¿Cómo es posible?

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A la maña siguente me desperté en un baúl. ¿Qué hacía en un baúl? En fin... Decidí no ir a entrenar. Necesitaba un descanso. Me puse un vestido violeta con flores de cerezo, unas mayas rosa claro y unas bailarinas negras. Me dirigí a la cocina. No había nadie. Me preparé un capuchino con un croisant. Todo estaba demasiado tranquilo. Lavé la taza y con sigilo salí de la cocina. Miré a todos lados pero no había ninguna mosca. Me puse en la cabeza del barco. Miré hacia todos los lados. Nada, no veia nada por culpa de tanta niebla. ¿Qué estaba pasando? Fui a investigar todo el barco. Nadie dormía. Nadie entrenaba. Nadie estaba. Subí a la parte más alta del barco. Por suerte se podía ver algo. Una isla en la nada. No muy lejos del barco. Salté de tal forma que pude llegar a la orilla. Había mucha niebla pero no tanta como en el barco. Me adentré a esa niebla tan extraña. Escucha a todos los animales. Por desgracia no podían ayudarme o giarme al no tener los anillos. "Espera... soy la hija de un mago y una mujer felino. Sería extraño que no pudiese crear magia"

Me senté en forma de indio y junté las manos. Me concentré en el sonido de un pájaro y le pedí que me guiara hacia algún pueblo. El pájaro se acercó a mi i voló en direccion al pueblo. Me transformé completamente en gepardo para ir más deprisa.

Llegué al pueblo. Si se le pudiese llamar así. Todo eran ruinas. Entré en una casa y sólo había huesos de personas. "¿Que le ha pasado a este pueblo?"

Seguí investigando hasta que una mano me agarró por detrás. Con una me aferraba a el y con la otra me tapaba la boca. Iba a soltarme pero el hombre me giró para que estuviésemos cara a cara y me abrazó.

- ¿Quien eres? -empujandolo para que me soltase

- Krista... -apretandome más

- Respóndeme a la pregunta si no quieres salir herido -rugiendo como un león

- Te quiero -susurrandome al oído

Lo empuje con la fuerza del tigre y lo tiré al suelo. Por fin le pude ver la cara. Pero esta no tenía carne. Era hueso. Pero ese hueso se transformó en arena. "¿Qué coño está pasando?"

- ¡Krista!

Me dirigí a la voz ya que era la de Nami.

- ¡Socorro! ¡Ayúda-mm!

- ¿¡Nami!?

No podía ver nada y encima mi compañera estaba en peligro. Mi ira aumentó y los ojos rojos aparecieron. Salté alto y caí con fuerza al suelo para que la niebla desapareciera. Por fin pude ver a Nami. Esta estaba atada. Desaté a Nami lo más rápido posible pero, algo me quiso atacar por detrás. Por suerte pude esquivarlo a tiempo y darle una patada en la boca. Agarré a Nami y me la llevé a la niebla para que la persona no nos pudiese ver.

- Nami -susurrando- ¿Que está pasando?

- Nos han secuestrado.

- ¿Y como es que a mi no?

- No lo se...

- Sabes donde están los demás?

- Si... Pero no puedo ver na-

Me concentré en el viento y pude hacer desaparecer la niebla.

- Ala... están en aquel castillo.

- Vamos.

Nos fuimos al castillo. Había muchas puertas y escaleras. Me guíe por el olor de mis compañeros. Los pudimos encontrar a todos en una habitación desmayados menos a Zoro y a Luffy.

- Ayudame a desatarlos.

- Si.

Los desatados y despertamos.

- Chicas... el peliverde y el cabeza hueca están en lo más alto. Intentan matarlos.

- Aún no entiendo como os han podido haber capturado y a mi no...

Subí a lo más alto con el reto. Pude ver a Luffy esposado y a Zoro al otro lado pero con las manos arriba atado también.

- ¿Como habéis escapado? -dijo un hombre medio moreno, alto, con una capa de la marina y con un puño de lava

- Akainu... -Nami con unos ojos asustados y sorprendidos

- No importa. Mataré al sombrero de paja -alzó el puño

- Ni de coña.

Salté de encima de Akainu haciendo que callese al suelo.

- ¿Quién eres niña estúpida? -mirámdome- Espera... ¿tu no estabas muerta?

- ¿Me conoces?

- levantándose- Marseline... Tsk

- ¿Cómo conoce a mi madre?

- ¿Tu madre? ¿No eres ella? Esto es sorprendente. Y yo pensando que había matado a toda la familia...

- Entonces... No eran piratas...

Lo siento, Luffy [Luffy x Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora