, Alejandra, Joaquín y Suga me estaban ayudando. Mamá tenía tantas cosas, su ropa, revistas, libros, tejidos, lanas, que con los chicos nos estábamos estresando, sentíamos que no avanzábamos nada. Mamá amaba leer, por lo que tenía millones de libros, probablemente los donaría a alguna librería para no botarlos. Estaba sacando cada libro de la repisa que había sobre su cama cuando una carta cayó, volví a dejar los libros en su lugar y recogí la carta, tenía mi nombre en el, la abrí temerosa, ya habían pasado muchas cosas estos últimos días que otra sorpresa podría recibir ahora. Era una carta por mi cumpleaños Nº18 ¿Por qué mamá nunca me la había entregado?
Mi querida Almendra
Hoy es tu cumpleaños Nº18 y quiero decirte que estoy orgullosa de la mujer en la que te has convertido, alguien valiente y con carácter a diferencia de tu madre.
Era verdad, mamá era una persona cobarde siempre asustada de enfrentar la realidad, sino hubiera sido por mí, nosotras tal vez todavía estuviéramos viviendo un martirio.
En esta carta quiero pedirte perdón por ser una madre tan mala para ti y por no cuidarte como se debía, quiero pedirte perdón por darte a ese hombre como padre, pedirte perdón por ser una cobarde que nunca se atrevió a pedir ayuda y por ocultarte la verdad por tantos años.
¿Ocultarme la verdad por tantos años? Oh por dios, no estoy preparada para nada más.
Quiero que dejes de ocultar esos preciosos ojos azules que tienes, que piensas que son herencia de tu padre.
¿No lo son?
Perdóname por no haberte contado esto años atrás, darás por entendido que mi falta de valentía no me ayudó en nada de esto.
¡¿Por qué mamá no podía ser más directa por el amor de dios?!
Seré directa
No me digas...
Eres adoptada
Wow eso si fue directo y fue como sentir un balde de agua fría caer sobre mí ¿Adoptada? ¿Algo más le podía faltar a mi vida? ¿Debería reír o llorar?
Debí contarte todo desde el día que comenzaste a ocultar tus ojos pero tenía miedo de tu reacción, de que te enojaras conmigo y te largaras para siempre. Te pido perdón una vez más por todo el daño que te hecho.
Y en eso termino la carta de mamá ¿Debería hacer un libro o grabar una novela estilo mexicano con mi vida? ¿Por qué mamá nunca entregó esta carta? Me enoja el hecho de que no me haya contado la verdad años atrás pero también me pregunto ¿cuál hubiera sido mi reacción ante la noticia? Estaba tan inmersa en mis pensamientos que no sentí que alguien había entrado a la habitación.
- Alme ¿Qué pasa? – era Alejandra - ¿Qué es eso? – preguntó señalando el papel que tenía en la mano.
- Soy adoptada – solté sin más, el cuerpo de Alejandra se tenso junto a mí y le pasé la carta - ¿puedes creerlo? Adoptada, me pregunto ahora si tal vez tengo un hermano perdido o si mis padres biológicos tiene una buena vida ¿estarán vivos o muertos? – pensé que tardarían más en llegar estas preguntas sin respuesta pero veo que ya estaban dentro de mi cerebro.
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Strong ~ but weak for you ~ Terminada
Hayran KurguAlmendra Benavente es una joven diseñadora de vestuario, que a sus cortos 23 años ya tenía una marca establecida junto a su mejor amiga, Alejandra. Almendra trabajó duro durante toda su vida para estar donde estaba y las buenas noticias y el éxito...