Un Amor En Guerra

Capitulo 5

Narra Aurora

-Tía Magdalena: Aurora, ya llegaste... ven ayúdame a...... hey estás bien?

-Aurora: Tia Lena *Llora y la abraza*

-Tía Magdalena: Aurora que pasa?

-Aurora: Piero Tía Lena! Se va, se va mañana.

Le expliqué en detalle todo lo que estaba pasando a la Tía Lena y solo me abrazaba y trataba de consolarme, pero era imposible, me sentía completamente mal. Fui a mi habitación y lloré hasta quedarme dormida. A la mañana siguiente me levanté, me vestí y Salí a casa de Piero sin pensarlo dos veces.

-Aurora: Tía Lena voy a casa de Piero. Nos vemos.

-Tía Magdalena: no vas a desayunar?

-Aurora: No tengo hambre tía. Quizás luego.

-Tía Magdalena: Toma llévate al menos un sándwich.

-Aurora: Está bien, gracias Tía.

Me acerqué a la puerta y noté que el dije de corazón que me dio Piero estaba brillando. Una pequeña luz roja... Abrí la puerta y él estaba allí, esperándome.

-Aurora: Barone! *abrazo*

-Piero: Aury, venía por ti.

-Aurora: Si, el collar me avisó. Jejeje

-Piero: me gusta verte sonreír.

-Aurora: Sonreiré también cuando regreses.

-Piero: Seguro que sí... el camino... será un poco largo. Mis papás nos llevarán en el auto.

-Aurora: Bueno vamos... quizás podemos escuchar música en el camino.

-Piero: Tengo un buen Ipod. Que me regaló alguien.

-Aurora: En serio? Que considerada esa persona...

Fuimos hasta su casa y subimos al auto. Sujetaba su mano con fuerza, lo abracé y me recosté en su pecho, su corazón latía tan rápido y fuerte como el mío. Sentía que mientras más nos alejábamos de su casa, poco a poco mi corazón se iba rompiendo parte por parte. Al cabo de un rato su papá nos dijo que habíamos llegado al lugar. En ese momento cerré mis ojos y apreté con fuerza su camisa, como para no dejarlo ir.

-Piero: Tranquila... Todo va a estar bien.

-Aurora: Si... si así será.

-Piero: bajemos del auto. Aury no llores mi vida...

-Aurora: Lo intento... *bajando del auto*

Piero se despedía de sus padres y yo lo veía, veía como su mamá lloraba y su papá estaba triste pero trataba de mantenerse fuerte. Luego vino hacia mí y me dio un abrazo, duró un largo rato... después se alejó un poco, me miró y me dio un beso. Luego tomó su equipaje. y se disponía a entrar al lugar.

-Piero: Aury...

-Aurora: Dime...

-Piero: Mi vida tienes que soltar mi mano.

-Aurora: oh... lo siento... es que... no quiero dejarte ir.

-Piero: Lo sé......

Tuve que soltar a Piero y dejarlo ir. Volteó una última vez antes de entrar y me sonrió. Sentí un vacío inmenso al no poder verlo más, y la luz de mi dije se apagó... La mamá de Piero me abrazó y me dijo que todo estaría bien. Subí al auto de nuevo con los padres de Piero. Llegue a casa y le agradecí a los papás de Piero por haberme llevado.